Los tumores de intestino delgado son poco frecuentes, comprenden el 1-3% de los tumores gastrointestinales1,2. Su incidencia es muy baja y oscila entre 0,4 y 1/100.000 habitantes/año; 2/3 son malignos y sólo 1/3 son benignos1-3.
Varón de 74 años que presentó un episodio de hemorragia digestiva alta; en la gastroscopia y la colonoscopia sólo se evidenció una diverticulosis. La analítica reveló anemia microcítica, y con la cápsula endoscópica y una endoscopia posterior hasta yeyuno se evidenció en los primeros centímetros del yeyuno una gran ulceración de aspecto neoplásico. La tomografía computarizada y el tránsito intestinal mostraron una doble tumoración yeyunal, una en el ángulo de Treitz y otra más distal (fig. 1). En la intervención quirúrgica se encontró un primer tumor desde la cuarta porción duodenal hasta unos 15 cm del yeyuno, y un segundo a unos 20 cm del primero, y que infiltraba el colon transverso. Se realizó una doble resección segmentaria de yeyuno con resección del segmento del colon afectado. El informe anatomopatológico evidenció dos adenocarcinomas sincrónicos de 9 y 7 cm, pobremente diferenciados, con afección de la serosa en ambos casos; metástasis en 9 de 22 adenopatías aisladas.
Fig.1.Tránsito baritado en el que se observan dos estenosis segmentarias en dos asas de yeyuno proximal (flechas), en “servilletero”.
El más frecuente de los tumores malignos del intestino delgado es el adenocarcinoma (33-45%), de localización preferente en el duodeno y el yeyuno proximal; le siguen en frecuencia los tumores carcinoides, linfomas y sarcomas1-3.
Debido a que los síntomas son muy inespecíficos hay un intervalo medio entre el inicio de los síntomas y el diagnóstico de 6,6 meses4. Para su diagnóstico es fundamental realizar tránsito intestinal, tomografía computarizada abdominal y endoscopia digestiva1-5.
El tratamiento de elección es la resección quirúrgica amplia que incluya los ganglios linfáticos regionales1-5.La quimiorradioterapia no ha demostrado su efectividad1,2. La supervivencia a los 2 años en tumores R0 es del 6466% y a los 5 años, del 38-45%3.
En conclusión, los tumores del intestino delgado son infrecuentes y su diagnóstico es difícil debido a la inespecificidad de sus síntomas. Por todo ello, el médico ha de tener un alto índice de sospecha para evitar un retraso en el diagnóstico.
Correspondencia: Dra. M.A. Martínez Blasco. Uruguay, 8, pta. 10. 46007 Valencia. España. Correo electrónico: mamborg6@hotmail.com
Manuscrito recibido el 16-2-2007 y aceptado el 15-12-2007.
