Descripción del caso: Mujer de 40 años, trabajadora en una gasolinera que acude a consulta por lumbalgia.

Exploración y pruebas complementarias: Buen estado general, sobrepeso. Dolor y limitación a la flexión ventral de hemicuerpo superior. Bragard y Lasègue negativos. Acude a los 30 días sin mejoría a pesar de tratamiento sintomático y la derivamos a Traumatología que indica reposo laboral. La paciente solicita Incapacidad Temporal laboral. Tres meses después comienza con episodios de vértigos periféricos con nistagmo horizontal rebeldes a sulpiride y betahistina. Solicita nueva incapacidad temporal. Un mes más tarde debuta con fiebre vespertina sin foco y adenopatías palpables cervicales. Realizamos analítica con leucocitosis, neurofilia y elevación de reactantes de fase aguda. Derivamos a medicina interna donde se biopsia un ganglio y solicita TAC. TAC: afectación ganglionar torácica y abdominal. Lesión ósea blástica: proceso linfoproliferativo. Anatomía Patológica: enfermedad de Hodgkin clásico tipo esclerosis nodular.

Juicio clínico: Linfoma de Hodgkin.

Diagnóstico diferencial: Linfoma no Hodgkin, mieloma, leucemia.

Comentario final: Debemos investigar y no dar por hecho que todas las lumbalgias son mecánicas. No asociar a una causa musculoesquelética solamente, aunque sea la primera opción de sospecha diagnóstica en un paciente con una actividad laboral física. Mantener la sospecha diagnóstica de patologías graves cuando el motivo de consulta no cede. Ante una demanda de incapacidad temporal, mantener la presunción de enfermedad, a pesar de abuso de bajas laborales en nuestro medio.

Bibliografía

1. Martín Zurro JF. Compendio de Atención Primaria. Elsevier España, 2010.
2. Síndromes linfoproliferativos. Fisterra, 2015. Disponible en http://www.fisterra.com/guias-clinicas/síndromes-linfoproliferativos/

Palabras clave: Lumbalgia mecánica. Incapacidad temporal laboral. Enfermedad de Hodgkin.