XII Simposio de la Asociación Española de Vacunología
Más datosAnalizar el efecto de nirsevimab en la reducción de complicaciones (prevención terciaria) en lactantes hospitalizados por bronquiolitis por infección confirmada por VRS durante las temporadas 2023/24 y 2024/25.
MétodoSe realizó un estudio multicéntrico observacional retrospectivo de cohortes. La población del estudio incluyó a todos los lactantes hospitalizados por bronquiolitis por VRS en 9 hospitales participantes.
Se analizaron desenlaces clínicos relacionados con la gravedad durante la hospitalización mediante análisis bivariante, y se construyeron modelos multivariantes de regresión logística y de regresión de Cox. El estudio fue aprobado por el Comité de Ética Autonómico (código 202499907099520).
ResultadosLa muestra incluyó un total de 356 lactantes (224 inmunizados con nirsevimab, y 132 no inmunizados). De ellos, 222 provenían de la temporada 2023-2024, y 134 de la temporada 2024-2025. Tras los análisis ajustados, el uso de nirsevimab se asoció a una reducción en la necesidad de soporte respiratorio (ORa=0,34, IC95%: 0,14-0,74), uso de gafas nasales (ORa=0,42, IC95%: 0,21-0,81), soporte respiratorio no invasivo (ORa=0,54, IC95%: 0,32-0,91), ingreso en unidad de cuidados intensivos (ORa=0,47, IC95%: 0,28-0,78), así como una reducción de 29% (11-44%) en la duración de la hospitalización y del 26% (6-42%) en el tiempo de uso de soporte respiratorio.
Conclusiones / RecomendacionesLas coberturas de inmunización con nirsevimab fueron muy elevados, especialmente durante la segunda temporada. El uso de nirsevimab se asoció a una reducción los desenlaces estudiados, resultados que se replicaron separadamente en las dos temporadas analizadas. Estos datos concuerdan con los pocos estudios publicados hasta la fecha en relación con la gravedad del proceso hospitalario.
Los resultados de este estudio muestran que la inmunización con nirsevimab en lactantes que requieren hospitalización por VRS se asocia con una reducción en la gravedad de las complicaciones clínicas. Estos datos refuerzan la efectividad en prevención terciaria de esta medida de inmunoprevención.


