Introducción: En la actualidad hay consenso en intervenir a los pacientes con síntomas esofágicos severos o aquellos en los que se haya objetivado un empeoramiento clínico en relación con un incremento considerable del tamaño diverticular.

Caso clínico: Paciente que es sometido a cirugía transhiatal laparoscópica para tratamiento de divertículo epifrénico presentando perforación esofágica tratada con sutura primaria y colocación de endoprótesis, durante el postoperatorio se objetiva una fistula esofagopleural originada en el borde superior de la endoprótesis. Se procede a la colocación de nueva endoprótesis acabalgada sobre la previa, cobertura antibiótica de amplio espectro, colocación de drenaje pleural y alimentación por sonda nasoyeyunal. Presenta buena evolución clínica confirmándose el cierre de la fistula a las 6 semanas, siendo dado de alta con buena tolerancia oral.

Conclusiones: Las fistulas esofágicas son una de las complicaciones más graves a las que nos enfrentamos tras este tipo de cirugías y que requiere un diagnóstico y tratamiento precoz.