Objetivos: Grado de control y perfil de los pacientes hipertensos.

Metodología: Estudio descriptivo transversal de los hipertensos atendidos en una consulta de atención primaria de un centro de salud urbano. Para calcular el buen control se ha usado los valores recomendados por ADA 2018 (tensión arterial <140mmHg y <90 mmHg, como complicaciones se valoró la existencia de accidente cerebrovascular y enfermedad vascular periférica o cardiaca; para calcular el patrón circadiano se ha usado un mapa de 24 horas; para variables cuantitativas se ha utilizado la media y la desviación típica y para variables cualitativas porcentajes.

Resultados: Se reclutaron 174 sujetos hipertensos, con una edad media de 62,73±13,7 años, predominio femenino (54,6%), IMC de 28,91±5,5, presentando una complicación cardiovascular el 7,5%; el 19% eran diabéticos. Los valores medios de tensión arterial encontrados fueron de 137,4±7,08 mmHg para la sistólica y de 81,9±8,3 mmHg para la diastólica. El 86,2% tenía prescrito algún tipo de tratamiento para la hipertensión, cumpliendo el 58,6% cifras de control de tensión arterial adecuadas. Al analizar el ritmo circadiano el 46% eran dipper, el 44,3% no dipper y el 9,8% riser.

Conclusiones: El grado de control de los hipertensos es claramente mejorable, no cumpliendo casi el 40% las recomendaciones. El perfil del hipertenso atendido es el de una mujer de 62 años con sobrepeso. Más de la mitad de los pacientes hipertensos son no dipper o riser lo que se asocia con un incremento del daño a órganos diana, efectos cardiovasculares adversos y a la existencia de una causa secundaria subyacente.

Palabras clave: Hipertensión. Atención Primaria. Diabetes