Artificial Intelligence (AI) is revolutionizing rehabilitation by enabling data-driven, personalized, and effective patient care. AI systems analyze patterns, predict outcomes, and adapt treatments to individual needs, empowering clinicians to deliver more targeted and responsive interventions. This review explores AI's role in rehabilitation, focusing on its applications in personalized care, outcome prediction, and real-time patient monitoring. Evidence from current literature highlights how AI improves patient satisfaction, engagement, and clinical outcomes by fostering a stronger therapeutic alliance and promoting adherence to treatment plans. However, significant challenges remain, including data privacy concerns, clinician training gaps, and disparities in technology access. Addressing these barriers is essential to optimize AI adoption and fully realize its potential to enhance patient-centered care. By integrating AI into daily practice, rehabilitation professionals can deliver more efficient, individualized, and high-quality care, paving the way for transformative advancements in the field.
La inteligencia artificial (IA) está revolucionando la rehabilitación, permitiendo el cuidado al paciente impulsado por datos, personalizado y efectivo. Los sistemas de IA analizan patrones, predicen resultados y adaptan tratamientos a las necesidades individuales, empoderando a los clínicos a realizar intervenciones más focalizadas y receptivas. Esta revisión explora el rol de la IA en la rehabilitación, centrándose en sus aplicaciones en el cuidado personalizado, la predicción de los resultados y la monitorización a tiempo real. La evidencia procedente de la literatura actual destaca el modo en que la IA mejora la satisfacción, el compromiso y los resultados clínicos del paciente, fomentando una alianza terapéutica más fuerte y promoviendo la adherencia a los plantes terapéuticos. Sin embargo, persisten dificultades significativas, incluyendo las cuestiones sobre privacidad de los datos, las brechas formativas de los clínicos y las disparidades en cuanto al acceso a la tecnología. Abordar estas barreras es esencial para optimizar la adopción de la IA y comprender plenamente su potencial para mejorar la atención centrada en el paciente. Integrando la IA en la práctica diaria, los profesionales rehabilitadores pueden prestar una atención más eficiente, individualizada y de alta calidad, preparando el camino a los avances transformativos en este campo.