Introducción: Los tumores desmoides son neoplasias raras, localmente agresivas y sin potencial metastásico. Históricamente, la cirugía ha sido el tratamiento inicial más frecuente. Sin embargo, la alta tasa de recurrencia local, la morbilidad quirúrgica y la posibilidad de regresión espontánea, han motivado un cambio de paradigma. Actualmente, la cirugía ya no es siempre la primera opción, y los consensos recientes priorizan estrategias menos agresivas como la vigilancia activa y tratamientos sistémicos innovadores.

Objetivos: Evaluar el manejo inicial de los tumores desmoides en España mediante una encuesta nacional dirigida a cirujanos generales.

Métodos: Estudio transversal mediante encuesta anónima distribuida en febrero de 2025 por la Sección de Sarcomas de la Asociación Española de Cirujanos. Se recogieron datos sobre las características del encuestado (tipo de hospital, especialización en sarcomas) y se interrogó sobre la actitud terapéutica inicial (cirugía, seguimiento, otras) según localización anatómica, así como el conocimiento sobre regresión espontánea y terapias emergentes (crioablación, Nirogacestat). Se realizó un análisis descriptivo y por subgrupos.

Resultados: Se completaron 120 encuestas con amplia representación del territorio nacional. La cirugía fue el abordaje inicial más frecuente tanto para tumores de pared abdominal (72,5%) como para otras localizaciones (59,2%). Solo un 30% opta por vigilancia activa. Un 48% desconocía la regresión espontánea, un 56,7% la crioablación y un 70% el Nirogacestat. En cambio, al estratificar por cirujanos especializados en sarcomas, estos porcentajes prácticamente se invierten. Aun así, no existe un consenso claro. Las principales barreras identificadas fueron la falta de protocolos, recursos y formación específica.

Conclusiones: El manejo de los tumores desmoides en España muestra una notable variabilidad, con predominio de abordajes quirúrgicos frente a las recomendaciones actuales, especialmente en centros no especializados. Es necesario mejorar la formación, fortalecer las unidades multidisciplinares y consensuar criterios asistenciales. Esta encuesta puede servir como base para impulsar estrategias colaborativas que mejoren la atención a estos pacientes.