Introducción: La enfermedad hemorroidal es la patología anorrectal más prevalente en nuestro medio. El tratamiento de las hemorroides internas en los grados más avanzados (grado III/IV) se basan fundamentalmente en técnicas quirúrgicas resectivas con el consiguiente riesgo de complicaciones junto al difícil control del dolor posoperatorio y la importante alteración en la calidad de vida en las siguientes semanas de la cirugía. Emborrhoid es una técnica endovascular basada en la embolización de la arteria rectal superior mediante cateterismo y realizada en régimen ambulatorio. Se evita, por tanto, un traumatismo anorrectal directo que disminuye notablemente las comorbilidades asociadas a la cirugía convencional.

Objetivos: Determinar la efectividad y seguridad para el tratamiento de las hemorroides internas grado III/IV. Analizar la evolución a corto y medio plazo de los pacientes sometidos a Emborrhoid. Valorar indicaciones de dicho procedimiento.

Métodos: Se realiza estudio de serie de casos retrospectivo de pacientes con hemorroides grado III/IV sometidos a embolización de arteria rectal superior (Emborrhoid). Se realiza una valoración del posoperatorio inmediato así como los síntomas percibidos de manera subjetiva por los pacientes a corto y medio plazo evaluados del 1-4 (1 nunca, 2 puntualmente, 3 frecuentemente, 4 siempre).

Resultados: Fueron intervenidos 5 pacientes en el último trimestre del año 2022 con una edad media de 53,8 (45-64). En relación al sangrado, los pacientes pasaron de una media de 3,8 (siempre) a una media de 1,2 (p < 0,005) en su evaluación a los 3 meses. De la misma manera, el dolor disminuyó desde 3,6 hasta 1 (p < 0,005). Ambos síntomas se evaluaron según una escala subjetiva que evaluaron del 1 (nunca) al 4 (siempre). La clasificación de Goligher (valora el grado de prolapso de las hemorroides internas) con una media de 3,2 disminuyó a 2 (p < 0,02) con un único paciente con hemorroides grado IV para los que este tratamiento no fue efectivo en relación al prolapso pero sí en relación al resto de la sintomatología hemorroidal. Otros síntomas como el prurito o el ensuciamiento de la ropa interior también disminuyeron de manera significativa en el seguimiento a corto y medio plazo. Ningún efecto adverso fue descrito y no hubo alteración en la continencia defecatoria de los pacientes sometidos a dicho tratamiento.

Conclusiones: Emborrhoid es una alternativa segura y efectiva para el tratamiento de la patología hemorroidal. Puede ser una buena alternativa en pacientes con enfermedad hemorroidal avanzada sintomática con alto riesgo anestésico ya que es un procedimiento realizado bajo anestesia local. Son necesarios más estudios comparativos para valorar realmente su efectividad y eficiencia en relación al resto de tratamientos conservadores de la enfermedad hemorroidal.