¿ Qué es el melanoma?
El melanoma es un tipo de cáncer cutáneo que afecta a las células que dan el color a la piel. Puede iniciarse en forma de un nevo o peca que crece, cambia de color o de tamaño, o muestra bordes irregulares; también puede iniciarse como una zona plana o elevada en la piel. El melanoma puede ser indoloro o dar lugar a sintomatología de ulceración, irritación, descamación, formación de costra o prurito, y también puede sangrar fácilmente.
El melanoma puede adquirir casi cualquier color, como rojo, azulado, bronceado, marrón, negro, grisáceo o blanquecino. Al principio puede ser oscuro o azulado; después, puede adquirir una coloración más pálida.
El melanoma puede aparecer en cualquier parte del cuerpo, sobre todo en las zonas con exposición solar como los hombros, la cabeza, el tronco o la parte inferior de las piernas. Cuando se diagnostica y se trata a tiempo, se puede curar fácilmente. Sin embargo, cuando el cáncer se disemina a otras zonas del cuerpo adquiere un peligro extremo.
¿Qué personas presentan riesgo de tener melanoma?
Las personas de edad avanzada son las que tienen más posibilidades de presentar un melanoma, aunque las personas jóvenes también pueden presentar. Una persona presenta riesgo de experimentar esta enfermedad si:
* Tiene la piel clara o muestra numerosas pecas, tiene ojos azules y el pelo de color claro.
* Trabaja en el exterior, al sol.
* Su piel presenta quemaduras con facilidad y no muestra bronceado.
* Ha experimentado quemaduras solares importantes en el pasado, incluso cuando era un niño.
* Presenta numerosas lesiones névicas, grandes o con aspecto irregular.
* Tiene antecedentes personales o familiares de melanoma.
¿Cómo sabe mi médico que es un melanoma?
Si el médico sospecha que una lesión es un melanoma, extirpa parte del tejido para examinarlo con el microscopio (biopsia). La biopsia también nos informa del grosor del melanoma y si se ha diseminado hasta la piel adyacente. El médico también puede evaluar un ganglio linfático para determinar si el melanoma se ha diseminado a otras partes del cuerpo.
¿Cómo puede tratar mi médico el melanoma?
El médico comenta con el paciente cuál es la mejor forma de tratamiento según los resultados de las pruebas. El tratamiento más adecuado depende del tamaño y de la profundidad del melanoma, y también de si se ha diseminado. Si el melanoma es pequeño y superficial se puede realizar una extirpación de este. (El paciente puede requerir un injerto cutáneo si fuera necesaria la eliminación de una gran superficie de piel.) Si el melanoma es grande y profundo, o bien se ha diseminado a los ganglios linfáticos, también puede requerirse quimioterapia (fármacos para destruir las células del cáncer) o radioterapia.
¿Qué debo hacer después de haber recibido tratamiento por el melanoma?
El médico efectuará exploraciones regulares para comprobar que el melanoma no ha recidivado. Puede realizar un estudio de los ganglios linfáticos y de la piel, y también puede indicar la realización de pruebas sanguíneas o de estudios radiológicos.
¿Cómo puedo saber si tengo otro melanoma?
El paciente se debe proteger evaluando su piel al menos una vez al mes, bajo una buena fuente de luz, enfrente de un espejo de cuerpo entero o con un espejo de mano y una lupa, si fuera necesario. Hay que comprobar también el cuero cabelludo, para lo cual puede ayudarle un familiar.
Se le debe indicar al médico que evalúe cualquier lesión que tenga un aspecto sospechoso, especialmente un nevo o peca que cambie de tamaño, forma o color, o bien que sangre o cause picor. El método ABCDE puede ser útil para abordar estos problemas.
* A: Asimetría. La mitad de un nevo no es igual que la otra mitad.
* B: Bordes. El melanoma suele presentar bordes irregulares.
* C: Color. El melanoma puede tener casi cualquier color, incluyendo los colores rojizo, azulado, blanquecino, grisáceo y negro; sin embargo, no toda la lesión presenta el mismo color.
* D: Diámetro (tamaño). Hay que avisar al médico si la lesión tiene un tamaño mayor que el de una goma de borrar.
* E: Elevación. Aunque algunos melanomas son planos, la mayor parte presenta elevación por encima del nivel de la piel.
¿Cómo puedo proteger mi piel para prevenir el melanoma?
Debido a que la exposición al sol puede desencadenar un melanoma, hay que limitar el tiempo de permanencia en el exterior entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde durante el verano; también hay que evitar las camas de bronceado y la permanencia bajo el sol para broncearse.
Si es necesario permanecer al sol, hay que utilizar ropa de protección, como sombreros de ala ancha, camisa de manga larga, pantalones largos y gafas de sol que filtren la radiación ultravioleta.
Aproximadamente 30 min antes de salir al exterior hay que utilizar un filtro solar con un factor de protección solar de 15 o superior. Se debe intentar utilizar un filtro solar que bloquee los 2 tipos de luz ultravioleta (UVA y UVB), con reaplicación frecuente. Hay que recordar que la piel debe ser protegida del sol también en invierno.
Es necesario avisar al médico si el paciente presenta cualquier síntoma de aparición reciente como dolor, tos, pérdida de peso, sensación de fatiga o pérdida del apetito.
Esta guía para la educación de los pacientes ha sido adaptada para la categoría de quinto grado empleando las fórmulas de Flesch-Kincaid y SMOG. Puede ser fotocopiada para uso clínico o adaptada para satisfacer las necesidades de su institución. Puede conseguirse la bibliografía seleccionada previa petición. Para obtener más indicaciones sobre cómo escribir guías educativas, consulte el primer artículo de esta serie: "Escribiendo ayudas educativas fáciles de leer" (octubre 2002).
Expresamos nuestro agradecimiento a Tracy Kane, MEd, coordinadora de formación de pacientes, Albert Einstein Health Care Network, Philadelphia, Pa., Estados Unidos.