La tomografía computarizada por emisión de fotón único (SPECT) cerebral con 123I-FP-CIT es una herramienta clave en el diagnóstico diferencial de los trastornos del movimiento (TM), pero su correcta indicación es esencial para optimizar recursos y evitar pruebas innecesarias.
ObjetivoEvaluar la adecuación y el impacto de la SPECT 123I-FP-CIT en el diagnóstico y manejo de los TM según guías clínicas.
MetodologíaEstudio retrospectivo en 249 pacientes con sospecha de parkinsonismo (PK) de origen incierto. Se les realizó SPECT 123I-FP-CIT y todos cumplieron seguimiento clínico superior a 12 meses. Las solicitudes se clasificaron según su adecuación a las guías clínicas. Se analizaron las variables: sexo, edad, justificación de la solicitud, manejo tras la SPECT y diagnóstico final.
ResultadosEl 91,57% de las solicitudes fueron apropiadas y el 8,43% no se ajustaron a las guías. El diagnóstico cambió en el 48,6% y el manejo en 70,68% tras la exploración, especialmente en casos no concluyentes y en inicio de terapia. Los neurólogos generales evaluaron más casos y realizaron más solicitudes apropiadas (96,3% vs. 76,67%; p<0,001). Sin embargo, los especialistas en TM, a pesar de un uso menos apropiado de la prueba, lograron un mayor número de diagnósticos concluyentes en casos complejos.
ConclusiónLa SPECT 123I-FP-CIT tiene un impacto clínico significativo cuando se utiliza conforme a las guías clínicas, mejorando el diagnóstico y manejo de los TM. Las exploraciones no justificadas reducen su utilidad. La colaboración entre neurólogos generales y especialistas en TM es fundamental; estos últimos, aunque muestran menor adherencia a las guías en la solicitud de la prueba, alcanzan mayor número de diagnósticos concluyentes en casos complejos.
Cerebral single photon emission computed tomography (SPECT) using 123I-FP-CIT is a key tool in the differential diagnosis of movement disorders (MD), but its appropriate indication is essential to optimize resources and avoid unnecessary tests.
ObjectiveTo evaluate the adequacy and impact of SPECT 123I-FP-CIT in the diagnosis and management of MD according to clinical guidelines.
MethodologyRetrospective study involving 249 patients with suspected parkinsonism (PK) of uncertain origin. All underwent SPECT 123I-FP-CIT and had a clinical follow-up of exceeding 12 months. Requests were classified based on their adherence to clinical guidelines. Variables analyzed included sex, age, justification for the request, management after SPECT, and final diagnosis.
Results91.57% of the requests were appropriate, while 8.43% did not adhere to the guidelines. Diagnosis changed in 48.6% of cases and management in 70.68% after the scan, especially in inconclusive cases and initiation of therapy. General neurologists evaluated more cases and made more appropriate requests (96,3% vs 76,67%;p<0,001). However, MD specialists, despite less appropriate use of the text, achieved a higher number of conclusive diagnoses in complex cases.
ConclusionSPECT 123I-FP-CIT has significant clinical impact when used in accordance with clinical guidelines, improving the diagnosis and management of MD. Unjustified scans reduce its utility. Collaboration between general neurologists and MD specialists is fundamental; the latter, although showing less adherence to guidelines in requesting the test, achieve a higher number of conclusive diagnoses in complex cases.