187 - ESTUDIO ENDO-KIDNEY: ESTADO DEL CRIBADO Y DERIVACIÓN DE LOS PACIENTES CON ENFERMEDAD RENAL CRÓNICA DESDE LOS SERVICIOS DE ENDOCRINOLOGÍA Y NUTRICIÓN EN ESPAÑA
1Departamento de Endocrinología y Nutrición, Clínica Universitaria de Navarra, Pamplona. 2Servicio de Endocrinología y Nutrición, Hospital Universitari Trias i Pujol, Badalona. 3Servicio de Endocrinología y Nutrición, Hospital Universitario Virgen de la Victoria, Málaga. 4Servicio de Nefrología, Hospital Universitario Puerta de Hierro, Madrid. 5Servicio de Nefrología, Hospital Universitario Son Llàtzer, Palma de Mallorca. 6Servicio de Endocrinología y Nutrición, Hospitales Universitarios San Roque, Las Palmas de Gran Canaria. 7Servicio de Endocrinología y Nutrición, Hospital Universitario Central de Asturias, Oviedo. 8Departamento de Medical Affairs, Boehringer Ingelheim España, S.A., Sant Cugat del Vallès. 9Servicio de Endocrinología y Nutrición, Complejo Hospitalario Universitario, Toledo.
Introducción: La enfermedad renal crónica (ERC) afecta al 10% de la población mundial y su detección precoz es crucial. Dado el alto riesgo renal en pacientes con diabetes y otras patologías metabólicas, los servicios de endocrinología y nutrición (SEN) son un punto clave en su identificación y manejo. El estudio ENDO-KIDNEY analiza el cribado y derivación de pacientes con ERC en España desde los SEN.
Métodos: Estudio descriptivo, transversal y multicéntrico realizado en España. Se utilizó un cuestionario dirigido a especialistas en endocrinología y nutrición, que realizan su actividad laboral en España, para recoger datos sobre cribado y derivación de pacientes con ERC.
Resultados: Participaron un total de 76 especialistas en endocrinología y nutrición, de 29 provincias distintas, de los cuales el 59,2% eran mujeres y contaban con una media de 14,7 años de ejercicio profesional. Según los encuestados, el 42% de los centros cuenta con un protocolo para derivación al servicio de nefrología, siendo los criterios más comunes el estadio de ERC (90,6%), el grado de albuminuria (84,4%) y la velocidad de progresión (81,3%). El 94,7% manifiesta realizar cribado activo de ERC, principalmente en pacientes con diabetes (90,3%), obesidad (83,3%) e hipertensión (70,8%). Solo un 17,1% reporta tener un programa formal de cribado para pacientes de alto riesgo, y apenas la mitad de estos está integrada en el sistema informático. El escaso conocimiento profundo sobre ERC más allá de la diabetes tipo 2 (51,3%) y la falta de tiempo (47,4%) fueron identificados como principales barreras.
Conclusiones: La mayoría de los endocrinólogos señala realizar cribado activo de ERC, aunque solo una minoría cuenta con protocolos de derivación o ayudas informáticas. Además, se evidencian áreas de mejora en formación específica y colaboración estructurada con los servicios de nefrología.



