El consumo paterno de alcohol antes de la concepción, ¿afecta a la salud del bebé, directa o indirectamente?—t.f., nev.
Los estudios demuestran que el consumo materno y paterno de alcohol está relacionado1. Bakhireva et al. hallaron que un patrón de consumo de alcohol abusivo por parte del padre se asociaba a consumo materno2.
Estos estudios sugieren que deben desplegarse estrategias orientadas a la pareja para prevenir trastornos del espectro alcohólico fetal (TEAF).
El alcohol es una sustancia teratógena que causa malformaciones embrionarias y puede producir TEAF, que incluye síndrome alcohólico fetal, defectos de nacimiento relacionados con el alcohol y trastornos del desarrollo neurológico fetal3.
La principal causa prevenible de defectos y discapacidades neonatales en Estados Unidos es el consumo de alcohol3.
Un estudio de 2016 realizado por Day et al. demuestra que hasta un 75% de los niños con TEAF eran hijos de hombres alcohólicos4. Los autores citan un estudio epidemiológico de Kaiser que relaciona la frecuencia y gravedad de algunas anomalías congénitas, como los defectos del septo ventricular en neonatos, con el consumo de alcohol por parte del padre. Aunque se requieren más estudios de investigación para descartar factores paternos, maternos o de otro origen, estos estudios sugieren que los cambios en los hábitos de vida de los padres podrían disminuir el riesgo de determinados trastornos congénitos en los niños4.