Objetivos: Evaluar la validez actual del TDR como herramienta de cribado cognitivo en adultos jóvenes, teniendo en cuenta la disminución de la familiaridad con los relojes analógicos en la era digital.

Material y métodos: Durante la baremación de un test neuropsicológico en una muestra de estudiantes universitarios (20-24 años) de la Universidad de Granada, se administró el TDR como prueba de cribado. Se analizaron cuantitativa y cualitativamente los dibujos “patológicos” (n = 12), junto con verbalizaciones espontáneas sobre el reloj analógico.

Resultados: Se observaron errores en el trazo de la circunferencia, la colocación de los números y la representación de la hora. No obstante, dichos errores no reflejaban deterioro cognitivo, sino una escasa familiaridad con relojes analógicos. Muchos expresaron no recordar cuántos números tenía un reloj, cómo debían distribuirse o cómo colocar correctamente las agujas. Los participantes afirmaron no recordar cuántos números debía tener un reloj, cómo distribuirlos ni cómo colocar correctamente las agujas, aunque sí sabían leer la hora en dispositivos digitales. Estos hallazgos coinciden con estudios recientes que cuestionan la validez del TDR como herramienta universal de cribado, especialmente en generaciones formadas en entornos tecnológicos y digitales.

Conclusión: Los hallazgos invitan a reflexionar sobre la utilidad del TDR en generaciones nacidas en la era digital, con experiencia limitada en relojes analógicos. Aunque su uso ha aumentado en la literatura en las últimas décadas, su validez podría verse comprometida en contextos socioculturales donde la alfabetización analógica es baja. Esto plantea la necesidad de adaptar las herramientas de cribado a las características culturales y generacionales de la población.