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Inicio Medicina de Familia. SEMERGEN Prescripción de actividad física en pacientes con fibromialgia
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Vol. 37. Núm. 7.
Páginas 360-366 (Agosto - Septiembre 2011)
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Vol. 37. Núm. 7.
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Formación continuada - Actualización en Medicina de Familia
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Prescripción de actividad física en pacientes con fibromialgia
Prescribing physical activity in patients with fibromyalgia
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C. Casalsa,
Autor para correspondencia
casalsvazquez@hotmail.com

Autor para correspondencia.
, M.A. Vázquez Sánchezb, J.L. Casals Sánchezc
a Facultad de Ciencias del Deporte, Universidad de Granada, Granada, España
b Centro de Salud San Andrés-Torcal, Málaga, España
c Reumatología, Hospital Clínico de Málaga, Málaga, España
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Resumen

La realización de actividad física, de forma habitual, es esencial para mantener la salud física y psíquica, y constituye un pilar fundamental en el tratamiento de diversas enfermedades. En los pacientes con fibromialgia debe incluirse de forma sistemática la actividad física en el plan terapéutico, optimizando esta prescripción para obtener el máximo beneficio.

Palabras clave:
Fibromialgia
Terapia por ejercicio
Resultado del tratamiento
Abstract

The implementation of physical activity on a regular basis is essential to maintain physical and mental health, and is a mainstay in the treatment of several diseases. In patients with fibromyalgia physical activity should be routinely included in the treatment plan, and we must optimise the prescription to obtain the maximum benefit.

Keywords:
Fibromyalgia
Exercise therapy
Treatment outcome
Texto completo
Introducción

La fibromialgia es una enfermedad crónica caracterizada por dolor generalizado y múltiples puntos dolorosos a la palpación. Presenta, además, un amplio conjunto de síntomas asociados, incluyendo sueño no reparador, intestino irritable, cefalea crónica, trastorno del humor (ansiedad y depresión), cansancio y brotes inducidos por el ejercicio, que resultan en un grave impacto sobre la salud y la calidad de vida de las personas afectadas1.

Es más frecuente en mujeres que en varones, en una proporción aproximada de 7 o 9 a uno. La enfermedad existe en casi todos los países, la mayor parte de los grupos étnicos y en cualquier tipo de clima. Su prevalencia en la población estadounidense es del 3,4% en mujeres y del 0,5% en varones. Esta prevalencia aumenta con la edad y alcanza el 7,4% en mujeres de 70 a 79 años. Aunque no es lo común se han observado algunos casos en niños1. Se considera que la prevalencia en España de fibromialgia es del 2,4%, del 0,42% en varones y del 4,2% en mujeres2.

Entre las intervenciones no farmacológicas empleadas en su tratamiento merece la pena destacar el ejercicio físico, desde que en 1999 un metaanálisis estableció que la actividad física era más eficaz que los fármacos en el tratamiento de los síntomas de la fibromialgia3, existiendo diversos ensayos clínicos y metaanálisis posteriores que confirman esta eficacia y se comentan a lo largo del artículo. La actividad física ha demostrado ser una herramienta útil para mejorar la calidad de vida y la condición física de estos pacientes4.

Esta actividad física ha demostrado ser eficaz tanto cuando se imparte con asesoramiento de equipos multidisciplinarios hospitalarios, como cuando se imparte en la comunidad con supervisión de entrenadores físicos no especializados en el manejo de pacientes con fibromialgia5. El médico que atiende a estos pacientes debería incluir, de forma sistemática, recomendaciones sobre actividad física.

Estas personas sufren una disfunción de sus capacidades físicas en comparación con la población sedentaria del mismo sexo, edad y peso; a la hora de diseñar un programa de actividad física no deberíamos atender a su edad ya que se asimilarían a grupos poblacionales de bastante más edad6–8. Debe tenerse en cuenta que los pacientes más gravemente afectados, clasificados mediante el Cuestionario de Impacto de la Fibromialgia (FIQ, http://www.elsevier.es/watermark/ctl_servlet?_f=10πdent_articulo=13068512πdent_usuario=0&pcontactid=πdent_revista=29&ty=8∾cion=L∨igen=elsevier&web=www.elsevier.es&lan=es&fichero=29v31n09a13068512pdf001.pdf; anexo 1), tienen una menor capacidad física, determinada por el consumo máximo de oxígeno9.

Además de las diferencias de los pacientes y de los grupos que puedan establecerse en relación con el grado de afectación, también debe diferenciarse entre los diferentes tipos de actividad física en el momento de su prescripción a pacientes con fibromialgia.

Efectos de la actividad física sobre enfermos de fibromialgiaEntrenamiento de fuerza

El entrenamiento de fuerza a alta intensidad (escasas repeticiones con cargas elevadas) no está recomendado en este grupo de población ya que los resultados son discordantes. Por ejemplo, Valkeinen et al8 aplican un entrenamiento que consistía en realizar 5 sets de 10 repeticiones máximas de fondos de piernas, el grupo eran mujeres con fibromialgia de una media de 60 años, se utilizó para el ejercicio una máquina de musculación multiestación David, el entrenamiento resultó ser demasiado duro y en lugar de mejorar el bienestar de estos sujetos se produjo un empeoramiento.

Entrenamientos centrados en mejorar la fuerza con cargas elevadas, realizando tablas con 9 ejercicios en máquina de musculación multiestación Nautilius y 2 contra el peso del propio cuerpo, en sets de 8-10 repeticiones, durante sesiones de 30min pueden mejorar la fuerza, pero no disminuyen los puntos de dolor ni aumentan el bienestar; en consecuencia muchos de los sujetos son incapaces de terminar los programas de actividad física y abandonan10.

En el metaanálisis de Busch et al4 se concluye que intervenciones basadas en entrenamiento de fuerza, frente a grupo control sin tratamiento producen una mejoría significativa (mayor del 30% del dolor, y en los parámetros bienestar general y depresión).

La fuerza que se debe trabajar en un programa de actividad física orientado a la salud es la fuerza resistencia (cargas bajas o moderadas, con número elevado de repeticiones), con un programa de este tipo durante 12 semanas podemos conseguir mejoras significativas, tal y como muestra el estudio de Da Costa et al11, en la reducción de más de 10 puntos de dolor, mejora de la capacidad funcional y una reducción del dolor de la parte superior de forma significativa incluso 9 meses después. En este estudio se evaluó un programa de ejercicios para mantener la intensidad del ejercicio en un 60-80% de la frecuencia cardíaca máxima, en un programa supervisado por un técnico superior deportivo. Valkeinen et al12 encuentran una mejoría en los puntos dolorosos, en la capacidad física medida por el Health Assessment Questionnaire (HAQ, anexo 2; http://www.ser.es/catalina/wp-content/uploads/2010/08/HAQ.pdf; www.ser.es/ArchivosDESCARGABLES/IndicesCuestionarios/correccion_HAQ.pdf) y un aumento en la fuerza máxima tras un programa de 21 semanas que incluía 3 sets de 15-20 repeticiones de fondos de piernas con una carga del 40-60% de la fuerza máxima.

Entrenamiento de resistencia aeróbica

Con un programa de ejercicio aeróbico de intensidad moderada durante 3 semanas junto a sesiones de terapia cognitiva-conductual, se han encontrado diferencias significativas en la disminución del dolor, el área de dolor y el número de puntos dolorosos hasta 12 meses después; igualmente los niveles de depresión disminuyen significativamente; además se produce un aumento de capacidad de incrementar los niveles de lactato lo cual indica una mejor capacitación para soportar ejercicios físicos13.

A su vez, se ha demostrado como programas de ejercicios aeróbicos (caminar en un gimnasio, con un pulsómetro para mantener la frecuencia cardíaca en torno al 60-75% de la frecuencia cardíaca máxima) mejoran la condición física en los resultados del test de caminar, mejoran la sintomatología de los pacientes en el área de los trastornos de humor, el número de puntos dolorosos y la calidad de vida14.

Estos efectos se han demostrado también en niños enfermos de fibromialgia (de 8-18 años), con un programa supervisado por monitores entrenados, en diferentes actividades (baile, cardiobox) para mantener la frecuencia cardíaca por encima del 70% de la frecuencia cardíaca máxima) observándose mejoras significativas en la función física, la capacidad funcional, la calidad de vida, la reducción de la fatiga y de los puntos de dolor entre otros síntomas de la fibromialgia15.

En conjunto, de acuerdo con el metaanálisis de Busch et al4, los programas con ejercicios aeróbicos producen una mejoría clínicamente significativa en aspectos como el número de puntos dolorosos, la depresión, el FIQ, la resistencia dinámica y la autoeficacia en la función.

Ejercicios de fuerza combinados con ejercicios aeróbicos

Bircan et al16, realizan un estudio en el que comparan un entrenamiento de ejercicios fuerza frente a otro de ejercicios aeróbicos en un programa de 8 semanas de duración (sesiones de 30min con tandas de 4-5 series de hasta 12 repeticiones, con 5min de calentamiento previo y 5min de enfriamiento frente a sesiones de 30min al 60-70% de la frecuencia cardíaca máxima). El ejercicio aeróbico demostró ser mejor en los datos obtenidos en la escala de dolor del cuestionario de calidad de vida medida mediante el cuestionario Short Form Health Survey (SF-36; www.chime.ucla.edu/measurement/SF-36%Spain.pdf), pero el de fuerza aportó mejores resultados en las 7 subescalas del SF-36 y en los componentes mental y físico. Asimismo, sin diferencias significativas entre los grupos, ambos mejoraron condición física, depresión, calidad de vida, número de puntos de dolor, intensidad del dolor, fatiga y ansiedad.

Además, programas de ejercicios aeróbicos y fortalecimiento a 3 sesiones por semana durante 12 pueden mejorar significativamente la calidad de vida medida mediante el cuestionario de calidad de vida HRQOL (http://www.cdc.gov/hrqol/spanish.htm) en un 93% y reducir el dolor en un 29%, además de aumentar la fuerza y resistencia17.

Rooks et al18 estudian las diferencias entre 4 grupos con programas diferentes durante 16 semanas: un grupo realiza ejercicio aeróbico (caminar durante 45min) y flexibilidad; el segundo ejercicio aeróbico, flexibilidad y fuerza (consistente en ejercicios en una máquina de musculación multiestación) el tercero asiste a charlas sobre autoayuda enfocado a la fibromialgia; el último grupo asiste a las charlas y realiza un programa de ejercicio aeróbico, flexibilidad y fuerza. Este último grupo más completo obtuvo mejores resultados significativos en el grado de afectación de la enfermedad; medido mediante el FIQ y reducción de puntos de dolor, junto al de ejercicio aeróbico mejoró la función física del SF-36. Asimismo, los grupos mejoraron la función social, salud mental, fatiga, depresión y autoeficacia; encontrándose estos beneficios hasta 6 meses después.

Entrenamiento mediante actividades acuáticas

Quizás el factor más importante que se consigue trabajando en el medio acuático es la gran adherencia que provoca en los sujetos19, es un tipo de actividad que bien orientada suele gustar mucho, y provoca, además de una participación activa, mayor facilidad para conseguir el bienestar y desconectar de la vida diaria.

Con un programa de 20 semanas de ejercicios en piscina terapéutica se obtienen mejoras significativas en la capacidad cardiovascular, el tiempo al caminar y la fatiga en un día. Si se compara con ejercicios en suelo, éstos mejoran más la fuerza; pero el grupo que trabaja en piscina mejora otros aspectos que pueden ser de mayor importancia para su bienestar: número de días que se encuentran bien, autopercepción de la capacidad física, dolor, ansiedad y depresión20. En la misma línea, Assis et al21 comparan 2 grupos que se exponen durante 15 semanas a un entrenamiento de carrera bajo el agua (auxiliado con un dispositivo de flotación para mantener la cabeza bajo el agua) o a ejercicios de base en suelo (ambos grupos supervisados por fisioterapeutas, y con pulsómetro para monitorizar la frecuencia cardíaca). El grupo que realizó carrera bajo el agua obtuvo mejores resultados en FIQ y total y FIQ en cuanto a depresión, y fue el único en mejorar el rol emocional en el SF-36.

En tan sólo 5 o 6 semanas con ejercicios acuáticos, en un programa que incluye ejercicios en piscina climatizada (aproximadamente a 34°C) se observan mejoras significativas en el FIQ, la fatiga, la depresión, el bienestar psicológico, la ansiedad, la vitalidad y el número de puntos dolorosos22,23.

Tan sólo con ejercicio aeróbico en el medio acuático se consiguen mejoras significativas en el número de puntos de dolor, el dolor global, FIQ, SF-36 y la calidad del sueño medida por el Pittsburgh Sleep Quality Index (www.sleep.pitt.edu)19. Hävermark y Langius-Eklöf24 realizan un programa de ejercicios en piscina terapéutica climatizada únicamente con estiramientos y relajación durante 10 semanas; además dan información básica sobre la enfermedad, el dolor y la fisiología muscular; encontrando mejoras en el FIQ, en el cuidado personal y en la motivación. Otros programas más completos con ejercicios aeróbicos, fuerza-resistencia y relajación en piscinas terapéuticas (piscina de escasa profundidad a 32°C, con un programa de ejercicios aeróbicos, monitorizados con pulsómetro para mantener la frecuencia cardíaca al 50-80% de la frecuencia cardíaca máxima) mejoran además de forma significativa la calidad del sueño, función cognitiva, función física y reducción de los puntos de dolor, en 16 semanas25.

Además, se ha relacionado en un estudio de Tomas-Carus et al26 la fuerza concéntrica de los flexores del codo con las mejoras en los problemas físicos del rol y la fuerza concéntrica de los extensores del codo con las mejoras en los problemas emocionales del rol. La fuerza excéntrica de los extensores del codo predicen las mejoras en el balance postural. Con su programa de entrenamiento en piscina terapéutica atendieron a las mejoras significativas que obtuvieron (fuerza, balance postural, función física, problemas del rol físico y emocional, dolor, salud general, vitalidad y dimensiones de salud mental del SF-36) y calcularon las relaciones anteriores.

En cuanto al tipo de medio acuático en el que se realicen las actividades, se ha comparado la piscina con el mar; la única diferencia significativa entre grupos que se encontró fue con respecto a la depresión que disminuyó más en el grupo que realizaba actividad en el mar; aun así hay que atender a la temperatura del medio acuático ya que el frío empeora a estos pacientes19.

Otras modalidades de actividad física

Un programa de ejercicios basados en el método Pilates, con sesiones de una hora de duración, 3 veces por semana, con un entrenador certificado, de 12 semanas de duración, también produce mejoras significativas en los datos medidos por el FIQ27.

Alentorn-Geli et al28 comparan un programa de actividad física tradicional (monitorizados por un instructor con experiencia en fibromialgia, con 15min de calentamiento, 30min de ejercicio aeróbico, 25min de ejercicios de fortalecimiento y 20min de relajación) frente a uno con plataforma vibratoria (monitorizado por los investigadores), ambos programas con 2 sesiones a la semana; con frecuencia de 30Hz y 2mm de amplitud; con una tabla de 6 ejercicios en 6 series de 30s con 3min de recuperación, con una plataforma PowerPlate), durante 6 semanas de duración. Las personas con fibromialgia que realizaron los ejercicios en la plataforma vibratoria redujeron el dolor y la fatiga de forma significativa (además mejoró el dolor y el FIQ; pero no llegó a alcanzar significación estadística), en cambio, en tan corto periodo de tiempo no hubo diferencias entre el grupo control y el del programa tradicional. Así pues, parece que la plataforma vibratoria consigue unos efectos más inmediatos sobre la sintomatología de la fibromialgia; pero deberían realizarse más estudios para confirmar los resultados y conocer mejor los efectos a largo plazo.

Evaluación de la eficacia a largo plazo

De acuerdo con el metaanálisis de Busch et al4, la mayoría de los estudios realizados examinan los efectos de las intervenciones a corto plazo con una mediana de seguimiento de 12 semanas, siendo escasos los seguimientos superiores a 3 meses. En este metaanálisis se señala que los estudios más prolongados encuentran un mantenimiento significativo de la mejoría en aspectos como el dolor, la función física y la depresión a los 6 meses y al año en la fase de mantenimiento. Wigers29 reevaluó a los participantes 4,5 años después de la intervención encontrando que las mejorías no se mantuvieron en el grupo con ejercicios, y que la mayoría del grupo ya no los realizaba.

Conclusiones

Los programas de actividad física son eficaces en el tratamiento de la fibromialgia, tanto en la reducción de las características definitorias (dolor y número de puntos dolorosos), como en la reducción de síntomas asociados como la depresión y el trastorno del sueño o en la mejora de las características de estos enfermos como la calidad de vida, la capacidad funcional o el impacto de la fibromialgia por lo que deberían incluirse de forma sistemática en los planes terapéuticos.

Los diferentes programas muestran una eficacia diferente, presentando la mejor evidencia los ejercicios de resistencia aeróbica realizados en medio acuático; sin embargo, dado que la eficacia de la intervención está relacionada con la adherencia deberá tenerse en cuenta las preferencias del paciente, el coste, y otras variables como la accesibilidad. Debe tenerse en cuenta la capacidad de realizar actividad física al inicio del plan terapéutico teniendo en cuenta la edad, el grado de impacto de la fibromialgia y otras características del paciente como puede ser la comorbilidad, e iniciar siempre de forma gradual.

Igualmente sería recomendable la prescripción de la actividad física desde equipos multidisciplinarios, y el poder contar con una supervisión adecuada con personal con experiencia con pacientes fibromiágicos, pero el no disponer de estos equipos no debe ser un obstáculo para incluir la actividad física en el plan terapéutico de estos pacientes.

Con todo, quedan algunos puntos de incertidumbre, la adherencia a largo plazo es limitada, lo que disminuye el impacto sobre el pronóstico de estos pacientes, que por otra parte, carecemos de factores relacionados con buena o mala evolución, tampoco está establecida la eficacia de esta intervención, ni a corto ni a largo plazo, sobre las capacidades laborales de estos pacientes, aspectos que requieren más estudios y desarrollo de nuevas estrategias.

Conflicto de intereses

Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.

Anexo 1
Cuestionario de Impacto de Fibromialgia (FIQ)

Para las preguntas 1 a 3 señale la categoría que mejor describa sus habilidades o sentimientos durante la última semana. Si Vd. nunca ha realizado alguna actividad de las preguntadas, déjela en blanco.

Pregunta 1. ¿Usted pudo…

  Siempre  Casi siempre  Ocasionalmente  Nunca 
Ir a comprar? 
Preparar la comida? 
Lavar los platos a mano? 
Pasar la aspiradora por la alfombra? 
Hacer las camas? 
Caminar varios centenares de metros? 
Visitar a los amigos o parientes? 
Cuidar el jardín? 
Conducir un coche? 
Subir escaleras? 

Pregunta 2. De los 7 días de la semana pasada, ¿cuántos se sintió bien?

Pregunta 3. ¿Cuántos días de trabajo perdió la semana pasada por su fibromialgia? (Si no trabaja fuera de casa,

Para las preguntas 4 a 10 marque el punto que mejor indique cómo se sintió Vd. la última semana.

Pregunta 4. Cuando trabajó (incluyendo las tareas domésticas), ¿cuánto afectó el dolor u otros síntomas de la fibromialgia a su capacidad para trabajar?

No tuve problemasTuve grandes dificultades
10 

Pregunta 5. ¿Hasta qué punto ha sentido dolor?

No he sentido dolorHe sentido un dolor muy intenso
10 

Pregunta 6. ¿Hasta qué punto se ha sentido cansado/a?

No me he sentido cansado/aMe he sentido muy cansado/a
10 

Pregunta 7. ¿Cómo se ha sentido al levantarse por la mañana?

Me he despertado descansado/aMe he despertado muy cansado/a
10 

Pregunta 8. ¿Hasta qué punto se ha sentido agarrotado/a?

No me he sentido agarrotado/aMe he sentido muy agarrotado/a
10 

Pregunta 9. ¿Hasta qué punto se ha sentido tenso/a, nervioso/a o ansioso/a?

No me he sentido nerviosoMe he sentido muy nervioso/a
10 

Pregunta 10. ¿Hasta qué punto se ha sentido deprimido/a o triste?

No me he sentido deprimido/aMe he sentido muy deprimido/a
10 

Fuente: Monteverde S, Salvat I, Montull S. Fernández-Ballart. Validación de la versión española del Fibromialgia Impact Questionnaire. Rev Esp Reumatol. 2004;31:507-513.

Anexo 2
Health Assessment Questionnaire (HAQ)

¿Actualmente puede Vd…  Sin ninguna dificultad  Con alguna dificultad  Con mucha dificultad  No puedo hacerlo 
Vestirse y arreglarse
Vestirse, incluyendo amarrarse los zapatos y abrocharse (abotonarse)? 
Lavarse la cabeza? 
Levantarse
Levantarse de una silla que no tiene brazos? 
Acostarse y levantarse de la cama? 
Comer
Cortar su comida con cuchillo y tenedor? 
Levantar hasta su boca una taza o vaso lleno? 
Abrir un cartón nuevo de leche? 
Caminar
Caminar al aire libre en terreno plano? 
Subir 5 escalones? 

Por favor, marque cualquier ayuda o aparato que Vd. use regularmente para estas actividades:

□ Bastón □ Aparato para caminar (andador) □ Muletas □ Silla de ruedas

□ Aparato o instrumentos para vestirse □ Utensilios hechos especialmente para Vd. □ Silla hecha especialmente para Vd. □ Otros (especifique)

Por favor, marque las categorías para las cuales necesita regularmente ayuda de otras personas:

□ Vestirse y arreglarse □ Levantarse □ Comer □ Caminar

¿Actualmente puede Vd…  Sin ninguna dificultad  Con alguna dificultad  Con mucha dificultad  No puedo hacerlo 
Higiene         
Bañarse y secarse todo el cuerpo? 
Bañarse en la bañera? 
Sentarse y levantarse del inodoro? 
Alcanzar         
Alcanzar y bajar algo que pese unos 2 kg de una altura sobre su cabeza? 
Agacharse para recoger ropa del suelo? 
Agarrar         
Abrir la puerta del auto? 
Abrir frascos que ya han sido abiertos? 
Abrir y cerrar grifos? 
Actividades         
Hacer sus compras? 
Subir y bajar del auto? 
Hacer sus tareas domésticas o trabajar en el jardín? 

Por favor, marque cualquier ayuda o aparato que Vd. usa regularmente para estas actividades:

□ Asiento elevado para el inodoro □ Asiento para la bañera □ Agarradera para la bañera □ Abridor de frascos que han sido anteriormente abiertos □ Aparatos con extensión para el baño □ Aparatos con extensión para alcanzar objetos □ Otro (especificar)

Por favor, marque las categorías para las cuales necesita regularmente ayuda de otras personas:

□ Higiene □ Alcanzar □ Agarrar y abrir cosas □ Hacer comprar y tareas domésticas

Versión Española del Health Assessment Questionnaire (HAQ). Traducida y adaptada por J. Esteve-Vives, E. Batlle-Gualda, A. Reig y Grupo para la Adaptación del HAQ a la Población Española.

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¿Es usted profesional sanitario apto para prescribir o dispensar medicamentos?

Are you a health professional able to prescribe or dispense drugs?

Você é um profissional de saúde habilitado a prescrever ou dispensar medicamentos