441/9 - LA ANTICOAGULACIÓN EN LA FIBRILACIÓN AURICULAR EN UN CENTRO DE SALUD
1Médico de Urgencias. Hospital Reina Sofía. Murcia. 2Médico de Equipo de Atención Primaria. Espinardo. Murcia. 3Médico Gerencia 061. Murcia.
Objetivos: Conocer si los pacientes con fibrilación auricular no valvular están correctamente tratados según el índice CHADS2, CHA2 DS2-VASC y el riesgo de hemorragia HAS-BLED.
Metodología: Estudio descriptivo, observacional y transversal. Seleccionamos los 232 pacientes con fibrilación auricular no valvular de un centro de salud. Recogemos variables correspondientes a las escalas CHADS2 y CHA2DS2-VASc que evalúan el riesgo tromboembólico y las incluidas en la escala HAS-BLED que valora el riesgo de hemorragia.
Resultados: El 56,9% de los pacientes son mujeres, la edad media es de 75,81 años (± 10,51). Son hipertensos el 70%, diabéticos el 36,6%. Han presentado algún tipo de accidente cerebrovascular el 13,8%, el 13,4% ha tenido un IAM. El 7,3% tiene predisposición al sangrado. El 62,5% no consume fármacos antiagregantes o AINES. El 56,9% está anticoagulado con acenocumarol. El 36,6% de los sujetos presenta un alto riesgo tromboembólico según CHADS2 (CHADS2 > 2) frente al 92,6% que presenta riesgo alto con CHA2 DS2-VASC (≥ 2). El 45,7% no se debería anticoagular por alto riesgo de sangrado (HAS-BLED ≥ 3). 23 pacientes tienen bajo riesgo según CHADS2 por lo que no deberían llevar tratamiento de los que el 56% está anticoagulado. Del 72,09% de los pacientes que deberían estar anticoagulados según CHA2 DS2-VASC (el 38,70% de los anticoagulados presenta riesgo de sangrado según HAS-BLED) el 22,32% están antiagregados.
Conclusiones: La fibrilación auricular multiplica por cinco el riesgo de ictus y embolia sistémica superior. Es fundamental conocer el riesgo cardioembólico y de sangrado para adecuar el tratamiento.
Palabras clave: Fibrilación auricular. Anticoagulación. Atención Primaria.




