La presión de conducción (driving pressure, ΔP) ha emergido como un marcador clave en la ventilación mecánica, mostrando una asociación sólida con la mortalidad en los pacientes con síndrome de distrés respiratorio agudo (SDRA). Su relevancia radica en integrar el volumen corriente administrado y la distensibilidad del sistema respiratorio, reflejando el estrés mecánico efectivo sobre el parénquima funcional. Esta revisión narrativa explora los fundamentos fisiológicos de la ΔP, su desempeño pronóstico en distintas poblaciones de pacientes ventilados y las controversias sobre su aplicabilidad fuera del SDRA, como en escenarios de ventilación espontánea u otras condiciones extrapulmonares. Aunque la evidencia respalda su utilidad como indicador de carga mecánica, se destaca la necesidad de interpretarla dentro del contexto clínico y fisiológico de cada paciente, sin asumirla como único parámetro para la titulación ventilatoria.

Driving pressure (ΔP) has emerged as a key marker in mechanical ventilation, strongly associated with mortality in patients with acute respiratory distress syndrome (ARDS). Its relevance lies in integrating tidal volume and respiratory system compliance, thereby reflecting the effective mechanical stress on the functional lung. This narrative review explores the physiological foundations of ΔP, its prognostic value in various ventilated patient populations, and ongoing controversies regarding its use beyond ARDS, particularly in settings of spontaneous ventilation or extrapulmonary conditions. While evidence supports its role as an indicator of mechanical load, its interpretation must be contextualized, and it should not be used as a standalone parameter for ventilatory titration.