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Educación Médica Programa en simulación clínica del grado de Medicina de la Universidad Francis...
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Vol. 26. Núm. 6.
(Noviembre - Diciembre 2025)
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Programa en simulación clínica del grado de Medicina de la Universidad Francisco de Vitoria (1.a parte): estructura y actividades
Clinical simulation program of the Francisco de Vitoria University medical degree (1st part): Structure and activities
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Sophia Denizon Arranz
Autor para correspondencia
sophia.denizon@ufv.es

Autor para correspondencia.
, Emilio Cervera Barba, Patricia Chica Martínez, Alonso Mateos Rodríguez, Salvador Espinosa Ramírez, Diego Palacios Castañeda, Fernando Caballero Martínez
Facultad de Medicina, Universidad Francisco de Vitoria, Madrid, España
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Tabla 1. Distribución de actividades e itinerarios formativos del currículo de simulación del grado de Medicina
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Tabla 2. Planificación del itinerario de simulación integral por curso académico, de 3o a 6o
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Resumen

La simulación clínica es una metodología esencial para la adquisición de habilidades de los alumnos de Ciencias de la Salud. En esta primera parte del artículo, se describen las infraestructuras de los centros de simulación clínico y quirúrgico de la Universidad Francisco de Vitoria, y las actividades y metodologías del currículo formativo en simulación clínica del grado de Medicina. Se detallan los distintos tipos de actividades, su planificación, desarrollo y evaluación.

Palabras clave:
Simulación
Estudiantes de Medicina
Currículo
Pacientes simulados
Educación de pregrado en Medicina
Abstract

Clinical simulation is an essential methodology for the acquisition of skills by students in Health Sciences. This first part of the article describes the infrastructure of the clinical and surgical simulation centers at the Universidad Francisco de Vitoria, as well as the activities and methodologies of the clinical simulation curriculum within the Medicine degree. It details the different types of activities, their planning, development, and evaluation.

Keywords:
Simulation training
Medical student
Curriculum
Patient simulation
Undergraduate medical education
Texto completo
Introducción

La simulación clínica ha demostrado ser una herramienta educativa de gran impacto en la formación de profesionales sanitarios, tanto en el grado como en el posgrado, mejorando la adquisición de competencias clínicas, la seguridad del paciente y el razonamiento clínico, como refleja ampliamente la literatura médica1,2. Nuestra universidad ha incorporado, de forma estructurada, la simulación clínica en las primeras etapas del grado en Medicina, como parte del esfuerzo por mejorar la formación de los estudiantes a través de metodologías docentes innovadoras. Esta implementación presenta retos específicos, ya que la simulación ha sido tradicionalmente utilizada en programas de posgrado, donde los estudiantes cuentan con un mayor nivel de conocimientos, habilidades clínicas y experiencia práctica. La adaptación de esta metodología al contexto del grado requiere un diseño cuidadoso de los escenarios, una progresión ajustada a la curva de aprendizaje y una estrecha coordinación docente. En este artículo describimos la estructura y el programa de simulación clínica desarrollado en nuestra facultad. En un segundo artículo abordaremos su proceso de implementación y las principales dificultades encontradas, junto con las estrategias que hemos empleado para superarlas.

El Centro de Simulación Clínica Avanzada de la Universidad Francisco de Vitoria. Estructura y dotación

El Centro de Simulación Clínica Avanzada (CSC) de la Universidad Francisco de Vitoria (UFV) fue construido en 2012, siendo uno de los primeros centros de simulación vinculados a facultades de medicina y construidos dentro de un campus universitario, y no en instalaciones de hospitales universitarios. Desde un principio, se concibió para ofrecer a los alumnos de grado una formación práctica previa y complementaria a las prácticas clínicas, en un entorno seguro y controlado, así como a los profesionales sanitarios unas instalaciones con dotación tecnológica avanzada y equipos docentes especializados para integrar la simulación en su formación continuada.

Tras una ampliación en 2015, el centro dispone en la actualidad de 900 m2, con diversos ambientes asistenciales simulados. Su estructura cuenta con: 3 salas polivalentes y divisibles para debriefing, talleres, seminarios teóricos o de habilidades clínicas, dotadas con sistema de proyección, pantallas, megafonía, equipos informáticos y acceso en red a todas las instalaciones del centro en tiempo real; 7 consultas con mobiliario y material sanitario para la simulación de escenarios clínicos, entrenamiento de habilidades comunicativas, pruebas ECOE, etc., de las cuales 2 están dotadas con cámara de Gessel; una estancia que simula un domicilio; 2 boxes de urgencias; un quirófano/paritorio; una sala de reanimación posquirúrgica; una sala de hospitalización; una consulta ambientada para la atención farmacéutica; una zona para higiene prequirúrgica; un mostrador de atención a usuarios (servicio de admisión o unidad administrativa); y un control de enfermería hospitalario.

Todos los espacios están dotados de megafonía y sistema de grabación de audio y vídeo. En el exterior del CSC se emplazan una UVI móvil medicalizada y un coche para entrenar maniobras de Rautek. Próximamente, el actual CSC será sustituido por otro con una superficie 2,5 veces superior a la actual.

El CSC está dotado de un avanzado sistema integrado de seguimiento del alumnado, control del aprendizaje y gestión de las tareas docentes a través de una red segura accesible por Internet (Learning Space©).

La dotación de simuladores del CSC incluye entrenadores por partes, simuladores de media fidelidad para habilidades (incluyendo ecográficos y de soporte vital) y simuladores de alta fidelidad fisiológica y anatómica.

El equipo gestor del CSC está constituido, en la actualidad, por una directora académica, una directora de operaciones, 2 técnicos de simulación y una administrativa. El equipo docente de instructores de simulación del grado de Medicina lo constituyen 68 profesores de la facultad. Además de medicina, otros 7 grados universitarios realizan simulación clínica con sus respectivos profesores (enfermería, farmacia, nutrición, fisioterapia, psicología, criminología e ingeniería biomédica). Para la simulación integrada de habilidades comunicativas y sociales en grado y posgrado, el CSC cuenta, desde 2014, con 52 actores formados en un programa de pacientes simulados (PPS_UFV), asociado a ASPE (Association of Standardized Patient Educators)3.

El Complejo de Simulación de la UFV se complementa con un Centro de Simulación Quirúrgica (CSQ) de 1.500 m2, diferenciados en 2 zonas especializadas: zona de anatomía y zona de cirugía experimental avanzada, con 2 aulas, zona de esterilización, zona quirúrgica con 2 quirófanos (uno de microcirugía y otro de cirugía experimental avanzada), y un animalario acreditado para formación e investigación y uso con animal experimental pequeño (rata y conejo) y grande (cerdo y oveja). Esta estructura permite simulación con simuladores sintéticos o virtuales, orgánicos, con donantes y en animal experimental. Las visitas virtuales del CSC y el CSQ pueden realizarse desde este enlace: https://formacionmedicaufv.es/simulacion/instalaciones-2/.

En esta primera parte del artículo, nos centraremos en la descripción del currículo en simulación clínica del grado de Medicina que se desarrolla principalmente en el CSC.

El programa de simulación clínica de Medicina de la Universidad Francisco de Vitoria

El programa de simulación clínica se creó con el objetivo de mejorar la competencia de los alumnos en habilidades clínicas, tanto técnicas como no técnicas, en un entorno seguro y controlado, donde se pueden establecer objetivos graduales y adecuados al avance competencial del alumno, y medir su adquisición4.

El programa comienza en el primer curso del grado, y los alumnos se forman en entornos de simulación en todos los cursos, hasta sexto de medicina. El programa tiene 2 tipos de itinerarios, troncales y transversales: el primero comprende 5 itinerarios de talleres de habilidades y el segundo, 3 itinerarios de escenarios de simulación. Además, existen talleres de habilidades o escenarios de simulación no vinculados a estos itinerarios, como actividades formativas complementarias de asignaturas concretas (por ejemplo, escenarios de parto en obstetricia, escenarios de urgencias pediátricas, etc.).

En cómputo total, cada alumno realiza 447,5 horas en actividades relacionadas con la simulación: 310 horas en el itinerario de talleres de habilidades clínicas y 137,5 horas en el de escenario de simulación clínica. En la tabla 1 se muestra información detallada.

Tabla 1.

Distribución de actividades e itinerarios formativos del currículo de simulación del grado de Medicina

CRM: Crisis Resource Management; DESA: desfibrilador semiautomático; PS: paciente simulado; RCP: reanimación cardio-pulmonar; SVI: soporte vital inmediato.

En todos los itinerarios mencionados se integran elementos de seguridad del paciente de forma transversal, siendo el componente vertebrador de nuestro programa de simulación y el primer paso para abordar, ya en el grado, la estrategia de seguridad del paciente previo al período de residencia5.

Itinerarios de talleres de habilidades

Los talleres de Semiología se imparten en una asignatura independiente (Métodos Clínicos I, en 3.°) y como parte de las distintas asignaturas de patología médico-quirúrgica, con el objetivo de conseguir un aprendizaje significativo en anamnesis y exploración clínica, mediante el uso de simuladores y pacientes simulados.

El itinerario de Ecografía, con simuladores ecográficos y ecógrafos reales, comienza con anatomía ecográfica en 2.° y se complementa con la semiología ecográfica en la patología médico-quirúrgica de los cursos posteriores, con la pretensión de que los egresados dominen el uso básico del ecógrafo y la interpretación de sus imágenes.

El itinerario de Cirugía incluye el uso de simuladores y piezas anatómicas de animales para técnicas invasivas y quirúrgicas básicas, y microcirugía.

El itinerario de Anestesiología utiliza simuladores para practicar técnicas ventilatorias e invasivas de la especialidad.

Por último, existe un itinerario de habilidades de razonamiento clínico, apoyado por distintos simuladores según la enfermedad y especialidad.

Itinerarios de escenarios de simulación

De los 3 itinerarios mostrados en la tabla 1, nuestro programa es singular por el itinerario en habilidades de comunicación, que, por considerarlas nucleares en la formación de los futuros médicos, tienen una relevancia y consideración especial en el plan de estudios. De 3.° a 6.°, los alumnos se enfrentan individualmente a pacientes simulados con los que trabajan estructura y orden de la anamnesis, herramientas básicas de comunicación, manejo de la agresividad contra profesionales, facilitación de cambios de conducta, toma de decisiones compartida, cómo dar malas noticias, etc. En algunos escenarios, el paciente simulado realiza un feedback inmediato al alumno posteriormente a su actuación.

Los alumnos y profesores trabajan con las videograbaciones de cada alumno para la reflexión, autoevaluación y evaluación individual. El alumno revisa su video y se autoevalúa mediante una lista de cotejo con ítems de entrevista clínica. Asimismo, los alumnos redactan la historia clínica del paciente, que es corregida posteriormente por los profesores6–8.

El itinerario de simulación en Urgencias incluye desde la RCP básica en 1.° hasta la RCP pediátrica o el soporte vital inmediato al final del grado. Además, los alumnos de Medicina y Enfermería de último curso realizan simulación integral interdisciplinaria en urgencias con trabajo en equipo (CRM, Crisis Resource Management).

El último de los itinerarios, de Simulación Integral, se describe en detalle a continuación.

Planificación del itinerario de Simulación Integral transversal del grado

Como cualquier proceso de planificación curricular, la implementación de un programa de simulación clínica debe establecer objetivos, contenidos, metodologías y tiempos, e implementarse y evaluarse9.

En la tabla 2 se resumen los objetivos, metodologías, zonas de simulación utilizadas, la organización de alumnos, el número de escenarios y los tiempos invertidos en cada curso y cuatrimestre. Actualmente, se realizan en 4.° y 5.° curso 8 escenarios de simulación por curso, previos a los períodos de prácticas clínicas cuatrimestrales. Cada sesión dura 1,5 horas y se compone de un caso de simulación clínica y el posterior debriefing o feedback por el instructor o el paciente simulado, según corresponda. Se prioriza que los alumnos participen de forma activa y lo más individualizada posible y, para ello, los grupos están constituidos por 3 a 5 alumnos, que reciben previamente la convocatoria de la actividad en su correo electrónico.

Tabla 2.

Planificación del itinerario de simulación integral por curso académico, de 3o a 6o

CRM: Crisis Resource Management; ECG: electrocardiograma; EF: exploración física; JC: juicio clínico; PC: pruebas complementarias; Rx: radiología.

Para definir los objetivos específicos del programa, realizamos previamente un análisis de situación sobre las competencias y resultados de aprendizaje establecidos para cada asignatura y por cursos. Para ello, se recogieron las competencias que aparecían en las guías docentes de nuestra facultad, así como en todos los bloques definidos para el grado de Medicina en el Libro Blanco de ANECA10 y la Orden Ministerial que especifica los objetivos del grado11. Se planificó el cumplimiento de dichas competencias en la realización de las distintas actividades prácticas de cada asignatura, tanto las realizadas en las prácticas clínicas en centros sanitarios como en el campus, incluidas las actividades e itinerarios de simulación.

En el análisis se detectaron puntos fuertes y áreas de mejora, empezando a trabajar desde las necesidades formativas.

Del análisis, establecimos los objetivos específicos para el itinerario de simulación integral de cada curso, los que aparecen en la tabla 2.

En el 6.° curso se prioriza el trabajo en equipo mediante la simulación con escenarios de CRM interprofesional. Se trata de ayudar a nuestros alumnos a identificar los errores causados por el factor humano, que juega un papel fundamental en situaciones de urgencia12,13.

Implementación del itinerario de Simulación Integral transversal del grado

La metodología desplegada respeta los paradigmas habituales en simulación clínica, que se expondrán a continuación: zonas de simulación, distribución de tiempos en los escenarios, diseño de los casos y uso de simuladores14. Finalmente, comentaremos el impacto evaluativo del itinerario en el currículo del alumno.

Zonas de simulación

Una vez definidos los objetivos, vamos acompasando las metodologías con las diferentes zonas de simulación15. En 3.° utilizamos el trabajo en la zona 1, con feedback directo in situ por instructores, y en la zona 2 con pacientes simulados. En los cursos superiores preferimos, para conducir los aprendizajes, la no interrupción del escenario y el uso de la reflexión tras la acción. Utilizamos desde la zona 0, donde trabajan solos en un espacio o plataformas virtuales, hasta la zona 3, donde incidimos en el trabajo en equipo en CRM.

Distribución de tiempos en los escenarios

Previas al desarrollo de los escenarios hay 2 fases preparatorias:

  • Introducción: a esta etapa se dedican 60 minutos al inicio de curso. Es el momento de explicar los objetivos que vamos a trabajar con ellos durante el curso, cómo vamos a llevarlos a cabo y cómo les vamos a evaluar. Asimismo, recordamos las bases didácticas de la simulación, y los compromisos y normas del CSC: confidencialidad, ficción, uso de vestuario clínico y puntualidad.

  • Precarga documental al alumno: unos días antes de comenzar cada escenario, se les envía a los alumnos información teórica relacionada con lo que trabajarán en el escenario de simulación. Se realiza con un documento sencillo, resumen, enlace a alguna clase, algoritmo, etc. Esto permite preparar los contenidos que posteriormente se pondrán en práctica.

La literatura recoge que las experiencias de entrenamiento basadas en simulación incorporan 3 momentos principales16. Acorde con ello, la dinámica de las actividades se desarrolla de la siguiente forma en nuestro centro:

  • Briefing inicial: es un breve espacio de unos 5 minutos, donde se pretende crear un ambiente de trabajo estimulante, participativo, seguro y confiable. Se aclaran los objetivos, se recuerdan los compromisos y normas, y se presentan tanto la situación clínica como los roles de los alumnos en el escenario.

  • Escenario simulado en grupo con instructor: los alumnos inician la actividad en el área correspondiente de consultas, boxes de urgencia, hospitalización, quirófano o domicilio. El instructor manejará los simuladores robóticos de alta fidelidad o, en su caso, contará con un paciente simulado o actuará él mismo como tal, ayudado por un maniquí para el momento de la exploración física. Los alumnos se reparten las distintas tareas: anamnesis, exploración física, solicitud e interpretación de pruebas diagnósticas, manejo del caso e información al paciente. Esta actuación puede ser continuada, es decir, los alumnos intervienen, uno detrás de otro, sin pausas, y se hace un único debriefing sobre los distintos momentos simulados; o bien, podemos plantear un primer debriefing sobre la anamnesis y exploración, y después continuar con la parte diagnóstica y de manejo del caso, y un nuevo debriefing posterior. Es el instructor quien decide la metodología dependiendo de la destreza del grupo de alumnos en el manejo de los casos. A inicio del curso suelen necesitarse más pausas para reflexionar y recordar los procedimientos de la anamnesis o la exploración física.

La actuación de los alumnos en el escenario dura de 10 a 15 minutos. Se da tiempo suficiente para que los alumnos completen todas las tareas y el instructor pueda valorar su competencia. Se evita una duración prolongada por el riesgo de distracción de los objetivos docentes del escenario.

  • Debriefing: para esta etapa se dedican aproximadamente 25–45 minutos, y su implementación nos permite explorar el razonamiento y las emociones (modelo mental) que subyacen en las acciones de los alumnos durante el escenario17,18. La práctica reflexiva que se lleva a cabo con alumnos de grado tiene un matiz diferente a la desarrollada con profesionales de posgrado, debido a la falta de experiencia clínica del alumno. Por ello, en el debriefing utilizamos prioritariamente un análisis Plus/Delta y, en algunas ocasiones, un Plus/Delta/Plus o incluso la indagación19. En ocasiones, es preceptivo dar un feedback directo sobre algún aspecto, que no suele ser necesario en posgrado. En el cierre del debriefing se trata de rescatar los aprendizajes personales de la sesión para favorecer su aplicabilidad en situaciones reales, realizando una crítica constructiva de su participación. Normalmente dedicamos al cierre los 5 minutos finales.

A posteriori, los alumnos redactarán la historia clínica del caso, que serán corregidas posteriormente, bien por un instructor, bien por otro compañero a partir de una asignación aleatoria de pares, y con confrontación de esa corrección con la del profesor. Instructores y alumnos cuentan con un listado de cotejo para la corrección. Además, se habilita un foro para la resolución de dudas. La tarea de redacción de historia clínica tiene un objetivo formativo para los alumnos y evaluador para el equipo docente. De este modo, la simulación se va adaptando a sus necesidades, y el equipo docente decide si continuarán redactando historias clínicas, según el nivel de competencia adquirido escenario a escenario. En ocasiones, también se detectan lagunas de conocimientos o habilidades que se trasladan al claustro de profesores para reforzar los contenidos impartidos o implementar nuevos aprendizajes en los escenarios de simulación.

Diseño de casos de los escenarios de simulación

El diseño se adapta a los objetivos y cursos. En el 3.er curso, los casos están diseñados en torno al abordaje de síndromes frecuentes y no urgentes: fiebre, disnea, tos, dolor abdominal, etc. En 4.° y 5.°, la complejidad y gravedad de los casos va aumentando al ritmo de su competencia. Aunque contamos con un repositorio de casos clínicos, la edición de nuevos casos y la actualización de los actuales se realiza por los instructores del curso correspondiente. El instructor responsable de cada escenario de simulación redacta además una ficha orientativa para el grupo de instructores que participarán en el mismo escenario, donde se recogen sintéticamente los contenidos clave que responden a los objetivos planteados en el caso clínico del escenario. De esta forma, aseguramos la homogeneidad de la docencia entre instructores.

Es fundamental ensayar los escenarios entre los instructores y probarlos para verificar su factibilidad, adecuar los tiempos, garantizar la fidelidad conceptual y psicológica, comprobar el funcionamiento correcto de los simuladores, etc. En los casos donde utilizamos pacientes simulados, se les entrena y estandariza para el papel y el feedback posterior a los alumnos.

Empleo de simuladores

Según los objetivos de cada escenario, la simulación se lleva a cabo con los distintos simuladores robóticos o maniquíes detallados más arriba o con pacientes simulados, que pueden ser actores o los propios instructores. En este caso, se puede realizar una simulación híbrida, donde los instructores que actúan tienen la ayuda de simuladores para habilidades clínicas.

Impacto evaluativo de los escenarios de simulación integral

Los escenarios de simulación integral se utilizan como metodología docente en distintas asignaturas del grado, y sus criterios evaluativos son los mismos en todas ellas. Cada guía docente contempla que, para superar la asignatura, es obligatoria la asistencia a los escenarios. En cada escenario individual se evalúan las actitudes y las habilidades adquiridas durante su realización, así como la participación activa de cada alumno, tanto en los escenarios como en los debriefing. Pero solo se utiliza un criterio de aptitud, no de evaluación sumativa con nota. En estos momentos de su formación utilizamos la simulación como un elemento formativo, y consideramos que lo más importante para su aprendizaje es la reflexión promovida en el debriefing, y la evaluación sumativa condiciona su participación y aprovechamiento. Este ha sido uno de los aspectos más debatidos en nuestro itinerario de simulación, que comentaremos en la segunda parte de este artículo.

No obstante, sí necesitamos evaluar el impacto del itinerario formativo de escenarios de simulación integral en su aprendizaje. Por este motivo, a final de curso evaluamos la competencia clínica de los alumnos.

En el 4.° curso se realiza una mini-ECOE de 2 o 3 estaciones para evaluar las competencias adquiridas en habilidades técnicas y no técnicas. En 5.° y 6.° se mide mediante pruebas ECOE a final de cada curso. El resultado que obtiene cada alumno en las ECOE impacta en la calificación final de las asignaturas donde están vinculadas. Consideramos que los itinerarios de simulación son la parte formativa que entrena a los alumnos para la prueba ECOE.

Evaluación del itinerario de Simulación Integral transversal del grado

Para evaluar el itinerario, nos basamos en los resultados de las siguientes mediciones, que nos ayudan a su mejora continua:

  • Evaluación de la efectividad del itinerario por los resultados de aprendizaje: para ello, analizamos los resultados de las mini-ECOE o ECOE correspondientes. Desde 2021, la mini-ECOE de 4.° se realiza al inicio y final de curso. La diferencia de resultados en los 2 momentos se compara al finalizar el curso. Además, se analiza la evolución de la competencia de cada alumno entre los escenarios individuales que realizan en el primer y segundo cuatrimestre, mediante la evaluación cualitativa de los instructores en los grupos de alumnos. En un estudio en marcha, donde seguimos la evolución en adquisición de competencias (anamnesis, exploración física, comunicación, redacción de historia clínica, aspectos preventivos, profesionalismo), medidas con mini-ECOE de pacientes simulados en el primer y octavo escenario de 4.° y 5.°, los resultados muestran una mejora en la mayoría de las competencias entre el inicio y el fin de curso, y entre el curso inferior y el superior, al ser seguidos durante los 2 cursos. En otro estudio, se analizaron las simulaciones tercera, sexta y octava de todos los alumnos de 4.° y 5.° curso del año escolar 2022–2023. En el análisis de los resultados se mostraron diferencias significativas en la evaluación global y en la evolución del aprendizaje entre los 3 escenarios evaluados en ambos cursos, con una mejora más pronunciada en el 5.° curso en comparación con el 4.°. Las puntuaciones obtenidas en los ítems evaluados en las áreas de anamnesis, exploración física y comunicación aumentaron progresivamente a medida que los estudiantes avanzaban tanto en los escenarios como en el curso académico20.

  • Evaluación de los resultados de la encuesta de autopercepción: previo al comienzo de los escenarios de cada cuatrimestre, los alumnos cumplimentan un cuestionario de autopercepción sobre las competencias que se trabajan en los escenarios, que se repite al finalizar los escenarios. En un estudio pudimos observar una mejora en la autopercepción de la competencia estadísticamente significativa entre el inicio y fin de curso en todos los alumnos de 3.°, 4.° y 5.° curso21. En otro estudio, se demostró la mejora en la resiliencia y la autopercepción de los alumnos de Medicina y Enfermería de último curso tras realizar el CRM22.

  • Análisis de las videograbaciones: el análisis de los escenarios por los profesores, en los que se valora el desarrollo de las actividades según lo previsto y la adquisición de las competencias por los alumnos.

  • Evaluación de las historias clínicas: las historias clínicas que realizan los alumnos tras finalizar los escenarios, corregidas por pares e instructores, según un listado de cotejo. En un estudio realizado en 2021, evaluamos la competencia de los alumnos en la redacción de historias clínicas mediante un listado de cotejo de 59 ítems. Comprobamos que los ítems fueron adecuadamente cumplimentados, en concordancia con lo ocurrido en la entrevista videograbada, por el 89% de los alumnos23.

  • Evaluación de la satisfacción del alumno con los escenarios: como parte de las medidas de garantía de calidad del programa de simulación clínica, se administra de forma sistemática una encuesta de satisfacción anónima a los alumnos de 3.°, 4.°, 5.° y 6.° curso, al finalizar cada cuatrimestre. Esta evaluación permite realizar un seguimiento continuo del impacto del programa y fundamentar decisiones orientadas a la mejora continua. El alumno califica el desarrollo y utilidad de la simulación, así como a los instructores21. Esta encuesta incluye una escala tipo Likert de 6 puntos (donde 1 representa la menor satisfacción y 6 la mayor). De forma general, la tasa de participación media en las encuestas de los distintos cursos se sitúa en torno al 75%, lo que permite una valoración representativa del impacto del programa. En el curso 2023–2024, la puntuación media global obtenida fue de 5,20. Los resultados en la percepción de mejora en el conocimiento clínico (media = 5,15), en habilidades técnicas (media = 5,08), en habilidades de comunicación (media = 5,18) y en actitudes profesionales (media = 5,06) muestran el elevado nivel de satisfacción general y que el programa está cumpliendo sus objetivos pedagógicos. También se valoraron positivamente la estructura y frecuencia de los escenarios, así como las simulaciones individuales con pacientes simulados. En las opiniones abiertas, los estudiantes destacaron como especialmente valiosas los escenarios con pacientes simulados y el papel del debriefing estructurado como herramienta clave para el aprendizaje. De forma recurrente, sugirieron aumentar la frecuencia de las actividades y fomentar una mayor implicación de los profesores de asignatura en la integración curricular de los escenarios.

  • Evaluación de la satisfacción del instructor: la satisfacción del equipo de instructores del programa de simulación clínica es un elemento clave para garantizar la calidad y la continuidad del proyecto. Para ello, se han establecido mecanismos periódicos de revisión y mejora que permiten detectar necesidades, reforzar aciertos y promover una enseñanza coordinada y eficaz.

Se realizan reuniones periódicas en las que el equipo de instructores revisa las incidencias acontecidas durante las sesiones de simulación, valora los resultados de las actividades realizadas y ajusta los objetivos docentes y la planificación de los escenarios siguientes. Estas reuniones son, además, un espacio compartido donde los instructores pueden expresar con libertad lo que ha funcionado bien, así como los retos a los que se enfrentan durante la docencia.

Por otro lado, el centro dispone de un formulario específico y un protocolo de gestión de incidencias, de forma que cualquier imprevisto, duda o problema técnico surgido durante una sesión pueda ser registrado y resuelto de manera ágil. Gracias a este sistema, es posible introducir mejoras inmediatas que repercutan positivamente en los grupos posteriores.

Esta estructura de evaluación y mejora ha demostrado ser altamente eficaz, no solo para garantizar la calidad de la enseñanza, sino también para mantener la motivación y satisfacción del equipo docente, que valora positivamente la existencia de espacios de escucha, aprendizaje compartido y seguridad metodológica.

Además de los métodos descritos, los proyectos de investigación en educación médica que realizamos sobre nuestros alumnos nos ofrecen información adicional para la toma de decisiones en la mejora del programa de simulación.

Conclusiones

El análisis del programa de simulación clínica en el grado de Medicina y su puesta en marcha nos permiten enfatizar la importancia de algunas acciones clave, como son:

  • Garantizar una estructura organizativa y docente sólida para la simulación clínica: es imprescindible que, además de recursos estructurales, existan una planificación y una organización docente efectivas, flexibles y dinámicas, y personal docente y técnico cualificado y formado en simulación, así como una plantilla estable que gestione la organización y mantenimiento de las instalaciones y estructuras docentes.

  • Asegurar el apoyo institucional y la participación activa del profesorado: la implicación de la dirección del grado para encajar el programa de simulación dentro del plan de estudios y facilitar la dotación de recursos humanos y materiales, así como la participación del claustro de profesores, son requisitos imprescindibles para su éxito.

  • Buscar el impacto de los itinerarios de simulación en la competencia de los alumnos: el efecto de los itinerarios de simulación en el grado de Medicina ha tenido un impacto positivo en la competencia de nuestros alumnos, permitiéndoles integrar, con una misma metodología, las competencias necesarias para la atención al paciente, incluidas las habilidades de comunicación, la prevención o la ética. Además, nos ha permitido incorporar competencias de trabajo en equipo y liderazgo en la toma de decisiones, aspectos de gran importancia para el futuro laboral de nuestros egresados.

  • Evaluar y mejorar continuamente el programa: la simulación clínica es una metodología en constante evolución. Es imprescindible establecer mecanismos de evaluación periódica mediante encuestas de satisfacción, análisis de resultados y reuniones con el equipo docente y los estudiantes. La capacidad de adaptación a las necesidades formativas, a los avances en educación médica y a nuevas herramientas tecnológicas, garantizará la mejora continua del programa.

Financiación

Los autores declaran que no han recibido ayudas específicas provenientes de agencias del sector público, sector comercial o entidades sin ánimo de lucro.

Conflicto de intereses

Los autores declaran que no tienen conflictos de intereses.

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