Objetivos: La asistolia ictal (AI) es una complicación infrecuente [<0,5%] pero potencialmente peligrosa para los pacientes con epilepsia ya que puede producir caídas graves. Generalmente se implanta un marcapasos como tratamiento. En este estudio exploramos la cardioneuroablación como una alternativa menos invasiva.

Material y métodos: Realizamos un estudio descriptivo y retrospectivo de una serie de 5 casos de pacientes con asistolia ictal detectada durante MPVEEG y tratada con cardioneuroablación en nuestro hospital terciario.

Resultados: Un total de 5 pacientes sometidos a cardioneuroablación por AI: 2 varones y 3 mujeres, con una media de edad 39 años [29-48], un inicio de la epilepsia a los 24 años [0,5-44] y un tiempo de evolución de 15 años [4-30]. Todos los pacientes fueron diagnosticados de epilepsia focal [2 temporal derecha, bitemporal, temporal izquierda, orbitofrontal mesial izquierda] y 4 eran farmacorresistentes. Estaban tratados con una media de 4 fármacos anticrisis [2-5] y habían probado una media de 3 [0-6]. Dos pacientes presentaron recurrencias a los 5 y 7 meses, de los cuales uno fue sometido a una segunda cardioneuroablación sin recurrencias hasta el momento y en otro se implantó marcapasos definitivo. La media de seguimiento desde la cardioneuroablación fue de 18 meses [6-32]. No se produjeron complicaciones secundarias al procedimiento.

Conclusión: La AI suele afectar a pacientes jóvenes en los que la implantación de un marcapasos no es ideal. La cardioneuroabalción es un procedimiento mínimamente invasivo que podría plantearse en este perfil de pacientes, evitando el marcapasos y constituyendo un tratamiento efectivo que evitaría síncopes y caídas por AI.