Gut microbiome-centric nutritional strategies in inflammatory bowel disease: Modulating dysbiosis for therapeutic benefit

Abstract

Inflammatory bowel disease (IBD), encompassing Crohn's disease and ulcerative colitis, arises from complex interactions among genetics, immunity, environmental triggers, and, critically, the gut microbiome. Dysbiosis – marked by a loss of beneficial microbes and expansion of pro-inflammatory taxa – plays a pivotal role in disease pathogenesis. This review highlights the central role of gut microbiota in IBD and explores evidence-based nutritional interventions aimed at restoring microbial balance and immune regulation. Dietary fiber, prebiotics, and fermented foods promote short-chain fatty acid production and barrier integrity, while omega-3 fatty acids and polyphenols modulate inflammatory pathways. Exclusive enteral nutrition (EEN), especially in Crohn's disease, alters microbial profiles and reduces mucosal inflammation. Targeted micronutrient supplementation addresses common deficiencies impacting immune function. Through the lens of microbiota modulation, dietary therapy emerges not merely as supportive care, but as a primary therapeutic tool in IBD management. Microbiome-directed nutrition offers promising adjunctive strategies to induce and maintain remission.

Resumen

La Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII), que incluye la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, surge de interacciones complejas entre factores genéticos, inmunológicos, desencadenantes ambientales y, de manera crítica, el microbioma intestinal. La disbiosis—caracterizada por la pérdida de microorganismos beneficiosos y la expansión de taxones proinflamatorios—desempeña un papel clave en la patogénesis de la EII. Esta revisión resalta el rol central del microbiota intestinal en la EII y examina intervenciones nutricionales basadas en evidencia destinadas a restaurar el equilibrio microbiano y la regulación inmunológica. La fibra dietética, los prebióticos y los alimentos fermentados promueven la producción de ácidos grasos de cadena corta y la integridad de la barrera intestinal, mientras que los ácidos grasos omega-3 y los polifenoles modulan las vías inflamatorias. La nutrición enteral exclusiva (NEE), especialmente en la enfermedad de Crohn, modifica los perfiles microbianos y reduce la inflamación mucosa. La suplementación dirigida de micronutrientes aborda deficiencias comunes que afectan la función inmune. Desde la perspectiva de la modulación del microbioma, la terapia nutricional surge no solo como un cuidado complementario, sino como una herramienta terapéutica primaria en el manejo de la EII. La nutrición dirigida al microbioma ofrece estrategias adyuvantes prometedoras para inducir y mantener la remisión.