Sepsis continues to be one of the leading causes of death in ICUs worldwide. Treatment approaches are constantly evolving, with the choice of antibiotics playing a crucial role in determining patient outcomes.
ObjectiveThis study aims to compare how safe and effective cefoperazone–sulbactam and piperacillin–tazobactam are when used to treat sepsis patients in the Medical Intensive Care Unit (MICU).
MethodologyWe conducted a randomized, prospective and retrospective study involving 100 patients diagnosed with sepsis (with or without other health conditions) who were receiving treatment in the MICU. Patients were randomly assigned to one of two groups: Group-I received cefoperazone–sulbactam (50 patients) and Group-II received piperacillin–tazobactam (50 patients). We monitored clinical measurements including body temperature, heart rate, breathing rate, and white blood cell counts.
ResultsWe analyzed our data using Two-way ANOVA statistical methods. Our findings revealed that piperacillin–tazobactam produced better clinical outcomes than cefoperazone–sulbactam across several measurements. Patients in Group-II showed faster return to normal vital signs and inflammatory markers. The treatment satisfaction score significantly favored the piperacillin–tazobactam group (p<0.05).
ConclusionPiperacillin–tazobactam appears to be more effective for treating sepsis in MICU settings. This finding has important implications for antibiotic stewardship programs and clinical protocols in sepsis management.
La sepsis sigue siendo una de las principales causas de muerte en las UCI a nivel mundial. Los enfoques terapéuticos evolucionan constantemente, y la elección de antibióticos juega un papel crucial en la evolución de los pacientes.
ObjetivoEste estudio busca comparar la seguridad y la eficacia de cefoperazona-sulbactam y piperacilina-tazobactam en el tratamiento de los pacientes con sepsis en la unidad de cuidados intensivos médicos (UCIM).
MetodologíaSe realizó un estudio aleatorizado, prospectivo y retrospectivo con 100 pacientes con diagnóstico de sepsis (con o sin otras afecciones) que recibían tratamiento en la UCIM. Los pacientes fueron asignados aleatoriamente a uno de dos grupos: el grupo I recibió cefoperazona-sulbactam (50 pacientes) y el grupo II recibió piperacilina-tazobactam (50 pacientes). Se monitorizaron parámetros clínicos como la temperatura corporal, la frecuencia cardíaca, la frecuencia respiratoria y el recuento de leucocitos.
ResultadosSe analizaron los datos mediante el método estadístico ANOVA de dos vías. Nuestros hallazgos revelaron que la combinación piperacilina-tazobactam produjo mejores resultados clínicos que la cefoperazona-sulbactam en diversas mediciones. Los pacientes del grupo II mostraron una recuperación más rápida de los signos vitales y los marcadores inflamatorios normales. La puntuación de satisfacción con el tratamiento favoreció significativamente al grupo piperacilina-tazobactam (p<0,05).
ConclusiónLa piperacilina-tazobactam parece ser más eficaz para el tratamiento de la sepsis en UCIN. Este hallazgo tiene importantes implicaciones para los programas de optimización del uso de antibióticos y los protocolos clínicos en el manejo de la sepsis.
Artículo
Socios de la Asociación de Medicina Crítica y Cuidado Intensivo
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