Objetivo docente: Conocer la técnica utilizada para realizar ecografía torácica. Identificar la anatomía normal visualizada mediante esta técnica. Reconocer aplicaciones de la ecografía torácica.

Revisión del tema: La ecografía torácica se realiza con un transductor de 2-5 MHz curvilíneo que permite visualizar las estructuras profundas a través de una ventana acústica pequeña, utilizando el modo en escala de grises y Doppler color. Elevar el brazo del paciente incrementa el espacio intercostal y facilita la exploración. El tórax posterior es mejor visualizado con el paciente sentado, mientras que el tórax anterior y lateral se evalúa en posición decúbito lateral. La pared torácica normal aparece como capas ecogénicas de tejidos blandos y las costillas se observan por debajo como estructuras curvilíneas con sombra acústica posterior. Con el transductor lineal de alta resolución la pleura parietal y visceral se ven como dos líneas ecogénicas profundas a las costillas. El pulmón está lleno de aire y no permite visualizar el parénquima pulmonar normal. El diafragma se identifica como una línea ecogénica de 1mm de grosor por encima del hígado y el bazo. La exploración ecográfica transtorácica es útil para el diagnostico de afectación del espacio pleural, parénquima pulmonar, pared torácica y diafragma; siendo cada vez más utilizada como guía en procedimientos intervencionistas.

Conclusiones: La ecografía torácica sirve como guía de procedimientos intervencionistas y permite evaluar la patología del parénquima pulmonar, pleural y de la pared torácica. Esta técnica es adecuada para realizarse en pacientes de la UVI, cuando la radiografía oculta o simula anormalidades clínicamente significativas.