Objetivos: La activación inmunológica, por infección natural o tras la administración de vacunas, puede precipitar el desarrollo de síndromes neurológicos inmunomediados (SNI). Aunque la relación causal no está completamente establecida, resulta clave identificar estos desencadenantes para mejorar nuestro conocimiento sobre mecanismos fisiopatológicos que puedan tener lugar.

Material y métodos: Estudio retrospectivo de pacientes ingresados por síndromes neurológicos inmunomediados (SNI) durante 6 años (2018-2023). Se contrastaron las características demográficas, clínicas y evolutivas según la existencia o no de antecedente reciente de infección o vacunación.

Resultados: Se incluyeron 272 pacientes (52,6% mujeres) con una edad media de 51,8 (DE: 20,14) años. Cuarenta y siete (17,3%) presentaron historia reciente de infección y 17 (6,3%) de vacunación, con intervalo medio respectivo de 10 (DE: 7,9) y 8,1 (DE: 9,0) días desde el evento hasta el inicio de los síntomas neurológicos. Los SNI más frecuentes fueron polineurorradiculopatía (25,4%), brote de esclerosis múltiple (19,1%), miastenia gravis (14,3%), neuropatías craneales (13,3%), encefalitis (12,5%), neuritis óptica (8,8%) y mielitis (6,3%). Las polirradiculoneuropatías y neuritis ópticas mostraron la proporción más alta de infección previa (27,5% y 20,8%), mientras que las encefalitis y neuropatías craneales la mayor proporción de vacunación reciente (14,7% y 13,5%). No se encontraron diferencias significativas en sexo, edad, tipo de SNI o evolución clínica.

Conclusión: Los antecedentes de infección o vacunación varían según el SNI sin modificar la presentación o evolución clínicas. No se observa un gran impacto de estos en el curso de la enfermedad.