Hemos leído con interés el artículo de Zambrana-García et al.1 recientemente publicado en JOURNAL OF HEALTHCARE QUALITY RESEARCH donde evalúan si llevar a cabo una valoración diaria de pacientes hospitalizados —incluidos los fines de semana y los festivos— tiene impacto sobre el número de estancias generadas, la estancia media y la mortalidad global y precoz. Los autores analizaron una serie de 2.565 episodios durante un año (2015).
El objetivo principal del estudio era evaluar un modelo asistencial que se resume en la valoración de todos los pacientes hospitalizados por parte facultativa de forma diaria, independientemente del día de la semana en que nos encontremos, se trate de día festivo o no. Apoyando los resultados de estos autores, las unidades de corta estancia (UCE) se han desarrollado como alternativa a la hospitalización para reducir la estancia de ingresos de pacientes seleccionados, evitar el uso de camas de hospitalización convencional por pacientes que no se beneficiarían de las mismas y reducir los costes sociosanitarios ligados al ingreso hospitalario2. En estas unidades la mejora en la gestión se debe a un cambio profundo en la cultura de la optimización del tratamiento hospitalario, cuyos pilares son: la proporcionalidad del tratamiento; la minimización de la iatrogenia; la movilización precoz si el estado funcional previo del paciente lo permite; la relación con otras alternativas a la hospitalización; la continuidad asistencial, y, finalmente, al igual que el modelo de los autores, la valoración de los pacientes de forma diaria independientemente del día de la semana3-6. Y diferentes estudios y revisiones concluyen, en línea con este estudio, que estos modelos pueden ayudar a mejorar la efectividad de la asistencia sanitaria7.
En el estudio analizaron diferentes variables epidemiologias, y entre ellas el día de ingreso, sábado, domingo o festivo, que denominaron periodo de fin de semana (FS), y si el ingreso se producía en el resto de días lo denominaron periodo de no fin de semana (NFS). Concluyeron que la atención diaria a pacientes hospitalizados elimina el exceso de mortalidad de los FS. Creemos que hay un aspecto importante que generaría una mejora en los resultados del estudio sobre este aspecto. En un estudio observacional prospectivo realizado en nuestro medio en el que se analizó a 1.650 pacientes, entre agosto de 2011 y enero de 2012, que ingresaron consecutivamente en la sala de cardiología de un hospital terciario procedentes del servicio de urgencias, de la unidad coronaria o de otro servicio, se evidenció que el ingreso en viernes era un predictor de estancia prolongada (>4días), con OR de 2,021 (IC95%: 1,349-3,028; p=0,001)8. En otro estudio nacional, sobre 819 pacientes ingresados en una UCE, se encontró como factor independiente asociado a una estancia prolongada el ingresar un jueves (OR: 1,90; IC95%: 1,19-3,05; p=0,008)9. Estos resultados van en consonancia con un estudio internacional de una cohorte de 70.094 pacientes de 246 hospitales de Estados Unidos, donde el ingreso en jueves, viernes o sábado motivó una estancia significativamente más prolongada10. Por ello, hubiera sido interesante conocer si el realizar el ingreso de jueves a sábado en el estudio de Zambrana-García et al.1 se relacionaba con la estancia y la mortalidad.
Por último, destacar que estudios sobre modelos asistenciales innovadores como el de Zambrana-García et al.1 permiten mejorar la calidad asistencial en la atención de los pacientes ingresados y que deberían ser propuestas de generalización en todos los hospitales de nuestro país.
Conflicto de interesesLos autores declaran la ausencia de conflicto de intereses.



