Objetivo docente: Revisar la definición de nódulos pulmonares subsólidos (NPS). Describir los diagnósticos diferenciales mediante la caracterización en la TC, asociando la clínica y los factores de riesgo en pacientes con NPS. Revisar las recomendaciones actuales del seguimiento de los NPS, así como las indicaciones del PET/TC. Describir los principales medios de abordaje diagnóstico y terapéutico de los NPS, haciendo un especial énfasis en el papel del radiólogo.

Revisión del tema: Los nódulos pulmonares se definen como una opacidad redondeada menor de 3 cm de diámetro. Se pueden clasificar en nódulos sólidos y subsólidos cuando su atenuación es en vidrio deslustrado, o esta atenuación con alguna parte sólida. Adicionalmente los NPS pueden ser agrupados según su etiología como nódulos transitorios o persistentes, ya sean benignos (condiciones infecciosas e inflamatorias) o malignos (adenocarcinoma, metástasis). Para el seguimiento de los NPS, aparte de las características de atenuación, se debe tener en cuenta el diámetro, así como si son solitarios o múltiples, durando la vigilancia por lo menos 3 años debido a que presentan un crecimiento más lento que los nódulos sólidos. El manejo va estar influenciando a su vez por las características mencionadas anteriormente, variando desde tratamientos conservadores, donde el radiólogo puede tener una implicación importante, hasta la resección quirúrgica, ya sea con marcaje con arpón o con guía ecográfica intraoperatoria.

Conclusiones: Es importante que el radiólogo conozca la caracterización mediante el TC de los NPS, así como sus diagnósticos diferenciales para poder realizar un adecuado seguimiento, y valorar su posible implicación en el manejo terapéutico.