Objetivos: Intentar describir otros métodos de enseñanza de adultos, incentivando la participación y centrados en el discente. Se busco asimismo mejorar los conocimientos, habilidades y actitudes de los alumnos, necesarios para la evaluación clínica de los mayores.

Metodología: Somos un centro docente que atendemos unas 60.000 personas con un 24% > 65 años, tenemos asignados unos 20-25 residentes. En verano las actividades docentes disminuyen y al ofertarnos el estudio Pycaf decidimos acreditar un curso de auto-formación que fuera práctico y participativo. Los contenidos fueron basados en realizar una evaluación geriátrica adaptada a primaria. Se intento revisar los conceptos de fragilidad y discapacidad y la prevención del envejecimiento patológico. Asimismo se dio a conocer las principales escalas y métodos diagnósticos para valorar la esfera cognitiva, psicológica, física, social y funcional. Para prevención de la fragilidad revisamos la guía del Ministerio y practicamos programas de actividad física multicomponente y las pruebas de ejecución. Otro apartado fue la revisión de la medicación, retirando la potencialmente inadecuada sobre todo para evitar caídas.

Resultados: Se realizo el curso en 6 sesiones durante el mes de agosto, se inscribieron 32 personas, además de unos 12 residentes, de los cuales 8 asistieron al congreso con una beca. Los contenidos teóricos prácticos y la metodología fue valorada con un 7,6; el grado de aprendizaje conseguido en un 7,8. La aplicabilidad a la práctica diaria de un 7,8. La organización un 7,9 y la utilidad de la autoformación como metodología en un 8. Los residentes consideraban muy útil saber que significaba lo que estaban realizando. Para la implantación de estas herramientas se considero que las limitaciones detectadas fueron el tiempo, la inexperiencia y la escasez de recursos de apoyo.

Conclusiones: La enseñanza del adulto debe ser algo más que una clase magistral. Está comprobado que el participante aprende en la medida que participa más. La experiencia nos señala que el enseñar a otros es lo que, finalmente, nos hace tener un mayor dominio del tema. Las becas Pycaf han sido un aliciente de motivar a residentes fuera de la rutina diaria y la posible revisión de la cartera del mayor ahondaría en su aplicabilidad.