Objetivos: Definir las principales funciones del y la profesional de trabajo social especializado en este campo en el proceso de neurorrehabilitación con un paciente con daño cerebral adquirido (DCA).

Material y métodos: Búsqueda bibliográfica en Scielo, Dialnet y Elsevier.

Resultados: El acceso a un tratamiento neurorrehabilitador está condicionado por determinantes sociales (edad, lugar de residencia, factores económicos, entre otros) que generan desigualdades entre las personas con DCA. El papel del trabajo social es esencial para facilitar el acceso a dichos tratamientos, públicos, privados o concertados, identificar los problemas y necesidades sociales y fortalecer la rehabilitación psicosocial como parte fundamental de una rehabilitación integral. Este profesional es el encargado de movilizar los recursos, tanto personales como institucionales, la adaptación del entorno a los resultados de dicho programa y de la planificación de tratamientos y proyectos, así como su evaluación para ir resolviendo las necesidades que surgen durante el proceso neurorrehabilitador. La intervención debe contemplarse como un proceso de atención estructurado en las siguientes fases: recepción, anamnesis, diagnóstico social sanitario, valoración, planificación del tratamiento, seguimiento y reinserción social y profesional.

Conclusión: El papel del trabajo social en el acceso y mantenimiento de un tratamiento neurorrehabilitador es clave para contribuir a superar las barreras de accesibilidad al tratamiento. La atención psicosocial es clave para dar respuesta a las necesidades que puedan surgir durante el proceso en todos los ámbitos (personal, familiar, laboral, económico), siendo clave su superación para el cumplimiento adecuado del tratamiento neurorrehabilitador pautado.