Buscar en
Atención Primaria
Toda la web
Inicio Atención Primaria Respuesta de los autores
Información de la revista
Vol. 22. Núm. 3.
Páginas 190-191 (Julio 1998)
Compartir
Compartir
Más opciones de artículo
Vol. 22. Núm. 3.
Páginas 190-191 (Julio 1998)
Respuesta de los autores
Acceso a texto completo
Respuesta de los autores
Authors' reply
Visitas
6257
MC. Pérez Suáreza, C. Díaz Escandóna
a Sama de Langreo. Asturias.
Este artículo ha recibido
Información del artículo
Texto completo
Bibliografía
Estadísticas
Texto completo

Sres. Directores: Agradecemos las puntualizaciones acerca del Doppler, con las que estamos de acuerdo. En nuestra bibliografía1-5 se puede encontrar la misma información que tan amablemente nos proporcionan.

Cuando nosotras utilizamos la palabra eco antes de Doppler pretendemos utilizarla según su significado ­eco del griego éekho, sonido que vuelve­, reflejo de ondas ultrasónicas6, porque, como es sabido, este tipo de Doppler debería denominarse, más correctamente, ultrasonografía Doppler7 y no solamente Doppler. Nosotras, de manera coloquial, y quizás no muy acertadamente, sustituimos ultrasonografía por eco como palabra, no como abreviatura de ecografía.

El problema surge, tal vez, al confundir esta técnica con otra mucho más especializada y no accesible a la atención primaria, denominada Ecografía-Doppler ­Dúplex­, a la que, abreviadamente, algunos profesionales llaman Eco-Doppler.

Únicamente quisiéramos insistir en que no confundimos ninguna técnica, ya que, en todo momento, estamos empleando un ultrasonógrafo Doppler.

Respecto a la determinación de la presión sistólica braquial por auscultación, nos referimos a la auscultación utilizando la sonda del Doppler, porque, según nuestra bibliografía2,7, resulta más exacto. (Auscultación: acto de escuchar ruidos dentro del cuerpo con ayuda de un instrumento interpuesto entre el oído y la parte examinada o no.)6

Por último, según la bibliografía2,3,7, el índice t/b mayor de uno se considera normal, pero como decimos en el artículo es un apoyo para el diagnóstico. A pesar de ser una técnica sencilla, necesita entrenamiento, y en pacientes diabéticos y/o con arterias duras podemos encontrar unos falsos valores normales. Por esto, cuando el índice t/b se aproxime a la unidad, podría realizarse la prueba de esfuerzo de Strandness para completar mejor el diagnóstico. Nosotras no la hicimos, y por eso no la describimos. Animaríamos al Dr. Cimas a proseguir los estudios en este sentido.

Bibliografía
[1]
Arteriopatías periféricas en medicina práctica. Barcelona: Espexs, 1985.
[2]
Hospital Central de Asturias. Qué hacer ante un problema vascular: arteriopatías periféricas. Oviedo: Uriach y Cía, 1982.
[3]
Exploración clínica vascular básica y funcional. Madrid: GARSI, 1991.
[4]
Bernstein EF, Fronek A..
Estado actual de los medios no invasivos para el diagnóstico de enfermedades vasculares periféricas..
Clin Quir Nort Am, 3 (1982), pp. 475-488
[5]
Acín F, Gómez M, Jordán M, Rodríguez Piernas J, García Domínguez L, Guevara L et al..
Valor diagnóstico de bases Doppler en la patología isquémica de los Ms Is..
Cirugía Española, 45(1) (1989), pp. 682-687
[6]
Madrid: Interamericana de España, 1993; 192 y 528.
[7]
Arteriopatía periférica. Barcelona: semFYC, 1996; 34
Opciones de artículo
Herramientas
es en pt

¿Es usted profesional sanitario apto para prescribir o dispensar medicamentos?

Are you a health professional able to prescribe or dispense drugs?

Você é um profissional de saúde habilitado a prescrever ou dispensar medicamentos