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Vol. 70. Núm. 3.
Páginas 135-136 (Mayo 2010)
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La urología mexicana. El conocimiento de nuestras raíces
Mexican urology. Knowledge of our roots
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Alfredo César Juárez Albarrána
a Por invitación. Coordinador del Capítulo de Historia y Filosofía de la SMU
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Es importante conocer a quienes nos precedieron en el quehacer urológico en México y lo que hacían. A manera de introducción, no debo dejar de mencionar la frase de un autor anónimo que no ha perdido vigencia: Aquellos que no estudian su historia están condenados a repetirla. La historia de la medicina es la dedicada al estudio de los conocimientos y prácticas médicas a lo largo del tiempo. Por otra parte el término urología fue citado por primera vez en 1840, por Leroy D´Etoilles, en Paris.

En nuestro país, al comienzo del siglo XX se ejercía la venereología junto con la urología, por la gran cantidad de enfermos con sífilis, blenorragia, chancro blando, así como sus complicaciones, antes del arribo de los antibióticos. Entre los años de l870 a l880, la parte de la medicina que mostró mayor desarrollo en México, fue la cirugía; dándose inicio al periodo de definición y organización de algunas especialidades médicas, entre ellas la urología.

Nuestra especialidad ha sido motivo de atención desde las épocas más remotas; así encontramos a grandes maestros que, ignorando lo que hacían sus pares en otras partes del mundo, surgían de la nada para pronto llegar a encumbrarse. Cabe aquí recordar a los ilustres maestros, cirujanos generales, como el Dr. Regino González y el Dr. Ramón Macías, quienes practicaron por primera vez, en 1898 en el Distrito Federal, la intervención quirúrgica llamada prostatectomía perineal, cuyas piezas anatómicas fueron coleccionadas, llevadas a Francia y mostradas a uno de los sabios exponentes de la urología mundial: el Profesor Jean Casimir Félix Guyon, quien al verlas se asombró de que en esta lejana tierra, se hicieran operaciones que sólo eran permisibles, según él, a los grandes maestros del viejo continente.

Esta intervención quirúrgica fue ideada en l896 por el Dr. Macías quien logró una importante experiencia en el abordaje perineal y también el suprapúbico para la próstata; junto con el Dr. González, Director del Hospital General de México, la dio a conocer.

Por esa época en Europa destacaba la figura señera del Dr. Joaquín María Albarrán y Domínguez (1860-1912), Jefe del Servicio de Urología del famoso Hospital Necker de Paris después de Guyon, quien en su corta vida, atrajo la atención del mundo científico con sus innovaciones en el diagnóstico de la patología genitourinaria, al grado de convertirse en el primer cirujano en Francia que realizó la prostatectomía perineal, lo que reportó en "Mèdecine Opèratorie Des Voies Urinaries" en l909. De acuerdo a lo antes señalado los cirujanos de México se encontraban a la par que los de Europa.

En 1924, el Dr. Aquilino Villanueva formó el Servicio de Urología del Hospital General de México. El pabellón cinco se estableció en l930 y desde entonces se inició la preparación formal de residentes. Se fundó también el concepto para la especialización en nefrología. En l961, el citado galeno dijo: Así terminó en nuestro país esa etapa de la medicina, en que la cirugía urológica la practicaban los cirujanos generales y la venereología los urólogos. La fundación de la Sociedad Mexicana de Urología (SMU), en 1936 consagró la independencia de la especialidad y dio origen a la urología moderna.

Gracias a su espíritu visionario, otro de los logros de Don Aquilino, fue que en el ya famoso pabellón cinco del Hospital General, se diera inicio formal a los cursos anuales de urología para el grupo de médicos del Distrito Federal o de la provincia con interés en nuestra especialidad pero que no tuvieron la oportunidad de acceder a un programa de residencia formal. Lo secundaron los médicos Manuel Pesqueira, Javier Longoria Porras, Eduardo Castro, Arturo Lara Rivas, Carlos Aguirre, Alberto Guevara Rojas, Fernando Quiroz, Ángel Quevedo Mendizabal, Ricardo Labardini, Raúl Lopez Engelking, y los entonces médicos residentes del hospital. Los alumnos que llegaban de todos los confines de México, después de tres años de asistir a los cursos, recibían un reconocimiento que más adelante, junto con el cumplimiento de otros requisitos, les permitió formar parte de la SMU y del Consejo de esta especialidad. Más adelante, los urólogos Raúl López Engelking, Jaime Woolrich y sus colaboradores iniciaron los cursos teórico-prácticos para el aprendizaje de la resección transuretral de la próstata, que tanta aceptación tuvieron con la asistencia de numerosos Médicos Mexicanos y extranjeros.

Mientras ello sucedía en la capital, las residencias para ésta especialidad se fueron formalizando en el resto de la República Mexicana, hasta el comienzo de los sesentas del siglo XX; sobre todo después de que varios mexicanos salieron al extranjero a realizar la residencia en la especialidad o estancias (fellows) que les permitió actualizarse en diferentes tópicos y técnicas quirúrgicas en boga y que diseminaron a su regreso en diversos hospitales. Por lo general, en la provincia, nuestros antecesores fueron los médicos generales y cirujanos generales que prestaban atención médica y quirúrgica a los enfermos con padecimientos genitourinarios.

Pero "No todo fuera de México, D. F., es Cuautitlán", haciendo alusión contraria al añejo concepto acuñado por capitalinos de que solo en el D.F. se hacían las cosas bien; actualmente, en toda la República Mexicana, se practica la urología con altos índices de calidad y competencia. Existen urólogos que viven en la provincia y que son invitados como profesores de asociaciones y universidades Nacionales y del extranjero. Mucho tenemos que agradecer a los médicos capitalinos o de la provincia que nos antecedieron en el quehacer urológico en nuestro país.

Ello es la razón por la que hemos decidido publicar en la Revista Mexicana de Urología las Biografías de Urólogos Mexicanos, segunda mitad del siglo XX. A través de su lectura, podrán enterarse de lo que hemos hecho, lo que estamos haciendo y sobre las bases que estamos dejando para las generaciones venideras. Va nuestra invitación a todos ustedes para formar parte de este Capítulo de Historia y Filosofía de la SMU y a colaborar con él, aportando los datos de los médicos que comenzaron a hacer urología en nuestro país, desde pasadas centurias, muchos de ellos aun sin ser especialistas.


Dr. Alfredo César Juárez Albarrán

Por invitación. Coordinador del Capítulo de Historia y Filosofía de la SMU

Avenida San Fernando 5l4-3 Colonia Centro, Colima, Col. Teléfono: (01 312) 31-2-34-31.

Correo electrónico:acja@hotmail.com

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