Buscar en
Gastroenterología y Hepatología
Toda la web
Inicio Gastroenterología y Hepatología Características de los pacientes con infección crónica por el virus de la hep...
Información de la revista
Vol. 36. Núm. 4.
Páginas 243-253 (Abril 2013)
Compartir
Compartir
Descargar PDF
Más opciones de artículo
Visitas
6795
Vol. 36. Núm. 4.
Páginas 243-253 (Abril 2013)
Original
Acceso a texto completo
Características de los pacientes con infección crónica por el virus de la hepatitis B. Análisis de una serie de 474 pacientes
Characteristics of patients with chronic hepatitis B virus infection. analysis of a series of 474 patients
Visitas
6795
Rafael Gómez Rodrígueza,
Autor para correspondencia
925252585@telefonica.net

Autor para correspondencia.
, Antonio Guardiola Arévaloa, Ana Zaida Gómez Morenoa, Almudena García Velaa, César Gómez Hernandob, Rufo Rodríguez Merloc, Juan José Sánchez Ruanoa, Gema de la Cruz Péreza
a Servicio de Aparato Digestivo, Hospital Virgen de la Salud, Toledo, España
b Servicio de Microbiología, Hospital Virgen de la Salud, Toledo, España
c Servicio de Anatomía Patológica, Hospital Virgen de la Salud, Toledo, España
Este artículo ha recibido
Información del artículo
Resumen
Texto completo
Bibliografía
Descargar PDF
Estadísticas
Figuras (6)
Mostrar másMostrar menos
Tablas (4)
Tabla 1. Descripción de las principales características de la muestra
Tabla 2. Análisis univariante de pacientes HBeAg(+) vs (−). Excluidos coinfectados por virus de la hepatitis D y C (n=452)
Tabla 3. Análisis multivariante de las variables clínicas en pacientes con AgHBe(+) vs AgHBe(−)
Tabla 4. Biopsias realizadas a los 209 pacientes con ADN cuantificado desde junio de 2005 (n = 46)
Mostrar másMostrar menos
Resumen
Objetivo

El objetivo de nuestro estudio fue conocer las características clínicas, analíticas, serológicas e histológicas de los portadores crónicos del virus de la hepatitis B en nuestra área.

Material y métodos

Se realizó un estudio de cohortes retrospectivo que incluyó pacientes mayores de 13 años portadores crónicos del AgHBs, valorados en nuestro servicio desde enero de 2000.

Resultados

Se incluyeron 474 enfermos. Al diagnóstico el 55,49% fueron varones, con una edad media de 41,05±13,93 y GPT normal en el 57,17% de los casos, siendo el 87,76% AgHBe(−). Las coinfecciones VHC y VHD ocurrieron en el 3,62 y 1,86%, respectivamente. Se realizó biopsia hepática al 31,22%, presentando el 63,51% grados variables de inflamación-fibrosis, y el 12,84%, cirrosis. Los pacientes AgHBe(+) en comparación con los (−) fueron más jóvenes y presentaron mayor actividad de la enfermedad de forma estadísticamente significativa. Los pacientes en fase inmunotolerante fueron los más infrecuentes (5,26%), y los que presentaban HBC AgHBe(−) los más numerosos (48,32%). Los pacientes en fase inmunorreactiva presentaron mayor afectación histológica (16,67% cirrosis). El 21,52% presentaba antecedentes familiares de infección crónica por el VHB. Los pacientes con nacionalidad distinta a la española fueron el 18,78%, habiéndose incrementado en los últimos años.

Conclusión

La infección crónica por el VHB en nuestra área se da predominantemente en personas de edad media, con GPT normal en más de la mitad de los casos, siendo la mayoría AgHBe(−) y aproximadamente la mitad de estos son portadores inactivos. Existe un incremento de la incidencia en los últimos años de los pacientes de nacionalidad no española.

Palabras clave:
Virus de la hepatitis B
Infección crónica por virus de la hepatitis B
Epidemiología
Abstract
Objective

To determine the clinical, laboratory, serological and histologic characteristics of chronic hepatitis B virus carriers in our environment.

Material and methods

A retrospective cohort study was performed that included chronic AgHBs carriers aged more than 13 years attending our service since January 2000.

Results

A total of 474 patients were included. At diagnosis, 55.49% were men, with a mean age of 41.05±13.93 years. Alanine aminotransferase (ALT) levels were within the normal range in 57.17% of the patients, and 87.76% were AgHBe(−). Hepatitis C and D virus coinfection was found in 3.62% and 1.86%, respectively. Liver biopsy was performed in 31.22%; varying grades of inflammation-fibrosis were found in 63.51% and cirrhosis was found in 12.84%. Compared with AgHBe(−) patients, those who were AgHBe(+) were younger and had greater disease activity. This difference was statistically significant. Patients in the immunotolerant phase were the least numerous (5.26%), while AgHBe(−) patients with chronic HBV infection were the most numerous (48.32%). Patients in the immunoreactive phase showed greater histological involvement (16.67% cirrhosis). A familial history of chronic HBV was found in 21.52%. The percentage of non-Spanish patients increased in the last few years and accounted for 18.78%.

Conclusion

Chronic HBV infection in our environment occurs mainly in middle-aged persons. GPT values are normal in more than 50%, most are AgHBe(−), and approximately half are inactive carriers. The incidence of chronic infection has increased in the non-Spanish population in recent years.

Keywords:
Hepatitis B virus
Chronic hepatitis B virus infection
Epidemiology
Texto completo
Introducción

Aproximadamente una tercera parte de la población mundial presenta datos serológicos de infección pasada o presente por el virus de la hepatitis B (VHB). A su vez 350 millones de personas en el mundo presentan infección crónica1, estando el 75% en el Sudeste Asiático. Se estima que se diagnostican más de 50 millones de nuevos casos anualmente2. Un reciente informe calcula que la prevalencia de la infección crónica por VHB puede llegar al 5% de la población mundial3. Sin embargo, aunque el VHB es un problema de salud pública, no todas las zonas del mundo presentan la misma endemicidad, distinguiéndose 3 zonas: endemicidad alta (prevalencia > 8%), media (2-7%) y baja (< 2%)4–6. España ha estado considerada como un país de endemicidad media4, si bien los pocos estudios publicados indican que la prevalencia no sería tan alta7–9, dato que ratifica una publicación reciente de la Organización Mundial de la Salud10. Asimismo, los movimientos migratorios actuales pueden estar haciendo cambiar la prevalencia y la incidencia de la enfermedad en muchos países con endemicidad media-baja11–14.

La infección crónica por el VHB es un proceso dinámico y su historia natural se puede dividir en estadios o fases, los cuales no son necesariamente secuenciales ni se presentan en todos los enfermos. El estado «inmunotolerante» se caracteriza por presentar antígeno e del VHB (AgHBe) positivo, niveles elevados de replicación viral, niveles de aminotransferasas normales o bajas y escasas lesiones histológicas en el hígado15,16. El estado «inmunorreactivo» presenta AgHBe positivo, niveles altos de replicación viral, aminotransferasas elevadas o fluctuantes, actividad necroinflamatoria moderada o severa en el hígado con progresión más rápida a fibrosis15,16. El estado de «portador inactivo» aparece tras la pérdida del AgHBe y la aparición de los anticuerpos anti-AgHBe, caracterizándose por niveles muy bajos o indetectables en el suero del ácido desoxirribonucleico (ADN) del VHB y aminotransferasas normales17. La hepatitis B crónica (HBC) se puede presentar como hepatitis B AgHBe positivo (+) o negativo (−). La HBC con AgHBe(+) representa la fase temprana de la infección crónica por el VHB. La HBC con AgHBe(−) se produce tras la seroconversión del AgHBe, perdiendo este y apareciendo los anticuerpos anti-AgHBe durante la fase inmunorreactiva, y se caracteriza por periodos de reactivación con un patrón de niveles fluctuantes de ADN del VHB, aminotransferasas y de hepatitis crónica18. La HBC con HBeAg(−) es debida a mutaciones que se producen en los nucleótidos de la región precore y/o del promotor del core, y representa una fase tardía de la infección crónica por el VHB. La prevalencia de la HBC con AgHBe (−) ha ido incrementándose en la última década como resultado del envejecimiento de la población infectada con el VHB y representa la mayoría de los casos en muchas áreas, incluida Europa11,13,19,20.

La situación actual de la infección crónica por el VHB ha podido cambiar en los últimos años debido al mayor conocimiento de la historia natural de la enfermedad, el aumento de los movimientos migratorios, las campañas de vacunación cada vez más extendidas por todo el mundo21, y a los nuevos y eficaces tratamientos disponibles.

En España existen pocas series amplias de referencia publicadas recientemente, no habiéndose estudiado la infección crónica por el VHB nunca antes en nuestra zona de influencia. El objetivo de nuestro trabajo es conocer las características epidemiológicas, analíticas, serológicas e histológicas de los portadores crónicos del VHB en nuestra área de salud.

Material y métodosPoblación y diseño

El estudio se ha realizado en un hospital de tercer nivel, que atiende en la actualidad a una población de unos 430.000 habitantes. Se llevó a cabo un estudio de cohortes retrospectivo de los pacientes con infección crónica por el VHB que son seguidos en el servicio de aparato digestivo de nuestro centro. Como criterios de inclusión se seleccionaron todos los pacientes mayores de 13 años con antígeno de superficie del VHB (AgHBs) positivo durante más de 6 meses y que han sido seguidos en nuestro servicio desde enero de 2000 hasta julio de 2011, ya que desde esa fecha disponemos de un registro informatizado de los pacientes según su enfermedad, existiendo además consulta monográfica para la infección por VHB desde enero de 2005. Se excluyeron los enfermos con infección conocida por virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) y/o que presentaban insuficiencia renal avanzada que eran seguidos por otros servicios y en los que su enfermedad extrahepática condicionaba la evolución del paciente.

Variables

Se recogieron los datos epidemiológicos, analíticos, serológicos e histológicos. Entre los datos epidemiológicos se incluyeron el sexo, la edad, la nacionalidad, si el diagnóstico se hizo al donar sangre, los antecedentes familiares de infección por VHB, la adicción a drogas por vía parenteral (ADVP), la ingesta etílica, los tatuajes y las transfusiones previas. Entre los datos analíticos se recogió la transaminasa glutamicopirúvica (GPT) (expresada en mU/ml) en la primera consulta. Entre los datos serológicos se detectaron los marcadores completos del VHB: AgHBs, anticuerpos frente al antígeno del core, anticuerpos anti-AgHBs, AgHBe, anticuerpos frente al antígeno e, los anticuerpos totales frente al virus de la hepatitis D (VHD) y al virus de la hepatitis C (VHC) en suero, mediante diferentes técnicas de enzimoinmunoanálisis. La determinación del ADN se realizó mediante diferentes versiones de Branched-DNA hasta mayo de 2005. A partir de junio de 2005 se utilizaron diferentes técnicas de reacción en cadena de la polimerasa (PCR): de junio de 2005 a febrero de 2009 Cobas Amplicor HBV Monitor (Roche Diagnostics); de marzo de 2009 a noviembre de 2009 Cobas Ampliprep/Cobas Taqman HBV test (Roche Diagnostics); y de diciembre de 2009 a julio de 2011 Cobas Ampliprep/Cobas Taqman HBV test versión 2.0 (Roche Diagnostics). La decisión de realizar biopsia hepática se tomó en función de la indicación por guía clínica en cada momento para tomar una decisión terapéutica. Las biopsias hepáticas se realizaron según protocolo (fijadas en formaldehído al 10% durante 36 h, incluidas en parafina, realizándose cortes de 5 μ de espesor), tiñéndose con técnicas habituales (hematoxilina-eosina, reticulina, tricrómico de Masson y Perls), realizándose estudio inmunohistoquímico para AgHBs y AgHBc, y siendo revisadas por un mismo patólogo expresamente para el presente estudio y clasificadas por el sistema METAVIR22,23.

Se calculó la incidencia de la enfermedad de forma anual, utilizando como numerador el número de casos nuevos y como denominador la población del área sanitaria a 1 de enero de cada uno de los años considerados en el periodo de estudio. Los datos de la población que asume nuestro hospital se consiguieron a través de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha, Consejería de Salud y Bienestar Social, Catálogo de Hospitales24.

Análisis estadístico

La descripción de las principales variables definidas en este estudio se realizó mediante la distribución de frecuencias, cuando la variable era cualitativa, y mediante la media±desviación estándar (DE) si la variable era cuantitativa. La comparación de estas características en pacientes con AgHBe positivo con respecto a pacientes con AgHBe negativo se realizó mediante chi-cuadrado y test exacto de Fisher ya que todas las variables se agruparon previamente en categorías.

El análisis multivariable se llevó a cabo mediante regresión logística binaria, con el método «forward conditional» y utilizando una función link asimétrica ya que el número de pacientes en cada uno de los grupos fue muy distinta. Se introdujo como variable dependiente la pertenencia a AgHBe(+) o (−) y como variables independientes las que obtuvieron significación estadística en el análisis bivariante o las variables que podían tener una implicación clínicamente plausible. El análisis de la calibración del modelo se realizó mediante el estadístico de Hosmer-Lemeshow. El poder discriminatorio del modelo se evaluó mediante el área bajo la curva ROC (receiver-operator characteristics) obtenida analizando la probabilidad del valor pronosticado por el modelo multivariable. Los resultados del modelo multivariable se presentan ajustados y en forma de odds ratio (OR) y su intervalo de confianza al 95%.

La recogida de información y posterior análisis de datos se realizó con el paquete estadístico SPSS versión 15.0 (SPSS Inc., Chicago, IL) considerando para todos los contrastes estadísticamente significativos aquellos valores de p<0,05.

Este estudio fue aprobado por el comité de ética de nuestro hospital.

Resultados

Se incluyeron un total de 474 pacientes con infección crónica por VHB durante el periodo de estudio. La edad media en el momento de presentación fue de 41,05±13,93 años. El 55,49% de los casos eran varones y el 52,95% del total de los pacientes fueron diagnosticados antes de los 40 años. Había 89 pacientes de áreas geográficas distintas a la española (18,78%), siendo el 40,45% de Europa del Este, el 16,85% de países del Norte de África, el 14,61% asiáticos, el 8,99% del África Subsahariana, el 6,74% del Sahara, el 5,62% de Centro y Sudamérica, el 2,25% de Oriente Medio, el 2,25% portugueses, el 1,12% georgianos y el 1,12% sudafricanos. A 49 pacientes se les diagnosticó de infección crónica del VHB en el momento de donar sangre (el 10,34% de nuestra serie), a 45 en el cribado durante el embarazo (el 9,49% de la serie), siendo el 44,44% de estas no españolas. Dentro de los antecedentes epidemiológicos destacables presentaban antecedentes familiares de infección por VHB 102 pacientes (21,52%), ingesta etílica > 40 g/día, 55 (11,60%), y ADVP, 2 pacientes (0,42%). Las principales características epidemiológicas se resumen en la tabla 1.

Tabla 1.

Descripción de las principales características de la muestra

  Total muestra (n=474) 
Edad al diagnóstico (media ± DE)  41,05 ± 13,93 
< 40 años (%)  52,95 
≥ 40 años (%)  47,05 
Sexo (% hombres)  55,49 
Nacionalidad (% no españoles)  18,78 
Diagnóstico al donar sangre (%)  10,34 
Diagnóstico en el cribado durante el embarazo (%)  9,49 
Antecedentes familiares de infección por VHB (%)  21,52 
Ingesta etílica > 40 g/día (%)  11,60 
Tatuajes (%)  5,06 
Transfusiones previas (%)  3,16 
ADVP (%)  0,42 
HBeAg(+) (%)  12,24 
GPT primera consulta (% > 40 mU/ml)  42,83 
ADN del VHB (% positivo)  63,23 
Anticuerpos frente VHD (% positivo)  1,86 
Anticuerpos frente VHC (% positivo)  3,62 
Cirrosis (%)a  14,77 
Biopsia normal o alteraciones mínimas (%)b  23,65 
Grados variables de inflamación-fibrosis (%)b  63,51 
Cirrosisb  12,84 
a

Cirrosis según datos clínico, analíticos, ecográficos e histológicos.

b

Total de biopsias realizadas: 148.

En relación con los datos bioquímico-serológicos, encontramos que, en el momento del diagnóstico, de los 474 pacientes 416 eran AgHBe(−) (87,76%), y 58 HBeAg(+) (12,24%). Presentaron GPT ≤ 40 U/ml 271 pacientes (57,17%) y GPT > 40U/ml 203 (42,83%). De los pacientes que fueron enviados al ser diagnosticados al donar sangre presentaban GPT ≤ 40U/ml el 71,43%. Los anticuerpos frente al VHD fueron (+) en 8 enfermos (1,86%) de los 430 pacientes a los que se les determinó (90,72% de los pacientes de la muestra) y (−) en 422 (98,14%). A su vez se realizó la determinación de anticuerpos frente al VHC en 469 pacientes (98,95% del total de la muestra), siendo (+) en 17 (3,62%) y (−) en 452 (96,38%).

A lo largo del seguimiento de la enfermedad se realizó al menos una biopsia hepática a 148 de los 474 pacientes (31,22%). El tiempo transcurrido desde el diagnóstico hasta la realización de la misma fue de 32,21±80,02 meses. Como se puede observar en la tabla 1, 35 pacientes presentaban biopsia normal o con cambios mínimos (23,65%), 94 presentaban grados variables de inflamación-fibrosis (63,51%) y 19 pacientes presentaban cirrosis (12,84%). Teniendo en cuenta no solo los datos histológicos, sino también datos clínico-analíticos y ecográficos fueron diagnosticados de cirrosis hepática 70 pacientes (14,77%).

La incidencia media de la última década fue de 7,86 casos/100.000 habitantes/año (fig. 1), con una tendencia creciente durante los últimos 10 años. Dividiendo el periodo de estudio en 2 quinquenios y comparando la incidencia en el primer quinquenio con respecto al segundo, en españoles y extranjeros, observamos que, para los españoles la variación en la incidencia no ha sido significativa (p=0,413) y sin embargo en los extranjeros sí existe una diferencia estadísticamente significativa (p<0,001).

Figura 1.

Incidencia anual de casos nuevos en nuestra consulta durante el periodo de estudio (incidencia de extranjeros en el quinquenio 2001-2005 vs 2006-2010: 0,31 vs 3,67; p < 0,01).

(0,17MB).

En la figura 2 a se muestran las diferentes fases o estadios en que se encontraban los pacientes al diagnóstico en función del AgHBe y GPT; a su vez, en la tabla 2 se muestra la comparación entre los pacientes AgHBe(+) y (−). Para ello se excluyó previamente a 14 pacientes coinfectados por VHC, 5 por VHD, y 3 por VHC y VHD, quedando un total de 452 pacientes. Los pacientes AgHBe(+), en comparación con los AgHBe (−), presentaron una edad menor de 40 años con mayor frecuencia (64,29 vs 48,48%; p<0,05), un mayor porcentaje no eran de origen español (33,93 vs 17,17%; p<0,01), presentaban mayor ADVP (1,79 vs 0%; p<0,008), tenían GPT > 40 mU/ml con más frecuencia (66,07 vs 38,64%; p<0,01), carga viral positiva en un mayor porcentaje (85,45 vs 61,18%; p<0,001) y datos clínicos/analítico/ecográficos de cirrosis más frecuentemente (26,79 vs 11,87%; p<0,01) o cirrosis en la biopsia (29,63 vs 9,01%; p<0,01). En el análisis multivariante (tabla 3) se introdujo la edad al diagnóstico, valores de GPT ≤ 40 mU/ml y el ADN cuantificado desde junio de 2005, resultando significativas la carga viral positiva (OR=4,22, p<0,001) y la edad (OR=0,97, p=0,039).

Figura 2.

Diagrama de flujo para la captación de la muestra. a) Pacientes al diagnóstico de la serie general. b) Pacientes al diagnóstico en relación con AgHBe, GPT y ADN, desde junio de 2005.

(0,48MB).
Tabla 2.

Análisis univariante de pacientes HBeAg(+) vs (−). Excluidos coinfectados por virus de la hepatitis D y C (n=452)

  AgHBe(+)  AgHBe(−)  Valor p 
  (n=56) (12,38%)  (n=396) (87,61%)   
Edad al diagnóstico (media±DE)  38,09 ± 16,81  41,27 ± 13,53  0,025 
< 40 años (%)  64,29  48,48  0,027 
≥ 40 años (%)  35,71  51,52   
Sexo (% hombres)  60,71  54,80  0,404 
Nacionalidad (% no españoles)  33,93  17,17  0,013 
Antecedentes familiares de infección por VHB (%)  23,21  22,22  0,868 
Ingesta etílica > 40 g/día (%)  7,14  12,12  0,274 
Tatuajes (%)  7,14  4,55  0,398 
Transfusiones previas (%)  0,00  3,79  0,139 
ADVP (%)  1,79  0,00  0,008 
GPT primera consulta (% > 40 mU/ml)  66,07  38,64  < 0,001 
Carga viral (% positivo)a  85,45  61,18  < 0,001 
Cirrosis (%)b  26,79  11,87  0,002 
Biopsia normal o alteraciones mínimasc  3,70  29,73  < 0,001 
Grados variables de inflamación-fibrosis (%)c  66,67  61,26  0,654 
Cirrosis (%)c  29,63  9,01  0,002 

De las 138 biopsias realizadas en estos 452 pacientes todos estaban en el mismo estadio que al diagnóstico cuando se realizó la biopsia, excepto 4 pacientes que al diagnóstico presentaban HBC AgHBe(+) y en el momento de realizar la biopsia habían realizado la seroconversión a anti-HBe (14,81% de los AgHBe[+]).

a

Se consideró positivo: cualquier valor positivo por método cualitativo hasta mayo de 2005, y cualquier valor > 0 U/ml por método cuantitativo desde junio de 2005.

b

Cirrosis según datos clínico-analíticos, ecográficos e histológicos.

c

Total de biopsias realizadas: 138.

Tabla 3.

Análisis multivariante de las variables clínicas en pacientes con AgHBe(+) vs AgHBe(−)

Variable dependiente AgHBe(+) (n = 209)  OR  IC 95% de ORValor p 
    Inferior  Superior   
Edad al diagnóstico  0,97  0,93  0,99  0,039 
Nacionalidad (españoles vs inmigrantes)  0,56  0,24  1,25  0,158 
GPT primera consulta (≤ 40 mU/ml vs > 40 mU/ml)  0,62  0,28  1,34  0,225 
Carga viral: ADN determinado  4,22  3,56  5,10  0,000 
Seudo-R2  0,427       
Valor p contraste Hosmer-Lemeshow  0,254       
c-statistic  0,92       
Clasificados correctamente  95,82%       

Se realizó un subanálisis en 216 pacientes a los que se determinó de forma cuantitativa el ADN en el momento del diagnóstico (desde junio de 2005). Se excluyó a 2 pacientes a los que no se había determinado el ADN, 2 pacientes coinfectados por VHC y 3 por VHD, quedando para dicho subanálisis 209 pacientes. En la figura 2 b se puede observar cómo es la distribución de las diferentes fases o estadios de la enfermedad al diagnóstico en este subgrupo en función del AgHBe, GPT y ADN cuantificado. En este subgrupo de 209 pacientes se realizaron un total de 46 biopsias, pudiendo observarse los resultados en la tabla 4.

Tabla 4.

Biopsias realizadas a los 209 pacientes con ADN cuantificado desde junio de 2005 (n = 46)

  Inmunotolerantes  HBC AgHBe(+)  Portadores inactivos  HBC AgHBe(−) 
Biopsia normal o alteraciones mínimas  1 (100%)  0 (0%)  1 (25%)  17 (48,57%) 
Grados variables de inflamación-fibrosis  0 (0%)  5 (83,33%)  3 (75%)  15 (42,85%) 
Cirrosis  0 (0%)  1 (16,67%)  0 (0%)  3 (8,57%) 
Número de biopsias (% en relación con el total de biopsias)  12,17%  613,04%  48,70%  3576,09% 

En todos estos años de estudio la edad media al diagnóstico ha aumentado de forma progresiva, especialmente en 2004 y 2010, en que hubo una media superior al resto del periodo considerado en el estudio, y además esta tendencia fue estadísticamente significativa (p=0,026) (fig. 3). Por otra parte, la relación hombres/mujeres al diagnóstico ha permanecido constante (p=0,057) (fig. 4). La población no española empezó a estar presente en el diagnóstico de esta enfermedad a finales de la década de los años 1990, pero la mayor presencia se da en los últimos 5 años, donde aumentó desde un 5,17% en el quinquenio anterior a un 37,77% en el último quinquenio, p<0,001 (fig. 5). Los pacientes con GPT normal han ido aumentando en nuestra serie a lo largo de los años. Así, se han mostrado diferencias estadísticamente significativas en todos los quinquenios cuando comparamos la proporción estimada para los diferentes años con respecto al último periodo, a excepción de los 2 primeros, concretamente: años 1991-1995 (p<0,001), años 1996-2000 (p=0,001), y 2001-2005 (p=0,005). La proporción de pacientes AgHBe(+) al diagnóstico respecto a los (−), salvo variaciones puntuales, se ha mantenido estable en los últimos 30 años (en torno al 10,8%) a excepción de los años 1986-1990 donde prácticamente se duplicó hasta alcanzar el 21,53% (p=0,055) (fig. 6).

Figura 3.

Edad media al diagnóstico por años durante el periodo de estudio (Q: quinquenio).

(0,1MB).
Figura 4.

Porcentaje de varones y mujeres.

(0,13MB).
Figura 5.

Porcentaje de casos nuevos.

(0,11MB).
Figura 6.

Relación de pacientes HBeAg(+) vs HBeAg.

(0,12MB).
Discusión

En los últimos 25-30 años ha mejorado ampliamente nuestro conocimiento de la epidemiología5,25 y la historia natural de la infección crónica por el VHB26, lo que nos ha permitido un mejor manejo de nuestros pacientes.

La edad media al diagnóstico en nuestra área de salud está en torno a los 41 años, dato similar a lo publicado en otras áreas del mundo27,28, en países próximos al nuestro11, así como en otras regiones de nuestro propio país29. De los datos de la edad al diagnóstico que disponemos en nuestro centro hospitalario de los últimos 30 años podemos ver cómo ha ido aumentado de forma progresiva, tendiendo a estabilizarse en los últimos 10 años. Esto podría explicarse por el hecho de que en los años 1980 se investigaba serológicamente principalmente a los pacientes con elevación de transaminasas, que son pacientes generalmente en fases precoces de la enfermedad, y por lo tanto más jóvenes.

En relación con el sexo, en nuestra área existe un predominio de varones con respecto a mujeres, dato que encaja con la mayoría de publicaciones, tanto de países próximos al nuestro11,13, como de nuestro propio país29; no sabiéndose si es por una predisposición a la cronicidad o por una mayor exposición. Es de suponer que hechos como la introducción del cribado de la infección por el VHB en el primer trimestre del embarazo haya influido en la proporción hombre-mujer. A pesar de que esta proporción se ha mantenido estable en nuestra área, si no se hubiera realizado dicho cribado se podría haber perdido en torno a un 20% de mujeres, lo que hubiera hecho aumentar la proporción hombre/mujer. Además esto indica la importancia del cribado en embarazadas, haciendo hincapié en el grupo de embarazadas extranjeras que llegan a suponer casi el 45% de las pacientes a las que se realizó el cribado.

La población no española en nuestra serie representa el 18,78%, pero en la evolución se puede apreciar que esta no estaba presente hasta finales de los años 1990, llegando al 37,33% de media en el último quinquenio de estudio. Esto ha influido de forma significativa en la incidencia de la infección por VHB en nuestra área en los últimos años de estudio, indicando la importancia de realizar el cribado de esta infección, sobre todo en pacientes procedentes de áreas con alta endemicidad31. En zonas de nuestro país donde la población extranjera es mayor se puede ver que existe una mayor incidencia de infección por VHB29, superando incluso la población extranjera a la española.

De los datos epidemiológicos a reseñar encontramos que casi el 22% de nuestra serie presentaba antecedentes familiares de infección por VHB, habiéndose descrito porcentajes en torno al 13-52% en diferentes series3,30. Este hecho demuestra la importancia de los antecedentes familiares de hepatopatía, del cribado familiar y de las recomendaciones para evitar el contagio en convivientes. Casi el 11% de los pacientes fueron diagnosticados al donar sangre, presentando menor porcentaje de alteración de las enzimas hepáticas, y si no se les hubiesen realizado la serología podrían haber sido un foco de nuevos contagios.

Un mayor porcentaje de nuestros pacientes presentaron GPT normal al diagnóstico, coincidiendo con otras publicaciones actuales de nuestro entorno7,29. En nuestra serie se puede observar la tendencia casi exponencial y estadísticamente significativa a una mayor proporción de pacientes con GPT normal al diagnóstico, probablemente debido al mayor conocimiento de los grupos de riesgo31.

En las series publicadas se ha estimado que la coinfección por VHC en pacientes con infección crónica por el VHB se da entre el 10 y el 15%, siendo más común entre pacientes con ADVP32, los cuales son casi anecdóticos en nuestro estudio, pudiendo explicar la baja incidencia de coinfecciones. En parte puede estar condicionado por el hecho de haber excluido los pacientes infectados por el VIH, en los que la ADVP y la coinfección por VHC no es infrecuente.

De las biopsias realizadas en la serie general la gran mayoría presentaban grados variables de inflamación-fibrosis, y un 12,84%, cirrosis, siendo este porcentaje algo menor que en otras series publicadas11,13,30, lo cual probablemente está en relación con la gran proporción de pacientes en estadio de portador inactivo y con HBC AgHBe(−) con GPT normal, así como a la baja frecuencia de otros cofactores de cirrosis en nuestra serie como alcohol o coinfección por VHC y/o VHD. Si bien, al ser un estudio retrospectivo, los resultados del estudio histológico hemos de decir que hay que interpretarlos con precaución, ya que no se ha realizado biopsia a toda la serie que presentamos, sino solo a los pacientes en los que fue necesario en la práctica clínica para tomar una decisión terapéutica. De esta forma, si se hubiera realizado biopsia hepática a toda la serie el porcentaje de cirrosis podría haber sido incluso menor, ya que los pacientes más prevalentes (portadores inactivos y aquellos con HBC AgHBe(−) con transaminasas normales) es posible que no hayan quedado completamente representados.

La disponibilidad de pruebas de detección del ADN del VHB cada vez más sensibles, el conocimiento de la organización del genoma del VHB, del ciclo de replicación y la comprensión de la respuesta inmunitaria del huésped contra el VHB han cambiado nuestro concepto de la historia natural de la HBC33–35. A principios de los años 1980 se pensaba que la historia natural constaba de 2 fases: una fase inicial con presencia de AgHBe, ADN del VHB y enfermedad hepática activa, y una tardía caracterizada por la ausencia de AgHBe, la no detección del ADN del VHB, y enfermedad hepática inactiva36,37. A mediados de los años 1980 el conocimiento de la historia natural pasó de 2 a 3 fases, con el reconocimiento de la fase inmunotolerante38. En nuestra serie se puede observar en el subgrupo en el cual tenemos cuantificado el ADN a partir de junio de 2005 que los enfermos en fase inmunotolerante son el grupo menos numeroso. Probablemente esto es debido a que es la fase más temprana de la enfermedad, ya que se observa sobre todo en pacientes que han adquirido la infección en el parto o en los años posterior a este, posiblemente condicionado por la inmadurez del sistema inmunitario en estas edades y por el efecto tolerogénico del AgHBe que puede atravesar la placenta y causar tolerancia a los antígenos diana de las células T, pudiendo durar de 1 a 4 décadas. Esta situación se da en áreas del mundo con gran endemicidad, donde la vía principal de contagio es la vertical, como en el Sudeste Asiático y en algunas regiones de África39. Por el contrario, cuando la infección se adquiere en la edad adulta, lo que ocurre en países con baja-media endemicidad como España, donde la vía de transmisión es principalmente horizontal, esta fase coincide con el periodo de incubación de la infección, y generalmente dura pocas semanas. Estos pacientes habitualmente presentan poca afectación histológica, y mientras permanecen en esta fase la enfermedad no progresa40.

Tras la fase inmunotolerante existe una fase inmunorreactiva o de HBC AgHBe(+), en la que descienden los niveles de ADN, aumentan las transaminasas y existe actividad histológica. El daño hepático en los diferentes trabajos publicados es leve en el 24-42% de los casos y moderado-severo en el 44-63%, con un 10-24% de cirrosis41, datos que coinciden con los de nuestra serie.

A principio de los años 1980 se creía que no existía replicación tras la seroconversión del AgHBe, por ello los pacientes en esta fase eran conocidos como «portadores sanos». En el año 2000 el grupo de trabajo en hepatitis del Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos, dirigido por A. Lok y colaboradores, publicaron un resumen de manejo de la hepatitis B donde apoyaban el uso del término «portador inactivo» mejor que «portador sano» o «asintomático», y señalaban que esta forma de infección del VHB se debería definir entre otros por presentar unos niveles de ADN del VHB por debajo de 20.000 U/ml (< 105 copias/ml)42. Los avances en la biología molecular permitieron el desarrollo de PCR cualitativas que disminuyeron el límite de detección del ADN hasta 2.000 U/ml (103 copias/ml)43,44, y posteriormente surgieron análisis de PCR cuantitativas que consiguieron la detección del ADN en niveles tan bajos como 40 U/ml (200 copias)45,46. En la actualidad se ha llegado al consenso de < 2.000 U/ml de ADN del VHB, en pacientes AgHBe(−) y con aminotransferasas normales, para llegar al diagnóstico de portador inactivo47,48. Representan en nuestra serie el segundo grupo en importancia con 84 pacientes (de los pacientes a los que se determinó por PCR, fig. 2b), siendo crucial identificarlos pues, aunque la gran mayoría permanecen en remisión, sin gran afectación histológica17, como se puede comprobar en nuestra serie, y se ha descrito una supervivencia similar a grupos controles49, sí pueden existir reactivaciones, sobre todo si sufren una situación de inmunodepresión50,51.

La fase de HBC AgHBe(−) fue descrita por primera vez en países mediterráneos52,53, estando en la actualidad descrita en todo el mundo54. El descubrimiento de esta fase a principios de los años 1990 dio lugar a la aceptación de la existencia de 4 fases en la historia natural de la infección por el VHB, aunque no todos los pacientes discurren por todas las fases. Estudios recientes en Europa, Asia y Estados Unidos describen un incremento en la prevalencia de los pacientes con HBC AgHBe(−)55. En nuestra serie el grupo más numeroso también lo representan los pacientes con infección crónica VHB AgHBe(−) (87,61%), siendo similar a otros países mediterráneos, como Italia56,57 y Grecia58,59, e incluso en zonas alejadas a la nuestra como Asia60,61. Sin embargo, la proporción de pacientes AgHBe(+)/(−), en general, ha permanecido estable en los últimos 30 años en nuestra área. En otros países de nuestro entorno, como Francia, se ha observado un incremento progresivo de pacientes AgHBe(−) en los últimos años11. En este mismo trabajo lo relacionan con el aumento de población extranjera llegada de zonas con gran prevalencia de HBC AgHBe(−), hecho que no podría explicar nuestra evolución, pues aunque sí hemos tenido un incremento exponencial de pacientes inmigrantes en los últimos años, que con más frecuencia son AgHBe(+), algunos de ellos de zonas de alta endemicidad, no hemos experimentado dicho incremento, probablemente debido a las altas tasas de pacientes con AgHBe(−) de las que partíamos.

En el estudio univariante realizado entre los pacientes AgHBe(+) y (−) se puede observar que los pacientes AgHBe(+) son más jóvenes, existe un mayor porcentaje de pacientes no españoles, presentan datos de mayor actividad de la enfermedad, y mayor daño hepático en la biopsia. En el estudio multivariante se confirmó que los pacientes AgHBe(+) son más jóvenes y presentan mayor carga viral que los pacientes AgHBe(−). Estos datos coinciden con los de otras series publicadas11,13,18,56,58,60–62, a excepción de los referidos al daño hepático, que se explicarían por las limitaciones del estudio histológico explicadas previamente.

Conflicto de intereses

Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.

Bibliografía
[1]
C.L. Lai, V. Ratziu, M.F. Yuen, T. Poynard.
Viral hepatitis.
Lancet, 3 (2003), pp. 2089-2094
[2]
R. Perrillo.
Hepatitis B virus replication x time equals trouble.
Gastroenterology, 130 (2006), pp. 989-991
[3]
K.Q. Hu.
Hepatitis B virus (HBV) infection in the Asian and Pacific Islander Americans (APIAs): how can we do better for this special population?.
Am J Gastroenterol, 103 (2008), pp. 1824-1833
[4]
WHO. Department of Communicable Diseases Surveillance and Response. Hepatitis B. Disponible en: http://www.who.int/csr/disease/hepatitis/HepatitisB_whocdscsrlyo2002_2.pdf
[5]
M.J. Alter.
Epidemiology and prevention of hepatitis B.
Semin Liver Dis, 23 (2003), pp. 39-46
[6]
C.M. Weinbaum, E.E. Mast, J.W. Ward.
Recommendations for identification and public health management of persons with chronic hepatitis B virus infection.
Hepatology, 49 (2009), pp. 35-44
[7]
R. Solà, E. Cruz de Castro, M. Hombrados, R. Planas, S. Coll, R. Jardí, et al.
Prevalencia de la hepatitis B y C en diversas comarcas de Cataluña: estudio transversal.
Med Clin (Barc), 22 (2002), pp. 90-95
[8]
P. Alamillos Ortega, I. Failde Martínez.
Prevalencia de marcadores serológicos de la hepatitis B en trabajadores hospitalarios y de atención primaria del área de Jerez (Cádiz).
Aten Primaria, 23 (1999), pp. 212-217
[9]
A. Torella Ramos, I. Hernández Aguado, C. Santos Rubio, M. Fernández García de la Hera, M.J. Avino Rico.
Determinaciones de prevalencia de la infección por el virus de la hepatitis B en drogadictos por vía parenteral.
Rev Clin Esp, 193 (1993), pp. 457-459
[10]
J.J. Ott, G.A. Stevens, J. Groeger, S.T. Wiersma.
Global epidemiology of hepatitis B virus infection: new estimates of age-specific HBsAg seroprevalence and endemicity.
Vaccine, 30 (2012), pp. 2212-2219
[11]
J.F. Cadranel, P. Lahmek, X. Causse, G. Bellaiche, L. Bettan, T. Fontanges, et al.
Epidemiology of chronic hepatitis B infection in France: risk factors for significant fibrosis-results of a Nation wide survey.
Aliment Pharmacol Ther, 26 (2007), pp. 565-576
[12]
H. Hann, R. Hann, W. Maddrey.
Hepatitis B virus infection in 6.130 unvaccinated Korean-americans surveyed between 1988 and 1990.
Am J Gastroenterol, 102 (2007), pp. 767-772
[13]
J.P. Zarski, P. Marcellin, V. Leroy, C. Trepo, D. Samuel, N. Ganne-Carrie, et al.
Characteristics of patients with chronic hepatitis B in France: predominant frequency of HBeAg-negative cases.
J Hepatol, 45 (2006), pp. 355-360
[14]
M. Gutiérrez, P. Tajada, A. Álvarez, R. de Julián, M. Baquero, V. Soriano, et al.
Prevalence of HIV-1 non-B subtypes, syphilis, HTLV, and hepatitis B and C viruses among immigrant sex workers in Madrid, Spain.
J Med Virol, 74 (2004), pp. 521-527
[15]
J.H. Hoofnagle, E. Doo, T.J. Liang, R. Fleischer, A.S. Lok.
Management of hepatitis B: summary of a clinical research workshop.
Hepatology, 45 (2007), pp. 1056-1075
[16]
A.S. Lok, B.J. McMahon.
Chronic hepatitis B.
Hepatology, 45 (2007), pp. 507-539
[17]
M. Martinot-Peignoux, N. Boyer, M. Colombat, R. Akremi, B.N. Pham, S. Ollivier, et al.
Serum hepatitis B virus DNA levels and liver histology in inactive HBsAg Carriers.
J Hepatol, 36 (2002), pp. 543-546
[18]
S.J. Hadziyannis, D. Vassilopoulos.
Hepatitis B e antigen-negative chronic hepatitis B.
Hepatology, 34 (2001), pp. 617-624
[19]
M. Rizzetto.
Viral hepatitis in the third millennium.
Res Virol, 149 (1998), pp. 251-256
[20]
M. Rizzetto, A. Ciancio.
Chronic HBV-related liver disease.
Mol Aspects Med, 29 (2008), pp. 72-84
[21]
A.R. Zanetti, P. van Damme, D. Shouval.
The global impact of vaccination against hepatitis B: a historical overview.
Vaccine, 26 (2008), pp. 6266-6273
[22]
The METAVIR Cooperative Study Group.
Intraobserver and interobserver variations in liver biopsy interpretation in patients with chronic hepatitis C.
Hepatology, 1 (1994), pp. 15-20
[23]
P. Bedossa, T. Poynard, The metavir Cooperative Study Group.
An algorithm for the grading of activity in chronic hepatitis C.
Hepatology, 24 (1996), pp. 2189-2193
[25]
E. Franco, B. Bagnato, M.G. Marino, C. Meleleo, L. Serino, L. Zaratti.
Hepatitis B: epidemiology and prevention in developing countries.
World J Hepatol, 4 (2012), pp. 74-80
[26]
H.J. Yim, A.S. Lok.
Natural history of chronic hepatitis B virus infection: what we knew in 1981 and what we know in 2005.
Hepatology, 43 (2006), pp. S173-S181
[27]
S.Y. Lin, E.T. Chang, S.K. So.
Why we should routinely screen Asian American adults for hepatitis B: a cross-sectional study of Asians in California.
Hepatology, 46 (2007), pp. 1034-1040
[28]
U.S. Census Bureau. Asian and Pacific Islander Populations [consultado 15 Feb 2009]. Disponible en: http://factfinder.census.gov/servlet/ACSSAFFFacts?_submenuId=factsheet_0&_sse=on
[29]
E. Poves Martínez, D. del Pozo Prieto, B. Costero Pastor, G. Borrego Rodríguez, I. Beceiro Pedroño, C. Sanz García, et al.
Incidencia diagnóstica de AgHBs positivo. Características epidemiológicas, clínicas y virológicas.
Rev Esp Enferm Dig, 104 (2012), pp. 10-15
[30]
J.S. Mellen, V.W. Xia, M. Hashemzadeh, D. Imagawa, M. Jamal, J. Hoefs, et al.
The clinical presentation of chronic hepatitis B virus infection in Asian Americans: a single center retrospective study.
J Clin Gastroenterol, 44 (2010), pp. 364-370
[31]
C.M. Weinbaum, I. Williams, E.E. Mast, S.A. Wang, L. Finelli, A. Wasley, et al.
Recommendations for identification and public health management of persons with chronic hepatitis B virus infection.
MMWR Recomm Rep, 57 (2008), pp. 1-20
[32]
D.B. Strader.
Understudied populations with hepatitis C.
Hepatology, 36 (2002), pp. S226-S236
[33]
B. Rehermann.
Immune responses in hepatitis B virus infection.
Semin Liver Dis, 23 (2003), pp. 21-38
[34]
S. Locarnini.
Molecular virology of hepatitis B virus.
Semin Liver Dis, 24 (2004), pp. 3-10
[35]
J.M. Pawlotsky.
Hepatitis B virus (HBV) DNA assays (methods and practical use) and viral kinetics.
J Hepatol, 39 (2003), pp. S31-S35
[36]
G. Realdi, A. Alberti, M. Rugge, F. Bortolotti, A.M. Rigoli, F. Tremolada, et al.
Seroconversion from hepatitis B e antigen to anti-HBe in chronic hepatitis B virus infection.
Gastroenterology, 79 (1980), pp. 195-199
[37]
J.H. Hoofnagle, G.M. Dusheiko, L.B. Seeff, E.A. Jones, J.G. Waggoner, Z.B. Bales.
Seroconversion from hepatitis B e antigen to antibody in chronic type B hepatitis.
Ann Intern Med, 94 (1981), pp. 744-748
[38]
C.M. Chu, P. Karayiannis, M.J. Fowler, J. Monjardino, Y.F. Liaw, H.C. Thomas.
Natural history of chronic hepatitis B virus infection in Taiwan: studies of hepatitis B virus DNA in serum.
Hepatology, 5 (1985), pp. 431-434
[39]
M.F. Yuen.
Revisiting the natural history of chronic hepatitis B: impact of new concepts on clinical management.
J Gastroenterol Hepatol, 22 (2007), pp. 973-976
[40]
C.H. Hui, N. Leung, S. Yuen, H.Y. Zhang, K.W. Leung, L. Lu, et al.
Natural history and disease progression in Chinese chronic hepatitis B patients in immune-tolerant phase.
Hepatology, 46 (2007), pp. 395-401
[41]
G. Fattovich, F. Bortolotti, D. Francesco.
Natural history of chronic hepatitis B: special emphasis on disease progression and prognostic factors.
J Hepatol, 48 (2008), pp. 335-352
[42]
A. Lok, J. Healthcote, J. Hoofnagie.
Management of hepatitis B: 2000 summary of a workshop.
Gastroenterology, 120 (2001), pp. 1828-1853
[43]
M.A. Loriot, P. Marcellin, E. Bismuth, M. Martinot-Peignoux, N. Boyer, C. Degott, et al.
Demonstration of hepatitis B virus DNA by polymerase chain reaction in the serum and the liver after spontaneous or therapeutically induced HBeAg to anti-HBe or HBsAg to anti-HBs seroconversion in patients with chronic hepatitis B.
Hepatology, 15 (1992), pp. 32-36
[44]
C. Pichoud, F. Berby, L. Stuyver, M.A. Petit, C. Trépo, F. Zoulim.
Persistence of viral replication after anti-HBe seroconversion during antiviral therapy for chronic hepatitis B.
J Hepatol, 32 (2000), pp. 307-316
[45]
J.M. Pawlotsky, A. Bastie, C. Hézode, I. Lonjon, F. Darthuy, J. Rémiré, et al.
Routine detection and quantification of hepatitis B virus DNA in clinical laboratories: performance of three commercial assays.
J Virol Methods, 85 (2000), pp. 11-21
[46]
H.H. Kessler, S. Preininger, E. Stelzl, E. Daghofer, B.I. Santner, E. Marth, et al.
Identification of different states of hepatitis B virus infection with a quantitative PCR assay.
Clin Diagn Lab Immunol, 7 (2000), pp. 298-300
[47]
European Association for the Study of the Liver.
EASL Clinical Practice Guidelines: Management of chronic hepatitis B virus infection.
J Hepatol, 57 (2012), pp. 167-185
[48]
A. Lok, B.J. McMahon.
Chronic Hepatitis B: Update 2009. AASLD Practical Guidelines.
Hepatology, 50 (2009), pp. 1-36
[49]
M. Manno, C. Camma, F. Schepis, F. Bassi, R. Gelmini, F. Giannini, et al.
Natural history of chronic HBV carriers in northern Italy: morbidity and mortality after 30 years.
Gastroenterology, 127 (2004), pp. 756-763
[50]
J.H. Hoofnagle.
Reactivation of hepatitis B.
Hepatology, 49 (2009), pp. 56-65
[51]
A.S. Lok, B.J. McMahon.
Chronic hepatitis B: update of recomendations.
Hepatology, 39 (2004), pp. 857-861
[52]
M.R. Brunetto, M. Stemler, F. Schodel, H. Will, A. Ottobrelli, M. Rizzetto, et al.
Identification of HBV variants which cannot produce precore derived HBeAg and may be responsible for severe hepatitis.
Ital J Gastroenterol, 21 (1989), pp. 151-154
[53]
W.F. Carman, M.R. Jacyna, S. Hadziyannis, P. Karayiannis, M.J. McGarvey, A. Makris, et al.
Mutation preventing formation of hepatitis B e antigen in patients with chronic hepatitis B infection.
Lancet, 334 (1989), pp. 588-591
[54]
M.L. Funk, D.M. Rosenberg, A.S. Lok.
World-wide epidemiology of HBeAg negative chronic hepatitis B and associated precore and core promoter variants.
J Viral Hepat, 9 (2002), pp. 52-61
[55]
C.J. Chu, E.B. Keeffe, S.H. Han, R.P. Perrillo, A.D. Min, C. Soldevila-Pico, U.S. HBV Epidemiology Study Group, et al.
Prevalence of HBV precore/core promoter variants in the United States.
Hepatology, 38 (2003), pp. 619-628
[56]
P. Lampertico, E. del Ninno, A. Manzin, M.F. Donato, M.G. Rumi, G. Lunghi, et al.
A randomized controlled trial of a 24 month course of interferon alpha2b in patients with chronic hepatitis B who had hepatitis B virus DNA without hepatitis B e antigen in serum.
Hepatology, 26 (1997), pp. 1621-1625
[57]
A. Mangia, Y.H. Chung, J.H. Hoofnagle, L. Birken-Meyer, I. Mushahwar, A.M. di Bisceglie.
Pathogenesis of chronic liver disease in patients with chronic hepatitis B virus infection without serum HBeAg.
Dig Dis Sci, 41 (1996), pp. 2447-2452
[58]
G.V. Papatheodoridis, E. Manesis, J.J. Hadziyannis.
The long-term outcome of interferon-treated and untreated patients with HBeAg-negative chronic hepatitis B.
J Hepatol, 34 (2001), pp. 306-313
[59]
N.C. Tassopoulos, R. Volpes, G. Pastore, J. Heathcote, M. Buti, R.D. Goldin, et al.
Efficacy of lamivudine in patients with hepatitis B e antigen-negative/hepatitis B virus DNA-positive (precore mutant) chronic hepatitis B. Lamivudine precore mutant group.
Hepatology, 29 (1999), pp. 889-896
[60]
H.L.Y. Chan, N.W.Y. Leung, M. Hussain, M.L. Wong, A.S.F. Lok.
Hepatitis B e antigen negative chronic hepatitis B in Hong Kong.
Hepatology, 31 (2000), pp. 763-768
[61]
B.C. Yoo, J.W. Park, H.J. Kim, D.H. Lee, Y.J. Cha, S.M. Park.
Precore and core promoter mutations of hepatitis B virus and hepatitis B e antigen-negative chronic hepatitis B in Korea.
J Hepatol, 38 (2003), pp. 98-103
[62]
J.P. Zarski, P. Marcellin, M. Cohard, J.M. Lutz, C. Bouche, A. Rais.
Comparison of anti-HBe-positive and HBeAg-positive chronic hepatitis B in France.
J Hepatol, 20 (1994), pp. 636-640
Copyright © 2012. Elsevier España, S.L. and AEEH y AEG
Opciones de artículo
Herramientas
es en pt

¿Es usted profesional sanitario apto para prescribir o dispensar medicamentos?

Are you a health professional able to prescribe or dispense drugs?

Você é um profissional de saúde habilitado a prescrever ou dispensar medicamentos