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Vol. 21. Núm. 4.
Páginas 160 (Abril 2002)
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El consejo farmacéutico
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J. MIR JULIÀ
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Material de primeros auxilios

Lo más recomendable es reunir todos los instrumentos y accesorios que se van a citar a continuación en una caja. Ésta debe guardarse en un lugar que quede fuera del alcance de los niños. Todos los miembros de la familia en edad de prestar auxilio deben conocer dónde se encuentra la caja. Ésta sólo será útil si está completa. Así, cuando falta uno de los elementos, hay que reponerlo lo más rápidamente posible. Si se abre un paquete de gasas estériles y sólo se utiliza una unidad, hay que tirar el resto, pues ya no será estéril.

Los instrumentos y accesorios que se recomienda tener son los siguientes:

 

­ Termómetro.

­ Tijeras.

­ Guantes desechables.

­ Compresas estériles y un rollo de gasa.

­ Apósitos adhesivos microporosos de distintos tamaños.

­ Esparadrapo.

­ Vendas.

­ Alfileres de seguridad o imperdibles.

­ Una férula digital para fracturas de los dedos.

­ Pañuelos de papel.

 

 

Sobredosis por consumo de estimulantes del sistema nervioso central

Los síntomas por una sobredosis de este tipo de estimulantes son las siguientes:

 

­ Taquicardia.

­ Hipertonía muscular.

­ Convulsiones.

­ Parada cardiorrespiratoria.

 

La actuación ante un paciente en esas circunstancias consistirá en conseguir ayuda médica y trasladarlo al hospital. Si está inconsciente pero mantiene las constantes vitales, colocarlo en la posición lateral de seguridad y estimularlo dolorosamente. Si está inconsciente y no mantiene las constantes vitales, hay que realizar el soporte vital básico. Si es posible, hay que investigar en el entorno del enfermo para poder identificar el tipo de sustancia ingerida e indagar si ha tomado más de un tipo.

 

 

Clasificación de los accidentes cerebrovasculares

Se trata de un conjunto de situaciones de aparición súbita. Determinan una disminución de las funciones del sistema nervioso central, como consecuencia de algún problema en los vasos sanguíneos cerebrales.

La forma de aparición del cuadro va a depender de la causa que lo provoque, así como de la zona del sistema nervioso central que resulte afectada.

Embolia

Es una oclusión de un vaso sanguíneo cerebral como consecuencia de un émbolo (sólido, líquido o gaseoso). Normalmente se trata de un coágulo sanguíneo.

 

Trombosis

Es un coágulo de sangre adherido a la pared de un vaso sanguíneo que disminuye el calibre del vaso hasta su total oclusión. El mayor riesgo lo presentan personas con arteriosclerosis.

 

Hematoma

Se produce por la salida de sangre de los vasos. El mayor riesgo se presenta en caso de crisis de hipertensión o en un traumatismo craneal.

 

Hemorragia

Es producida por la salida de sangre de los vasos. Se puede dar en crisis de hipertensión, traumatismos craneales y con el consumo de drogas como cocaína y anfetaminas.

Accidentes disbáricos

 

Los accidentes producidos como consecuencia de una inmersión con aire comprimido (submarinismo) son poco frecuentes, pero pueden ser graves cuando se producen. Los dos tipos de accidentes disbáricos (por cambios bruscos de presión) más graves tienen en común la formación repentina de pequeñas burbujas de nitrógeno dentro del organismo que, según su tamaño y su velocidad de formación, pueden provocar lesiones por obstrucción (las burbujas taponan los vasos sanguíneos y otras estructuras) cuando las burbujas son pequeñas y se forman lentamente; o pueden ser destructivas (rompen tejidos, especialmente pulmonares) cuando se forman rápidamente y son relativamente grandes. En ambos casos las manifestaciones pueden ser muy diversas:

 

­ Alteraciones de consciencia.

­ Dificultad y dolor al respirar.

­ Disfunciones articulares y, en casos graves, parálisis.

­ Dolor articular.

­ Náuseas y vómitos.

­ Alteraciones cutáneas: manchas, quemazón y picor.

­ Descoordinación y vértigos.

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