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Vol. 28. Núm. 3.
Páginas 160-168 (Abril 2013)
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Vol. 28. Núm. 3.
Páginas 160-168 (Abril 2013)
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Efectos de la terapia no farmacológica en el envejecimiento normal y el deterioro cognitivo: consideraciones sobre los objetivos terapéuticos
Effects of non-pharmacological therapy on normal ageing and on cognitive decline: reflections on treatment objectives
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V. Carballo-Garcíaa, M.R. Arroyo-Arroyoa, M. Portero-Díaza, J.M. Ruiz-Sánchez de Leónb,
Autor para correspondencia
jm.ruiz.sdl@gmail.com

Autor para correspondencia.
a Hartford S.L. Proyecto de Dinamización Sociocultural de Centros de Mayores, Distrito Centro, Ayuntamiento de Madrid, Madrid, España
b Departamento de Psicología Básica II (Procesos Cognitivos), Universidad Complutense de Madrid, Madrid, España
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Tabla 1. Principales variables sociodemográficas del grupo sin deterioro cognitivo
Tabla 2. Diferencia de medias (t de Student) entre las puntuaciones pretratamiento y postratamiento en el grupo sin deterioro cognitivo y ANOVA del efecto del tratamiento controlando edad, sexo y años de escolaridad
Tabla 3. Principales variables sociodemográficas del grupo con deterioro cognitivo
Tabla 4. Diferencia de medias (t de Student) entre las puntuaciones pretratamiento y postratamiento en el grupo con deterioro cognitivo y ANOVA del efecto del tratamiento controlando edad, sexo y años de escolaridad
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Resumen
Introducción

Las terapias no farmacológicas (TNF) en el envejecimiento y las demencias representan un conjunto de intervenciones orientadas a estimular el rendimiento de los procesos cognitivos, mejorar la afectividad, potenciar la independencia en la vida cotidiana y, en última instancia, incrementar la calidad de vida de los pacientes.

Métodos

Se aplicó una batería de pruebas que valoraban 4 dominios principales (estado mental general, afectividad, calidad de vida y actividades de la vida diaria) a una muestra de 317 adultos con más de 64 años (240 con envejecimiento normal y 77 con deterioro cognitivo). Posteriormente, fueron asignados a grupos de TNF en función de sus capacidades o a otras actividades no específicas. Se valoró el beneficio tras 9 meses de TNF con la misma batería de pruebas.

Resultados

Los resultados evidencian una mejora del estado mental general en el envejecimiento sano y ausencia de progresión en el envejecimiento patológico. En los 2 grupos, la afectividad (ansiedad y depresión) y la calidad de vida autopercibida se vio beneficiada por la TNF. No obstante, no parecen mejorar otros aspectos habitualmente incluidos entre los objetivos terapéuticos, como la independencia en las actividades de la vida diaria.

Conclusiones

Este trabajo evidencia los resultados positivos que se obtienen por la aplicación de un programa de TNF en el envejecimiento. Es importante destacar que los individuos con deterioro cognitivo se benefician más del mismo, si bien su aplicación generalizada parece resultar un óptimo programa preventivo primario en estos aspectos cognitivos y emocionales.

Palabras clave:
Terapia no farmacológica
Estimulación cognitiva
Intervención neuropsicológica
Envejecimiento
Deterioro cognitivo leve
Demencia
Abstract
Introduction

Non-pharmacological therapies for normal ageing and dementia are a set of treatment programmes intended to improve the performance of cognitive processes, improve emotional well-being, promote independence in daily life activities, and ultimately increase patients’ quality of life.

Methods

We applied a battery of tests assessing four major domains (general mental state, emotional well-being, quality of life, and daily life activities) to a sample of 317 adults older than 64 (240 with normal ageing and 77 with cognitive impairment). They were then assigned either to non-pharmacological therapy groups according to their abilities or to other non-specific activities. Progress was assessed 9 months later using the same test battery.

Results

The results show a general improvement in mental state in the group with normal ageing and absence of disease progression in the group with pathological ageing. In both groups, emotional well-being (anxiety and depression) and self-identified quality of life both benefited from non-pharmacological therapy. However, other aspects commonly included among the therapeutic targets did not seem to improve, including independence in daily life activities.

Conclusions

This study provides evidence that non-pharmacological therapy in ageing patients can produce positive results. It must be stressed that benefits are greater in individuals with cognitive impairment, although generalising use of this therapy could prove to be an excellent primary programme for preventing cognitive and emotional disorders.

Keywords:
Non-pharmacological therapy
Cognitive stimulation
Neuropsychological intervention
Ageing
Mild cognitive impairment
Dementia
Texto completo
Introducción

En los últimos años, se ha empezado a considerar la utilidad de aplicar terapias no farmacológicas (TNF) en el envejecimiento y las demencias con el objeto de estimular el rendimiento de los procesos cognitivos, mejorar la afectividad, potenciar la independencia en la vida cotidiana y, en última instancia, incrementar la calidad de vida de los mayores1–4. Las TNF se definen como intervenciones no químicas, teóricamente sustentadas, focalizadas y replicables, realizadas sobre el paciente o el cuidador, y que son potencialmente capaces de obtener beneficios relevantes5. Como comenta Peña-Casanova6, los objetivos terapéuticos concretos de estas intervenciones son: a) estimular y mantener las capacidades mentales; b) evitar la desconexión del entorno y fortalecer las relaciones sociales; c) dar seguridad e incrementar la autonomía personal del paciente; d) estimular la propia identidad y autoestima; e) minimizar el estrés y evitar reacciones psicológicas anómalas; f) mejorar el rendimiento cognitivo; g) mejorar el rendimiento funcional; h) incrementar la autonomía personal en las actividades de la vida diaria; i) mejorar el estado y sentimiento de salud, y j) mejorar la calidad de vida del paciente y de los familiares y/o cuidadores.

Entre las TNF orientadas al paciente más utilizadas se pueden destacar, entre otras, la estimulación cognitiva, la intervención conductual, el ejercicio físico, la musicoterapia, el entrenamiento en actividades de la vida diaria, la reminiscencia o la relajación muscular7,8. De todas ellas, la estimulación cognitiva es la que ha recibido mayor apoyo empírico9, llegando incluso a proponerse como la primera intervención que se debe realizar en las demencias10. Entre los programas estandarizados de estimulación cognitiva más utilizados en nuestro medio se encuentran: el Programa de Psicoestimulación Integral11, el Programa Activemos la Mente12, el Baúl de los Recuerdos de AFAL13 o el Programa de Memoria del Ayuntamiento de Madrid14.

El uso de fichas independientes con ejercicios variados de estimulación cognitiva en los pacientes mayores se ha incrementado en los últimos años, acumulándose un cierto grado de evidencia sobre su utilidad en el envejecimiento sano15–19, en el deterioro cognitivo leve20 y en las demencia de tipo Alzheimer en terapia combinada con procolinérgicos21,22. Sin embargo, existe un acuerdo general en plantear que este tipo de TNF, que permite e incluso facilita la aplicación grupal, no sustituye a un programa individualizado de intervención neuropsicológica, en parte, porque el número de individuos que acuden a los servicios públicos para solicitar estas terapias impide dicho tipo de intervención específica. Por ello, se hacen necesarios más trabajos que analicen qué mejoras reales se obtienen por estos medios grupales e inespecíficos y, en última instancia, saber si los resultados afectan a todos los dominios propuestos como objetivos a priori. Así, este estudio pretende valorar los efectos de la aplicación de una TNF grupal, analizando los resultados en 4 dominios principales: el estado mental general, la afectividad, otras variables psicológicas. como el bienestar subjetivo o la satisfacción ante la vida y, por último, el funcionamiento independiente en la vida cotidiana.

MétodoParticipantes

La muestra estuvo formada por un total de 317 adultos con más de 64 años, que acudieron a un servicio público y gratuito (centros municipales de Mayores del Distrito de Centro del Ayuntamiento de Madrid) solicitando participación en actividades socioculturales. Se trataba de un conjunto de 273 mujeres (86,1%) y 44 varones (13,9%) con una edad media de de 77 años y 5 meses (desviación típica de 6 años y 3 meses). Todos ellos presentaban visión y audición normal o, en su caso, corregida con prótesis. Ningún participante presentaba problemas motores que dificultaran la ejecución de los ejercicios que, en buena medida, dependían además de haber recibido una instrucción académica suficiente para leer y escribir en lengua castellana. A todos ellos se les informó del doble objetivo de la evaluación —clínico y de investigación— y consintieron el uso anónimo de sus datos.

Instrumentos

Se utilizó una entrevista estructurada para recoger las variables sociodemográficas de los participantes, que incluía: género, edad, el nivel educativo (analfabeto funcional, estudios primarios, bachiller o universitarios), la profesión (labores domésticas, profesional no cualificado, técnico medio o técnico superior), el estado civil (soltero, casado, divorciado/separado o viudo), el número de hijos o su régimen de convivencia (solo, con el cónyuge, con los hijos, con otros familiares o con cuidador asalariado).

Para la valoración del estado cognitivo general de los participantes se administraron el Miniexamen Cognoscitivo (MEC)23 y la versión adaptada y validada en castellano del Short Portable Mental Status Questionnaire (SPMSQ)24 de Pfeiffer25. Los aspectos emocionales, más concretamente, los niveles de ansiedad y depresión, se valoraron mediante la escala de ansiedad estado-rasgo (STAI)26 adaptada27 y la escala de depresión geriátrica (GDS)28. Por último, para el análisis de otras variables psicológicas y de ajuste social se aplicaron:

  • La escala de autoestima de Rosemberg (RSES)29,30, que consiste en 10 preguntas sobre los niveles de autoestima autopercibida con respuestas de tipo Likert con 4 opciones (1: «muy de acuerdo», 2: «de acuerdo», 3: «en desacuerdo» y 4: «muy en desacuerdo»). El rango de puntuaciones oscila entre 10 a 40, siendo aquellas mayores de 25 puntos sugerentes de autoestima baja.

  • La escala de satisfacción con la vida (ESV)31,32; se trata de 5 preguntas con respuestas de tipo Likert con 5 opciones (1: «muy en desacuerdo», 2: «en desacuerdo», 3: «ni de acuerdo ni en desacuerdo», 4: «de acuerdo» y 5: «muy de acuerdo»), siendo las puntuaciones más altas indicativas de un mayor grado satisfacción con la vida.

  • El test de optimismo (TO)33,34, de 10 preguntas, con respuestas tipo Likert con 5 opciones (similares a las de la escala anterior), cuya puntuación final oscila entre 0 a 40, siendo 40 puntos indicativos de un nivel de optimismo muy alto.

  • La escala de recursos sociales (OARS)35,36; consiste en 10 preguntas con respuestas tanto de tipo dicotómico como tipo Likert. Según las respuestas anotadas, la puntuación se clasifica de la siguiente manera: 1: «excelentes recursos sociales», 2: «buenos recursos sociales», 3: «recursos sociales ligeramente deteriorados», 4: «recursos sociales moderadamente deteriorados», 5: «recursos sociales severamente deteriorados» y 6: «recursos sociales totalmente deteriorados».

Para conocer el grado de autonomía o dependencia funcional, se aplicaron el índice de Katz37 en su versión española38,39 sobre actividades básicas de la vida diaria (ABVD) y el índice de Lawton y Brody40 sobre actividades instrumentales de la vida diaria (AIVD).

Procedimiento

Aquellos participantes que, en ausencia de diagnóstico neurológico o psiquiátrico previo, no mostraron síntomas de deterioro cognitivo en la exploración realizada pretratamiento fueron invitados a participar en grupos de estimulación cognitiva con carácter preventivo para individuos con envejecimiento normal. En caso de existir un diagnóstico previo de deterioro cognitivo leve o demencia de tipo Alzheimer inicial, los participantes fueron asignados a grupos de estimulación cognitiva ajustados a las capacidades mostradas en la evaluación.

Así, se trata de un estudio observacional en el que se reclutó por muestreo consecutivo, respectivamente, a todos los individuos que realizaron grupos de estimulación cognitiva con un juicio clínico de envejecimiento normal (EN-TNF), tuvieran o no quejas subjetivas de memoria, y a todos los individuos que realizaron estimulación con un juicio clínico de deterioro cognitivo, ya fuera deterioro cognitivo leve o demencia de tipo Alzheimer inicial (DC-TNF). Por otro lado, se reclutó, también por muestreo consecutivo, a los individuos que, independientemente de su diagnóstico, no participaron en los grupos de estimulación cognitiva por incompatibilidad horaria con sus quehaceres domésticos o familiares (p. ej., cuidado de los nietos), configurando así un grupo control de envejecimiento normal (EN-noTNF) y otro grupo control de deterioro cognitivo (DC-noTNF). Estos 2 últimos grupos de individuos realizaron diferentes actividades de tipo lúdico –no específicas– en otras franjas horarias y, tras acabar el estudio, fueron incluidos en los grupos de estimulación cognitiva correspondientes a su nivel si lo desearon y mostraron disponibilidad para ello.

Los grupos de TNF estaban formados por un máximo de 20 sujetos, durante 9 meses (de octubre a junio), con una periodicidad de 2 días por semana y una duración diaria de una hora. La metodología desarrollada durante las sesiones de trabajo grupal incluía:

  • Ejercicios de estimulación cognitiva creados o modificados ad hoc por los trabajadores del centro en función de las capacidades de cada grupo que abarcaban un amplio abanico de procesos cognitivos: atención, percepción, memoria, lenguaje, inhibición, planificación, razonamiento, cálculo, dibujo, etc41–54.

  • Dinámicas de grupo, con el objeto de potenciar las habilidades sociales, la expresión de sentimientos positivos y mejorar la interrelación de los participantes. Se realizaron diferentes sesiones centradas en el conocimiento de temas generales como la depresión, la ansiedad, la memoria, la autoestima o el concepto de felicidad.

  • Sesiones de arteterapia en colaboración con el museo Thyssen y días de convivencia fuera del trabajo en grupo para potenciar la participación social y evitar el aislamiento.

Una vez finalizados los 9 meses de TNF (experimental) o actividades lúdicas (control), se aplicó la misma batería de pruebas que se utilizó antes de comenzar el programa de TNF. Todas las mediciones intrasujeto se realizaron en un plazo mínimo de 10 meses y máximo de 12.

Análisis estadístico

Se establecieron 5 grupos de edad a posteriori con el objeto de analizar la influencia de esta en el rendimiento de la prueba. Así, dichos grupos estaban formados por individuos entre 65 y 69 años (n=74; 23,3%), de 70 a 74 años (n=81; 25,6%), de 75 a 79 años (n=90; 28,4%), de 80 a 84 años (n=48; 15,1%) y mayores de 84 años (n=24; 7,6%).

Se comprobó la homogeneidad de los 2 grupos (EN y DC) en todas variables sociodemográficas recogidas mediante la U de Mann-Whitney y en las medidas pretratamiento mediante ANOVA. Posteriormente, se efectuó una prueba t de diferencia de medias en cada grupo que permitiera conocer el efecto del paso del tiempo, ya fuera con TNF o sin TNF. Por último, se realizó un análisis lineal general de las diferencias entre las medias de las puntuaciones obtenidas preintervención y post intervención que permitiera el control de posibles variables intervinientes, tales como el sexo, el grupo de edad o el nivel de estudios. Para la estimación del tamaño del efecto de las diferencias en las comparaciones multivariantes del modelo corregido se utilizó el estadístico eta al cuadrado parcial (η2p).

Resultados

La muestra definitiva que conformó el grupo de envejecimiento normal (EN) estuvo compuesta por 240 participantes de los que 217 recibieron TNF (EN-TNF) y 23 acudieron a otras actividades lúdicas o socioculturales (EN-noTNF). El análisis no mostró diferencias significativas en la composición de ambos grupos con respecto a las variables sociodemográficas (p>0,05 en todos los casos), ni con respecto a las medidas pretratamiento (p>0,05 en todos los casos). En la tabla 1 se muestran las características sociodemográficas más relevantes en función de los grupos asignados.

Tabla 1.

Principales variables sociodemográficas del grupo sin deterioro cognitivo

Grupo sin deterioro cognitivo  Totaln=240  EN-TNFn=217  EN-noTNFn=23 
Sexo
Mujeres  214 (89,2%)  195 (89,9%)  19 (82,6%) 
Hombres  26 (10,8%)  22 (10,1%)  4 (17,4%) 
Edad
De 65 a 69 años  64 (26,7%)  58 (26,7%)  6 (26,1%) 
De 70 a 74 años  66 (27,5%)  63 (29%)  3 (13%) 
De 75 a 79 años  66 (27,5%)  58 (26,7%)  8 (34,8%) 
De 80 a 84 años  30 (12,5%)  27 (12,4%)  3 (13%) 
Más de 84 años  14 (5,8%)  11 (5,1%)  3 (13%) 
Nivel de estudios
Analfabeto funcional  68 (28,3%)  62 (28,6%)  6 (26,1%) 
Estudios primarios  100 (41,7%)  91 (41,9%)  9 (39,1%) 
Bachiller  30 (12,5%)  28 (12,9%)  2 (8,7%) 
Superiores  42 (17,5%)  36 (16,6%)  6 (26,1%) 

En la tabla 2 se puede observar cómo el grupo EN-TNF mejora significativamente en todas las medidas efectuadas, a excepción de las 2s referidas a las actividades de la vida diaria, tanto las básicas (ABVD) como las instrumentales (AIVD). Por otro lado, el grupo EN-noTNF empeora en todas las medidas excepto en las que se refieren a la autoestima, el optimismo y las ABVD; en este sentido, es interesante destacar que este grupo sin intervención disminuye su rendimiento en las AIVD post intervención, aunque dicha diferencia no parece ser clínicamente significativa.

Tabla 2.

Diferencia de medias (t de Student) entre las puntuaciones pretratamiento y postratamiento en el grupo sin deterioro cognitivo y ANOVA del efecto del tratamiento controlando edad, sexo y años de escolaridad

Grupo sin deterioro cognitivo  Con TNF (N=217)Sin TNF (N=23)Efecto de la TNF 
  Media (DT)  Prueba t  Media (DT)  Prueba t   
MEC Cognición
Pre  31,49 (2,533)  −4,141**  30,52 (2,556)  4,652**  F=9,091, p<0,001 
Post  32,10 (2,298)  Mejora  28,43 (3,396)  Empeora  η2p=0,134 
SPMSQ Cognición
Pre  1,16 (1,226)  7,862**  1,26 (1,453)  −3,220*  F=8,366, p<0,001 
Post  0,56 (,907)  Mejora  2,09 (1,379)  Empeora  η2p=0,125 
STAI Ansiedad
Pre  15,47 (4,618)  10,032**  15,91 (6,045)  −5,232**  F=9,952, p<0,001 
Post  12,83 (3,801)  Mejora  17,78 (5,640)  Empeora  η2p=0,145 
GDS Depresión
Pre  12,37 (5,888)  6,922**  12,87 (6,635)  −4,531**  F=7,085, p<0,001 
Post  10,12 (5,656)  Mejora  15,17 (6,264)  Empeora  η2p=0,108 
RSES Autoestima
Pre  23,51 (4,310)  17,861**  22,74 (4,256)  −1,586F=11,541, p<0,001 
Post  18,07 (3,255)  Mejora  23,57 (4,650)  η2p=0,164 
ESV Satisfacción
Pre  25,19 (5,525)  −8,805**  23,78 (3,988)  4,729**  F=5,138, p<0,001 
Post  28,41 (4,910)  Mejora  22,04 (3,960)  Empeora  η2p=0,080 
TO Optimismo
Pre  22,31 (6,911)  −12,730**  22,13 (6,269)  1,348F=7,267, p<0,001 
Post  27,29 (5,450)  Mejora  21,65 (6,191)  η2p=0,110 
OARS Recursos
Pre  3,02 (1,097)  7,570**  2,57 (,843)  −7,955**  F=19,269, p<0,001 
Post  2,47 (1,127)  Mejora  3,96 (1,022)  Empeora  η2p=0,247 
ABVD índice de Katz
Pre  6,97 (,202)  −00,3776,96 (,198)  −0,335F=2,359 
Post  6,99 (,287)  6,94 (,209)   
AIVD E. Lawton
Pre  7,80 (,691)  0,7067,70 (,703)  3,118*  F=7,716, p<0,001 
Post  7,77 (,783)  6,96 (1,224)  Empeora  η2p=0,116 
*

p<0,005.

**

p<0,001.

Con respecto al efecto de la TNF en el grupo de EN, se observa un efecto significativo de la misma en todas las medidas una vez controladas las variables sociodemográficas, a excepción de las ABVD (tabla 2). Así, no se observa ningún efecto en los beneficios de la terapia con respecto del género (F=0,420, p=0,936), el nivel educativo (F=0,769, p=0,658), la profesión (F=1,532, p=0,129), el estado civil (F=1,022, p=0,426), el número de hijos (F=0,296, p=0,982) o el régimen de convivencia (F=0,846, p=0,585). No obstante, sí se observa un efecto significativo de la edad (F=2,583, p<0,05), en el sentido en que los más jóvenes parecen beneficiarse más de la TNF.

Por otro lado, con respecto a la muestra que formaba el grupo de deterioro cognitivo (DC), se trataba de 77 participantes de los que 63 recibieron TNF (DC-TNF) y 14 acudieron a otras actividades lúdicas o socioculturales (DC-noTNF). El análisis no mostró diferencias significativas en la composición de ambos grupos con respecto a las variables sociodemográficas (p>0,05 en todos los casos), ni con respecto a las medidas pretratamiento (p>0,05 en todos los casos; excepto en STAI, F=9,214, p<0,05; leve mayor ansiedad en el grupo que haría TNF). En la tabla 3 se resumen las variables sociodemográficas más relevantes en función de los grupos asignados.

Tabla 3.

Principales variables sociodemográficas del grupo con deterioro cognitivo

Grupo con deterioro cognitivo  Totaln=77  DC-TNFn=63  DC-noTNFn=14 
Sexo
Mujeres  59 (76,6%)  48 (76,2%)  11 (78,6%) 
Hombres  18 (23,4%)  15 (23,8%)  3 (21,4%) 
Edad
De 65 a 69 años  10 (13%)  9 (14,3%)  1 (7,1%) 
De 70 a 74 años  18 (23,4%)  13 (20,6%)  2 (14,3%) 
De 75 a 79 años  24 (31,2%)  21 (33,3%)  3 (21,4%) 
De 80 a 84 años  15 (19,5%)  14 (22,2%)  4 (28,6%) 
Más de 84 años  10 (13%)  6 (9,5%)  4 (28,6%) 
Nivel de estudios
Analfabeto funcional  55 (71,4%)  46 (73%)  9 (64,3%) 
Estudios primarios  16 (20,8%)  13 (20,6%)  3 (21,4%) 
Bachiller  2 (2,6%)  2 (3,2%)  0 (0%) 
Superiores  4 (5,2%)  2 (3,2%)  2 (14,3%) 

En la tabla 4 se puede observar cómo el grupo DC-TNF mantiene relativamente estables las puntuaciones de su estado mental general, así como las de las ABVD y las AIVD. En general, se observa una mejora significativa en todas las medidas efectuadas sobre otras variables psicológicas. Por otro lado, el grupo DC-noTNF empeora en todas las medidas, excepto en las que se refieren a la autoestima, el optimismo y las ABVD; del mismo modo que ocurre en el grupo sin deterioro cognitivo (EN).

Tabla 4.

Diferencia de medias (t de Student) entre las puntuaciones pretratamiento y postratamiento en el grupo con deterioro cognitivo y ANOVA del efecto del tratamiento controlando edad, sexo y años de escolaridad

Grupo con deterioro cognitivo  Con TNF (N=63)Sin TNF (N=14)Efecto de la TNF 
  Media (DT)  Prueba t  Media (DT)  Prueba t   
MEC Cognición
Pre  27,19 (3,868)  1,90127,21 (4,710)  11,924*  F=7,451, p<0,001 
Post  26,43 (4,578)  22,21 (5,041)  Empeora  η2p=0,293 
SPMSQ Cognición
Pre  2,52 (1,804)  1,6022,93 (2,336)  −8,153***  F=6,754, p<0,001 
Post  2,14 (1,983)  5,29 (2,091)  Empeora  η2p=0,273 
STAI Ansiedad
Pre  15,92 (5,043)  5,462***  11,50 (4,346)  −7,870***  F=9,303, p<0,001 
Post  13,22 (3,665)  Mejora  14,71 (3,730)  Empeora  η2p=0,341 
GDS Depresión
Pre  12,97 (5,553)  3,007**  12,43 (5,906)  –3,899**  F=3,005, p<0,05 
Post  11,06 (5,089)  Mejora  15,29 (6,366)  Empeora  η2p=0,143 
RSES Autoestima
Pre  22,52 (3,671)  8,390**  22,14 (4,521)  −2,110F=7,700, p<0,001 
Post  18,51 (3,089)  Mejora  23,21 (4,594)  η2p=0,300 
ESV Satisfacción
Pre  25,75 (3,959)  –6,488***  24,79 (4,023)  2,590*  F=6,654, p<0,001 
Post  29,25 (3,894)  Mejora  22,86 (5,289)  Empeora  η2p=0,270 
TO Optimismo
Pre  23,62 (5,320)  –5,317***  22,21 (5,740)  1,400F=4,561, p<0,005 
Post  27,14 (4,497)  Mejora  20,64 (4,343)  η2p=0,202 
OARS Recursos
Pre  3,16 (,987)  5,281***  2,64 (,633)  −5,078***  F=12,591, p<0,001 
Post  2,41 (1,010)  Mejora  4,21 (,893)  Empeora  η2p=0,412 
ABVD índice de Katz
Pre  6,84 (,482)  1,3506,57 (,852)  1,000F=0,913 
Post  6,79 (,513)  6,50 (,855)   
AIVD E. Lawton
Pre  6,57 (1,864)  −0,3886,21 (2,359)  5,597***  F=11,843, p<0,001 
Post  6,62 (2,082)  4,14 (1,875)  Empeora  η2p=0,397 
*

p<0,05.

**

p<0,005.

***

p<0,001.

Con respecto al efecto de la TNF en el grupo de DC, también se observan los mismos efectos significativos que en el grupo EN, igualmente controlando las variables sociodemográficas (tabla 4). Así, no se observa ningún efecto en los beneficios de la terapia con respecto al género (F=0,884, p=0,553), el nivel educativo (F=1,546, p=0,146), la profesión (F=1,055, p=0,411), el estado civil (F=0,791, p=0,637), el número de hijos (F=1,256, p=0,276) o el régimen de convivencia (F=1,396, p=0,205). En este caso, no se observa efecto significativo de la edad (F=1,820, p=0,077), tal y como ocurría en el grupo sin deterioro (EN), aunque sí se puede apreciar la misma tendencia a que los más jóvenes se beneficien más de la TNF.

Discusión

El presente estudio pretende valorar los efectos de la aplicación de una TNF grupal en 4 dominios: el estado mental general, la afectividad (ansiedad y depresión), otras variables psicológicas (autoestima, satisfacción, optimismo y calidad de los recursos sociales) y el funcionamiento en la vida cotidiana (para las actividades básicas e instrumentales). Para ello se han analizado los resultados pretratamiento y postratamiento de un grupo de individuos sin deterioro cognitivo (EN) y con deterioro cognitivo (DC) que fueron asignados, bien a grupo experimental (TNF), bien a grupos de actividades lúdicas o socioculturales (noTNF).

Los resultados evidencian cómo la aplicación de este tipo de TNF en el envejecimiento sano produce unas mejoras significativas en el estado mental general, la afectividad y un conjunto de variables psicológicas relacionadas con la calidad de vida autopercibida. No obstante, no se evidencian mejoras en el rendimiento de las actividades de la vida cotidiana, en buena medida, porque este tipo de terapia grupal no parece intervenir adecuadamente en el desempeño ocupacional de los individuos en situaciones reales; también porque al tratarse de sujetos sin deterioro cognitivo alguno, se produce un efecto techo en las puntuaciones. Por otro lado, el hecho de acudir a otras actividades no específicas no parece mantener las puntuaciones del estado mental general ni de la afectividad, que se muestran significativamente menores post intervención. Por otro lado, sí se mantienen estables las puntuaciones en otras variables como la autoestima o el optimismo, en la medida en que este tipo de actividades gratificantes parecen estimularlas. Llama la atención el hecho de que el grupo EN-TNF empeore su rendimiento en las AIVD, dado que no se evidenció en este grupo ningún caso de progresión a cuadros clínicos, como el deterioro cognitivo leve. En cualquier caso, es importante destacar que en este grupo sin deterioro cognitivo, los tamaños del efecto de la intervención (η2p) son relativamente débiles y las diferencias estadísticas halladas entre las puntuaciones no son clínicamente significativas.

Con respecto al grupo con deterioro cognitivo, la aplicación de una TNF grupal parece mejorar significativamente la afectividad y las variables psicológicas relacionadas con la calidad de vida autopercibida y, quizá más interesante, parece mantener las puntuaciones relativas al estado mental general y las actividades de la vida cotidiana. Este es quizás el hallazgo más relevante de este estudio, en la medida en que se evidencian los objetivos propuestos a priori por este tipo de intervenciones: retrasar la progresión del deterioro cognitivo. Así, el hecho de no recibir esta intervención podría permitir la progresión natural del cuadro degenerativo, hecho que se evidenciaría en la disminución de las puntaciones del estado mental general y las AIVD en el grupo DC-noTNF. En ambos grupos, las ABVD no parecen presentar diferencias significativas, con intervención o sin ella, dado que no se incluyó en el estudio ningún individuo con afectación previa en las mismas; hecho que hubiera indicado un mayor grado de deterioro. En este caso, los tamaños del efecto de la intervención (η2p) son entre moderados y altos, lo que sugiere que estos individuos con deterioro cognitivo se benefician más de la TNF que los sujetos sin deterioro.

En resumen, este trabajo evidencia cómo la aplicación de un programa de TNF en el envejecimiento, independientemente de que presente o no deterioro cognitivo, obtiene resultados positivos. En este sentido, cabe destacar que los individuos de menor edad o con presencia de deterioro cognitivo parecen beneficiarse más de la misma, si bien en todos ellos parece resultar un óptimo programa preventivo primario en estos aspectos cognitivos y emocionales. Así, parecen cumplirse los objetivos terapéuticos propuestos por estas intervenciones6, a excepción del incremento de la autonomía personal en las actividades de la vida diaria. Para trabajar en esta línea, quizá habría que optar por una intervención ocupacional específica e individualizada.

Este estudio presenta además algunas carencias metodológicas en lo que se refiere a la selección y el tamaño de la muestra, en especial cuando esta queda dividida en subgrupos, y la asignación de los participantes a los grupos experimentales. Es posible que los individuos que han participado de los grupos de TNF fueran a priori mejores candidatos a beneficiarse de ellos que los que no participaron, en función de sus motivaciones para la asistencia a los mismos. En cualquier caso, este trabajo aporta información de interés clínico y sociosanitario que contribuye a dar a conocer los efectos beneficiosos de la TNF; además, la posibilidad de aplicarla en grupos resulta, en muchos casos, la única opción viable dado el elevado número de sujetos a los que se debe atender. Se recomienda, entonces, la creación de espacios y la dedicación de recursos materiales y humanos a la instauración de este tipo de terapias en el envejecimiento sano y patológico.

Conflicto de intereses

Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.

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