Introducción: El notable incremento de la esperanza de vida en las últimas décadas ha conducido a un aumento de la edad media de los pacientes intervenidos en los servicios de Cirugía General. Entre ellos destaca la hernia inguinal, una patología cuya prevalencia se incrementa con la edad.

Objetivos: Analizar la morbimortalidad y los resultados de la cirugía de la hernia inguinal en pacientes de 80 años o más.

Métodos: Estudio descriptivo, retrospectivo, que incluyó a los pacientes #1 80 años intervenidos de hernia inguinal entre abril de 2021 y abril de 2024.

Resultados: Se intervinieron un total de 104 pacientes, con una edad media de 84 años, siendo el 76% varones. La mayoría presentaba comorbilidades relevantes como hipertensión arterial (73,1%), cardiopatía (42,3%), sobrepeso u obesidad (33,7%) y diabetes mellitus tipo 2 (18,3%) entre otras. Además, un 24% de los pacientes recibía tratamiento anticoagulante y un 23,1% antiagregante. Respecto al estilo de vida, el 72,1% se encontraba en situación de desempleo y el 55,8% no realizaba ningún tipo de actividad física. Se registraron un total de 114 hernias, de las cuales el 87,6% eran primarias. Predominaron las hernias laterales (69%) y la localización derecha (61,5%). La forma de presentación clínica más frecuente fue como tumoración indolora (51,3%). La intervención se realizó de forma electiva en el 80,8% de los casos, siendo urgente en el 16,3% (por estrangulación o incarceración). La técnica quirúrgica más empleada fue la hernioplastia abierta (95,6%), con predominio del procedimiento tipo Lichtenstein y, utilizando en la mayoría de los casos mallas compuestas adhesivas. El 69% de las cirugías se realizaron en régimen de ingreso hospitalario, con una duración media de 49 minutos y una estancia media de 1,55 días. La tasa de complicaciones posoperatorias fue baja: hematoma en el 5,8% de los casos, infección superficial de herida en el 1% y otras complicaciones como colección posquirúrgica o íleo paralítico en un 6,7%. No se registraron reintervenciones. El 94,2% de los pacientes completó la revisión al primer mes posoperatorio; en el seguimiento al sexto y duodécimo mes, se mantuvieron controles en el 48,1% y 31,7% respectivamente. Durante este periodo se observaron 2 recidivas herniarias y 4 hernias contralaterales de novo.

Conclusiones: Pese a los factores de riesgo asociados a la edad avanzada, la cirugía de la hernia inguinal en pacientes octogenarios se muestra como un procedimiento seguro, con bajas tasas de complicaciones y recidiva. La edad avanzada no debería considerarse, por sí sola, un factor limitante para su indicación quirúrgica.