La intoxicación por propanil, un plaguicida herbicida metahemoglobinizante, ocasiona diferentes signos y síntomas, desde leves como la fatiga, hasta importantes como la cianosis, el trastorno del ritmo cardiaco, el déficit neurológico, la falla ventilatoria e incluso la muerte, entre otros, según el grado de exposición al tóxico. En instituciones de salud de baja a mediana complejidad que no cuenten con la posibilidad de identificar el tóxico y de medir el grado de intoxicación, se vuelve un gran reto orientar el diagnóstico y el manejo médico. La dosis letal de exposición al propanil es de 10ml del compuesto sin diluir y de 200ml diluido. Por lo tanto, las manifestaciones clínicas y la escala NEWS2 pueden ser el mejor aliado para orientar el diagnóstico y el tratamiento, y así, disminuir la tasa de morbimortalidad. Hay diversos tratamientos experimentales, con insuficiente evidencia científica para manejar este tipo de intoxicación y así evitar desenlaces agudos como una hepatopatía o fatales como la hemólisis; sin embargo, el azul de metileno se ha posicionado como el antídoto de elección para la metahemoglobinemia moderada a grave. Son escasos los pacientes que llegan a necesitar exanguinotransfusión para mitigar el elevado riesgo de mortalidad. Las políticas de salud pública han demostrado disminución en la incidencia de morbimortalidad.
Propanil poisoning, a methemoglobinemia-inducing herbicide pesticide, causes a wide range of signs and symptoms, from mild manifestations such as fatigue to severe complications including cyanosis, arrhythmias, neurological deficits, ventilatory failure, and even death, depending on the degree of exposure to the toxin. In low- to medium-complexity healthcare institutions that lack the ability to identify the toxin or quantify the degree of intoxication, diagnosing and managing such cases presents a significant challenge. The lethal dose of propanil exposure is approximately 10ml of the undiluted compound or 200ml in its diluted form. Therefore, clinical manifestations and score NEWS2 become a crucial tool in guiding diagnosis and treatment, improving morbidity and mortality rates. Various experimental treatments exist, but there is insufficient scientific evidence to effectively manage this type of poisoning and prevent acute outcomes such as hepatopathy or fatal complications like haemolysis. However, methylene blue has emerged as the antidote of choice for moderate to severe methemoglobinemia. Few patients require exchange transfusion to mitigate the high risk of mortality. Public health policies have demonstrated a reduction in the incidence of morbidity and mortality associated with propanil poisoning.
Artículo
Socios de la Asociación de Medicina Crítica y Cuidado Intensivo
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