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Conceptos básicos
de dermofarmacia
Recibido en
enero de 2005
El color de la piel se ha convertido en sinónimo de belleza; se considera que una persona con una piel bronceada es más atractiva, por lo que, en muchos casos, se realizan exposiciones prolongadas al sol, con el consecuente riesgo de presentar diferentes grados de eritema, melanoma, e incluso cáncer cutáneo fotoinducido. El conocimiento de los diferentes fototipos puede ayudar a tomar las medidas necesarias para evitar estos trastornos.
Definición
El fototipo es la capacidad de adaptación al sol que tiene cada persona desde que nace, es decir, el conjunto de características que determinan si una piel se broncea o no, y cómo y en qué grado lo hace. Cuanto más baja sea esta capacidad, menos se contrarrestarán los efectos de las radiaciones solares en la piel.
Determinación visual
Se trata de la observación del color de la piel en las partes sin exponer o expuestas mínimamente al sol (la parte inferior de las piernas --justo sobre los tobillos--, detrás de la rodilla o la zona interna del antebrazo). No se debe utilizar la parte expuesta de la piel de la cara, del cuello o de los brazos (o pecho, en el caso de los hombres), debido a que el color de estas zonas está alterado por una fotoexposición repetida y prolongada.
También son importantes otros factores, tales como:
* Aparición de pecas en verano.
* Color epidérmico en invierno: lechoso o blanco.
* Brillo: mate o ligeramente opaco.
* Color adquirido al broncearse: dorado, dorado-moreno, moreno (en sus diferentes tonalidades).
* Aparición de eritema (enrojecimiento) ante una exposición inmediata al sol (menos de 10 min).
* Presencia de eritema a los 21 días de exposición. Para determinar el grado de activación de los mecanismos fotoprotectores de la piel (formación de pigmento y engrosamiento del estrato córneo, que requieren 2-4 semanas para desarrollarse).
* Historia genética.
* Edad.
* Número de quemaduras solares graves que se ha tenido previamente.
* Posibilidad de fotosensibilización por determinados alimentos, medicamentos y cosméticos, entre otros posibles agentes causales.
Clasificación
Hay diferentes formas de clasificar los fototipos cutáneos. La más utilizada es la del Dr. T. Fitzpatrick (tabla 1).
En la tabla 2 se muestra un test de evaluación del fototipo cutáneo.
El fototipo puede establecerse mediante evaluación y una serie de aspectos descriptivos de la piel (tabla 3). Para ello se realizan cuestionarios simples como el propuesto en la tabla 2.
Actualmente, hay equipos que ayudan a la medición del color de la piel y del grado de eritema presente en ella. Estos equipos disminuyen el grado de subjetividad presente en un análisis visual y se fundamentan en el principio de absorción-reflexión lumínica.
Fe de errores
En el pasado número de marzo (Offarm 2005;24[3]:120-3), la autoría de la ficha titulada «Máscara de pestañas (I)» se atribuía a Anna Viscasillas y Alfonso del Pozo, cuando los autores verdaderos eran M. Teresa Alcalde y Alfonso del Pozo, tal como aparecía en el sumario. Rogamos disculpas por este error ajeno a la voluntad de la Redacción.
Bibliografía general
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