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Vol. 22. Núm. 1.
Páginas 32-36 (Enero 2003)
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Eugenia Garrido
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Durante el presente mes de enero tendrá lugar, en el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la presentación oficial de la Fundación Instituto de Estudios Farmacéuticos (IEF). Jorge Hinojosa, su director general, ha explicado para Offarm cuál es el objetivo de esta iniciativa pionera en nuestro país que aglutina a personalidades y expertos de la sanidad, la universidad, la sociedad y la industria con una idea común: la concepción del medicamento como algo más que un producto que se vende en farmacias.

Jorge Hinojosa

Director general de la Fundación Instituto de Estudios Farmacéuticos (IEF)

«Queremos que el IEF sea un centro de referencia a favor del medicamento»

En primer lugar, ¿de quién parte la idea de crear la Fundación IEF y por qué?

La iniciativa partió de un grupo de personas vinculadas con el mundo del medicamento y con inquietudes de investigación y estudio que querían fijar un punto de referencia independiente de los agentes que intervienen en la cadena del medicamento para darle a éste el valor social que tiene por encima de los intereses económicos. Buscábamos una organización rodeada de la mayor pluralidad posible, pues el medicamento es un gran valor social y, en consecuencia, debemos hacer de él un gran centro de referencia social que tenga valor por encima de todas las entidades. Queremos conceptuar el medicamento como algo más que un producto que se vende en las farmacias. En este sentido, el IEF puede ser un puente extraordinario entre el flujo de conocimientos que tiene Europa y Latinoamérica. También queremos participar de las preocupaciones que desde Estados Unidos surgen en torno al medicamento.

¿Cuáles son los objetivos del IEF?

El objetivo fundamental es el estudio del medicamento y del sector farmacéutico en beneficio de la sociedad desde una perspectiva sanitaria, social, económica y científica. A este objetivo se añaden los de estimular el diálogo entre los profesionales y la sociedad, promover e impulsar proyectos innovadores y desarrollar actividades que posicionen al IEF como un claro referente del sector en materia de investigación, desarrollo, innovación, formación y consultoría. Y todo para mejorar y conseguir mayores beneficios para la salud de la sociedad.

«Debemos hacer del medicamento un gran centro de referencia social que tenga valor por encima de todas las entidades»

¿Qué acciones se llevarán a cabo para alcanzar esos fines?

El IEF se apoyará en dos instrumentos. De una parte, el Foro Medicamento y Sociedad, que servirá de marco de encuentro a los profesionales que trabajan en el sector farmacéutico con profesionales de otros ámbitos sociales y económicos. Algo así como el Club Siglo XXI del medicamento, abierto a todo el público interesado en los asuntos de actualidad que se debatan. Su programación tendrá una periodicidad fija y se estructurará en torno a conferencias, almuerzos y coloquios. La otra iniciativa serán estudios de investigación sanitaria, económica y social elaborados por equipos de trabajo que abordarán las cuestiones objeto de estudio desde un enfoque plural, integrador de las diferentes posiciones e intereses en juego y debidamente coordinadas con el fin de asumir unas conclusiones claras y precisas que sirvan para orientar y dirigir el debate. Asimismo, se apoyarán y coordinarán cursos y seminarios para otras instituciones que lo soliciten.

¿Qué estudios se van a llevar a cabo?, ¿quién los va a realizar?, ¿qué se hará con los resultados obtenidos?

Los estudios intentarán ser vanguardistas. La comunidad científica será la que coordine los estudios. Desde el punto de vista de la investigación, la universidad debe ser ese punto de referencia de análisis, estudio, investigación y desarrollo, porque si no estaríamos entrando en una parcialidad de enfoque que no se puede dar. En este sentido, los estudios nunca van a ser «subcontratados» a quien esté interesado en el sector.

Por último, los resultados se pondrán al alcance del público a través de distintas publicaciones en formato papel y electrónico. Queremos ser un centro lobby a favor del medicamento. Desde esa perspectiva social pretendemos dinamizar los resultados de esos estudios de forma tal que podamos provocar una reacción en todos los sectores que intervienen en el medicamento y contribuir a su desarrollo en el sistema sanitario público.

Medicamento y farmacia

¿Qué tipo de relaciones va a mantener el IEF?

Está abierto a todos. Las farmacias son el punto de encuentro entre el ciudadano y el medicamento. En este sentido, parece lógico que el farmacéutico ocupe un lugar importante. Éstos han vivido tensiones desde el punto de vista de la representatividad, y fruto de éstas se han adoptado posiciones muy contrarias entre unos y otros en función de a qué entidad se representaba. Por encima de todo, el farmacéutico es el punto de encuentro entre el medicamento y la sociedad, y si todos lo entienden así, el IEF, en su vocación de orientar el medicamento hacia la sociedad, podrá ser un aliado tanto de los colegios como de las asociaciones empresariales. Si nos abstraemos de tensiones específicas, el IEF puede y debe ser usado por todos los que tienen interés en el medicamento para mantener un sistema que defiende todo el mundo porque es el que satisface a todos.

En concreto, ¿qué va a ofrecer el IEF a los farmacéuticos de oficina de farmacia?

El IEF tiene la vocación de convertirse en un centro de excelencia para todos los profesionales y personas interesadas en el medicamento a partir de su servicio de estudios, documentación y un banco de datos amplio que contribuya a mejorar la comparación de fuentes de información, entre otras cosas.

¿Están los farmacéuticos de oficina lo suficientemente involucrados en este tipo de iniciativas?

El medicamento, en su concepto, no ha cambiado con el paso de los años. Sin embargo, la sociedad sí que lo ha hecho, y el farmacéutico no se ha vinculado suficientemente a estos cambios. Los profesionales que intervienen en la cadena del medicamento tienen que evolucionar a la par de la sociedad y ser más que lo que eran antes.

«Los profesionales que intervienen en la cadena del medicamento tienen que evolucionar a la par de la sociedad y ser más que lo que eran antes»

Como ex secretario general de la UCE, ¿cree que los ciudadanos agradecen el servicio que prestan las oficinas de farmacia?

El 95% de los medicamentos son de prescripción, por lo que, generalmente, la vinculación del ciudadano a la farmacia está mediatizada por un médico. Aun así, la oficina de farmacia, en términos de prestación de servicios, está bien vista por los ciudadanos. No hay un conflicto social en torno a la oficina de farmacia, sino que éste se da en relación al medicamento por cuestiones que, en ningún caso, son sociales. El farmacéutico, sin embargo, debe aprovechar el campo que le abren las EFP para vincularse al ciudadano en cuestiones de salud. También deben ser prescriptores de medicamentos genéricos en su propio establecimiento. Los farmacéuticos tienen activos suficientes como para no estar siempre en tensión.

«Es un privilegio tener más de 19.000 puntos de venta de medicamentos, pero es un privilegio mayor tener más de 19.000 puntos de salud»

Futuro

¿Cómo se vislumbra el futuro de la profesión tras los últimos acontecimientos en materia farmacéutica?

El futuro será bueno si nos planteamos objetivos que sean buenos para todos, pero si al final el debate es de márgenes o meramente presupuestario vamos a entrar en una continua tensión como ocurre con otros colectivos profesionales. Los profesionales no son intocables, pero también es verdad que la prestación farmacéutica se integra en una prestación sanitaria global y ésta es un logro del estado de bienestar europeo. Hay razones para pensar que el medicamento va a seguir un camino razonable de desarrollo dentro de los límites que hoy se están planteando, pero no va a estar exento de tensiones.

¿A qué retos se enfrenta el farmacéutico de oficina en los próximos años?

El gran reto no es otro que integrarse en el sistema de salud y no presentarse únicamente como un mero vendedor de medicamentos. Es un privilegio tener más de 19.000 puntos de venta de medicamentos, pero es un privilegio mayor tener más de 19.000 puntos de salud. Sin embargo, esta defensa de la oficina de farmacia debería venir también de mano de la sociedad. Es necesario que se legitimen socialmente la oficina de farmacia y el farmacéutico. Por otro lado, también debería conceptuarse la prestación del medicamento dentro de una prestación pública sanitaria, a fin de gozar de los mayores niveles de cohesión social en torno a la salud y, en consecuencia, en torno al medicamento.

Por último, ¿cuáles son las necesidades de los farmacéuticos de hoy día?

Hoy por hoy, la legitimación social. Para ello precisan de un interlocutor social que puede ser esta Fundación. Sus necesidades no son las mismas en las grandes que en las pequeñas ciudades. Por eso, hay que conjugarlas para que el concepto de farmacia salga dignificado. No se puede uno encerrar en que se da un buen servicio, porque eso podría hacerlo cualquiera. *

Nombres ilustres

Tres ex ministros (Luis Gamir, Luis González Seara y Enrique Sánchez de León), una docena de catedráticos de diversas especialidades, así como una veintena de empresarios y representantes de colectivos profesionales y asociaciones relacionados con el medicamento integran el Patronato de la Fundación IEF. Entre otras personalidades figuran: Mariano Avilés, Ricardo Calle, Benito del Castillo, Manuel Delgado, Juan Díez Nicolás, Rafael García Gutiérrez, Alberto García Romero, José Enrique Hours, Juan Iranzo, Fermín Lucas, Antonio Massa, Gustavo Matías, José Carlos Montilla, Javier Rodríguez Segovia y Emilio Sánchez Pintado.

Biografía profesional

Jorge Hinojosa Bolívar, nacido en Córdoba hace 38 años, es abogado de profesión. El pasado mes de noviembre fue nombrado director general de la Fundación Instituto de Estudios Farmacéuticos (IEF), puesto al que ha llegado desde la secretaría general de la Unión de Consumidores Españoles (UCE), cargo que desempeñó entre 1991 y 2002. Un cargo que ha compatibilizado con sus actividades como miembro de la Comisión de Seguimiento del Pacto sobre Gasto Farmacéutico entre el Ministerio de Sanidad y el Consejo de Consumidores y Usuarios.

En los últimos 2 años, Jorge Hinojosa ha desarrollado diversas campañas sobre uso racional del medicamento y para la promoción de medicamentos genéricos en colaboración con el Consejo General de COF, y ha sido ponente en distintas jornadas sobre medicamentos organizadas por ANEFP, FEFE y los colegios farmacéuticos.

Actualmente, Jorge Hinojosa es también miembro del Consejo Económico y Social.

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