Introducción: Las metástasis del cáncer colorrectal son la causa más frecuente de tumoraciones hepáticas, siendo la cirugía actualmente el tratamiento de elección, cuando posible, para la curación de los pacientes. Cada vez más y gracias a la combinación con otros tratamientos médicos e intervencionistas se intervienen casos más complejos y avanzados, logrando mejorar la supervivencia y calidad de vida de estos pacientes.

Caso clínico: Presentamos el caso de una paciente de 66 años, alérgica a contraste yodado, AINE, salbutamol, viscoteína, penicilina; con antecedentes de dislipemia, colelitiasis, gonartrosis, diagnosticada de un adenocarcinoma de sigma estenosante localmente avanzado intervenido mediante sigmoidectomía laparoscópica y anastomosis colorrectal EEA 29 reforzada, con diagnóstico definitivo de pT4aN2a, con presencia de invasión perineural y angiolinfática. La paciente rechaza tratamiento adyuvante quimioterápico tras mala tolerancia a primera administración. Durante el seguimiento se objetiva en TAC de control un año después de la cirugía 3 lesiones hepáticas compatibles con metástasis, todas establecidas en lóbulo hepático derecho. Se presenta en el comité multidisciplinar de tumores de Hepatobiliopancreática, decidiéndose realizar intervención quirúrgica. Se realiza volumetría de segmentos remanentes que resulta ser el 31,9%, por lo que se decide realizar embolización de la vena porta derecha para minimizar el riesgo de insuficiencia hepática. En el TAC posembolización se confirma el crecimiento del remanente hepático, llegando a tener hasta un 37%, por lo que se decide realizar una hepatectomía derecha, siendo el abordaje robótico el elegido. La paciente presenta evolución posoperatoria favorable y ausencia de complicaciones, dándose de alta al 5.º día posoperatorio.

Discusión: La cirugía robótica actualmente se encuentra entre los abordajes más innovadores para todo tipo de intervenciones quirúrgicas. Permite combinar una mayor precisión quirúrgica con una agresión mínima, disminuyendo complicaciones intra y posoperatorias, estancia hospitalaria y favorece la recuperación mas rápida del paciente. Las intervenciones de alta complejidad hepática, que se realizaban tradicionalmente de forma abierta, han evolucionado hasta actualmente beneficiarse de técnicas mínimamente invasivas proporcionando grandes ventajas en disección de estructuras vasculares y biliares, control de sangrado y acceso a zonas de alta dificultad. Cabe destacar que en la cirugía hepática compleja una de las complicaciones más temidas es la insuficiencia hepática. Técnicas como la embolización portal selectiva permiten aumentar el tejido funcionante rápidamente de forma preoperatoria de los segmentos libres de enfermedad para poder beneficiarse así más pacientes del tratamiento quirúrgico, el de elección como tratamiento curativo para tratar la patología metastásica hepática.