Aceite salicilado con piritiona de cinc
En el siguiente artículo se describe la elaboración de una suspensión oleosa compuesta por ácido salicílico y piritiona de cinc, prescrita para el tratamiento de la dermatitis seborreica del cuero cabelludo. Se detalla, asimismo, el modo en que debe cumplimentarse la guía de elaboración, control y registro de esta fórmula.
Esta es la prescripción que se recibe en la oficina de farmacia.
El médico indica que se prepare el aceite salicilado según consta en la monografía n.º 4 (004) de preparados oficinales (PO) del Formulario Nacional de 2003:
En esta fórmula, el aceite de ricino se emplea para solubilizar el ácido salicílico en el aceite de oliva, aunque hay otras formas de preparar el aceite salicilado: formación de una simple suspensión entre el ácido y el aceite de oliva o solubilización previa en alcohol y posterior adición del aceite. Se debe emplear la fórmula que aparece en el Formulario Nacional, dado que es la indicada de forma expresa por el médico prescriptor.
La fórmula final tendría el siguiente desarrollo:
El ácido salicílico se presenta como un polvo blanco de sabor ácido. Es muy poco soluble en agua fría, soluble en agua caliente (1/15), soluble en 3 partes de alcohol (1/3), poco soluble en glicerina y vaselina, soluble en éter y aceite de ricino. A concentraciones inferiores al 1% tiene acción queratoplástica. Concentraciones superiores pasan a tener acción queratolítica (es el caso de la fórmula prescrita).
La cinc piritiona se presenta como un polvo blanquecino-amarillento de olor débil azufrado. Insoluble en agua, alcohol (96º), aceites y en la mayoría de los disolventes comunes (esto explica que se incorpore en forma de suspensión). Es soluble en dimetilformamida y dimetilacetamida. Tiene acción antimitótica, ya que disminuye la velocidad de reproducción celular, por lo que se emplea en el tratamiento de la dermatitis seborreica y en la psoriasis.
La fórmula prescrita está indicada en el tratamiento de la dermatitis seborreica: el ácido salicílico elimina las células más superficiales del estrato córneo por su acción queratolítica y la cinc piritiona disminuye el ritmo de proliferación celular epidérmico. Tanto el aceite de oliva como el de ricino coadyuvan la acción queratolítica por el efecto oclusivo que producen.
Formulario visual
Proceso de elaboración de la fórmula paso a paso
1. Situar el aceite de ricino en un baño de agua.
2. Regular el baño de agua a 50 ºC.
3. Añadir el ácido salicílico.
4. Agitar hasta lograr la completa disolución del ácido salicílico.
5. Sacar la solución obtenida del baño de agua, añadir el aceite de oliva y agitar hasta lograr una solución ámbar transparente.
6. Aspecto del aceite salicilado una vez elaborado.
7. Pulverizar la cinc piritiona en un mortero.
8. Añadir el aceite anterior en pequeñas porciones batiendo hasta la perfecta incorporación.
9. Aspecto final de la suspensión elaborada, lista para su envasado.
