Objetivo docente: Conocer las diferentes lesiones cutáneas de la mama, su presentación en las técnicas de imagen (mamografía, ecografía y resonancia magnética) así como clasificarlas en benignas y malignas y analizar los patrones de afectación de la piel.

Revisión del tema: Las lesiones cutáneas de la mama son principalmente benignas, pero pueden ser la manifestación de una patología maligna subyacente. Es importante conocer las manifestaciones radiológicas para su correcto diagnóstico. Recogimos las lesiones cutáneas mamarias diagnosticadas en nuestro centro en un año (desde septiembre del 2012 hasta la actualidad). Dividimos las lesiones en aquellas cuyo origen es el tejido celular subcutáneo separándolas de aquellas lesiones mamarias que secundariamente afectan la piel. Recogimos también las tumoraciones del complejo areola-pezón y el edema mamario. Para distinguir si una lesión es dérmica “pura”, en ecografía es que las lesiones quedan rodadas por tejido dérmico o el ángulo que forma con la dermis es agudo o de 90^o, mientras que si es una lesión mamaria que invade la piel el ángulo es obtuso. También clasificamos la patología en benigna y maligna. Entre las benignas encontramos los quistes sebáceos y de inclusión, lesiones vasculares, lesiones inflamatorias, forúnculos, hematomas, necrosis grasa y cicatrices posquirúrgicas. Como etiología maligna recogimos lesiones del complejo areola-pezón, recurrencia o extensión directa de neoplasias, edema y engrosamiento de la piel.

Conclusiones: Es importante conocer las existencia de dichas lesiones dada su relativa frecuencia. Se debe realizar un correcto análisis morfológico para determinar su localización exacta, lo que favorecerá un preciso diagnóstico y un manejo médico-quirúrgico adecuado.