Buscar en
Atención Primaria
Toda la web
Inicio Atención Primaria Grado de cumplimentación de las solicitudes radiológicas emitidas desde atenci...
Información de la revista
Vol. 18. Núm. 1.
Páginas 32-36 (Junio 1996)
Compartir
Compartir
Más opciones de artículo
Vol. 18. Núm. 1.
Páginas 32-36 (Junio 1996)
Acceso a texto completo
Grado de cumplimentación de las solicitudes radiológicas emitidas desde atención primaria
Visitas
5411
A. Martíneza, H. Palacína, C. Labordaa, SJ. Gutiérreza, J. Domíngueza, L. Viejoa
a Centro de Salud Almozara. Zaragoza.
Este artículo ha recibido
Información del artículo
Resumen
Texto completo
Bibliografía
Estadísticas

Objetivo. Estudiar el grado de cumplimentación de las solicitudes radiológicas emitidas desde atención primaria.

Diseño. Descriptivo transversal con distribución aleatoria sistemática.

Emplazamiento. Área de influencia de un centro de especialidades que abarca ocho zonas de salud urbanas de Zaragoza.

Material. 413 solicitudes radiológicas del total de las emitidas en el período enero-marzo de 1995.

Mediciones y resultados. Se valoró la cumplimentación de los siguientes apartados: datos de filiación del paciente, procedencia, datos clínicos/exploratorios, sospecha diagnóstica y su concordancia con el informe radiológico, exploración solicitada, fecha, firma y legibilidad de la petición. La cumplimentación fue: nombre completo, 100% de las solicitudes; teléfono, 37%; dirección, 50%; número de seguridad social, 99%; procedencia, 71%; sintomatología, 92%; exploración clínica, 35%; diagnóstico de sospecha, 56%; fecha, 92%; firma, 86%; buena legibilidad, 13%, dificultosa, 75%. Distribución por sexo: 44% de varones, 56% de mujeres (diferencia significativa). Edad media: 47,2 años (diferencia significativa). La radiología simple osteoarticular fue la petición más frecuente (43,3%).

Conclusiones. 1. Escasa cumplimentación en los apartados teléfono/dirección. 2. Datos clínicos (síntomas, exploración) y diagnóstico de sospecha aparecen insuficientemente reflejados. 3. La fecha y la firma no alcanzaron el deseable 100% de cumplimentación. 4. Deficiente legibilidad, siendo muy pocas las solicitudes que no ofrecen problemas.

Texto completo

Introducción

Entre la amplia gama de pruebas complementarias a las que se tiene acceso desde el ámbito de atención primaria se encuentran las exploraciones radiológicas, que engloban radiografías simples, ecografías, mamografías, urografías y tránsitos digestivos1. Dado el importante volumen que supone este tipo de solicitud2 y los posibles efectos secundarios producidos por la radiación tanto individual como colectivamente, consideramos importante la adecuada utilización del uso de peticiones radiológicas y evitar exploraciones rutinarias innecesarias, teniendo en cuenta que la radiología forma parte de la historia clínica del paciente3-5.

Este estudio se basa en el análisis de la calidad de la información6 que junto con nuestra petición suministramos al radiólogo. Somos conscientes de que nuestros compañeros radiólogos precisan de unos datos clave que les apoyen en la correcta interpretación de las imágenes, de manera que cuanto más completos y ajustados a la realidad sean éstos, más favorecemos su labor en beneficio final de nuestros pacientes.

Los objetivos del trabajo han sido: valorar la calidad de las solicitudes radiológicas tanto en lo que respecta a datos de filiación del paciente como a datos clínicos y exploratorios, conocer el tipo de petición radiológica solicitada2, medir la frecuencia de emision de una impresión diagnóstica que hemos considerado de gran importancia orientativa y estudiar el grado de concordancia entre nuestra sospecha clínica y el diagnóstico radiológico.

Material y métodos

Realizamos un muestreo aleatorio sistemático del 10% de las solicitudes radiológicas recibidas en los meses de enero, febrero y marzo de 1995, en el Servicio de Radiodiagnóstico del Ambulatorio Ramón y Cajal de Zaragoza, cuya cobertura abarca ocho zonas de salud urbanas. El total de volantes revisados fue de 413.

Las variables que se estudiaron fueron: datos de filiación del paciente (nombre, primer y segundo apellidos, edad, dirección, teléfono y número de seguridad social); procedencia de la solicitud, datos clínicos y exploratorios, impresión diagnóstica, concordancia clínico-radiológica, tipo de exploración solicitada, fecha, firma y legibilidad de la petición.

Los criterios seguidos para valorar la legibilidad de los volantes han sido, respecto al grado de dificultad que presentaban en su comprensión escrita, los siguientes: legible, legible con dificultad e ilegible.

El apartado referente a la constatación de datos clínicos se ha valorado de la siguiente manera: por una parte, diferenciamos lo que son síntomas y datos procedentes de la anamnesis del paciente y, por otro, los datos propios de la exploración física. Con respecto a los síntomas, consideramos:

 

­ Cumplimentación completa: solicitudes que reflejaban un número de síntomas suficiente para una adecuada orientación clínica.

­ Cumplimentación insuficiente o incompleta: imposibilidad de correcta orientación, aun refiriendo algún síntoma.

­ Ausente: ningún síntoma.

 

Similar valoración se aplicó al apartado de exploración física. Las solicitudes de control de trastornos patológicos o aquellas cuyos datos clínicos eran obviables se consideraron completas.

Resultados

De las 413 solicitudes radiológicas analizadas, se encontró una cumplimentación de los datos de filiación (nombre, primer y segundo apellidos) del 100%; teléfono, 37%; domicilio del paciente, 50%, y número de Seguridad Social, 99%. El centro de atención primaria remitente de la solicitud figuraba en un 71%. La edad del paciente constaba en el 94% de los impresos, resultando una media de edad de 47,2 (DE: 22,3), que en las mujeres era de 49,9 y en los varones de 43,8 años, con una diferencia significativa entre ambas medias. El P25 corresponde a una edad de 31,5 años, el P50 a 48 años y el P75 a 68 años.

Respecto a la distribución por sexos, ésta es de un 44% para los varones y de un 56% para las mujeres, con diferencias significativas (fig. 1).

En cuanto a los datos clínicos, los síntomas referidos por el paciente quedan reflejados en un 92% de las solicitudes, siendo de forma completa en un 40% de ellas; así mismo los datos exploratorios aparecen en el 35% de las peticiones, correspondiendo un 18% a lo considerado en este trabajo como exploración completa.

El diagnóstico de sospecha consta en un 56% de las solicitudes.

El tipo de solicitud radiológica por orden de frecuencia fue: la radiografía osteoarticular (43,3%), seguida de la radiografía de tórax (32,2%), frente a la radiografía de vías urinarias y de cavum con un 0,7% y un 1,9%, respectivamente (fig. 2).

La fecha de petición figura en el 92% y la firma del médico solicitante en el 86%. La legibilidad según el criterio de valoración aplicado en este trabajo presentó los siguientes resultados: buena legibilidad, 13%; dificultosa, 75%, y nula, 12% (fig. 3).

Los síntomas y los datos de exploración clínicos figuraron conjuntamente en el 33% de todas las solicitudes. En un 5% de las peticiones no se aportó ningún dato clínico ni exploratorio.

La concordancia entre la impresión diagnóstica del médico solicitante y el informe radiológico fue del 31,2%.

Discusión

Antes de analizar los resultados de nuestro estudio, nos parece conveniente señalar la existencia de un posible sesgo derivado de la subjetividad del investigador a la hora de valorar determinados parámetros, tales como la legibilidad del volante y la suficiente o insuficiente cumplimentación de los datos clínicos y de exploración física. Respecto al apartado de datos clínicos, nos basamos no tanto en la cuantificación del número de síntomas, sino en la existencia de aquellos que permitan una adecuada orientación clínica.

De los resultados obtenidos en este trabajo, se desprende que existe una escasa cumplimentación en los apartados de teléfono y dirección, lo que a nuestro entender dificultaría la localización del paciente en caso necesario. Los datos clínicos (síntomas y exploración física) y diagnóstico de sospecha, también aparecen insuficientemente reflejados, siendo éstos, aspectos básicos y de gran ayuda para que el radiólogo emita un informe. Hemos comprobado que la petición radiológica más solicitada ha sido la radiografía osteoarticular, seguida de la radiografía de tórax.

En este estudio llama la atención la distribución por edad de las solicitudes radiológicas, siendo una cuarta parte de los pacientes menor de 31,5 años y la mitad de todos ellos menor de 48 años; entendemos que es elevado el número de radiografías para personas jóvenes, ya que dada la esperanza de vida media en nuestro país, existe mayor probabilidad de precisar posteriores estudios radiológicos, con el consiguiente riesgo de exceso de radiación. La fecha y la firma, aunque aparecen en porcentajes altos, no llega a ser del 100%. La legibilidad de las peticiones es en general deficiente, siendo muy escaso el número de ellas que no ofrecen dificultad en su interpretación, no superando su porcentaje el 13%. Este dato lo consideramos de gran importancia, ya que una solicitud correctamente cumplimentada en lo que al resto de parámetros se refiere, puede quedar totalmente anulada si éstos no son legibles.

La interpretación de todos estos datos nos parece de utilidad en la medida en que sirva para concienciar a los profesionales de atención primaria, de la importancia de realizar una buena cumplimentación de las solicitudes radiológicas que redunde, al final, en beneficio del paciente.

Sin embargo, hay que tener en cuenta, como posible causa de estas deficiencias, la fuerte carga asistencial a la que se ve sometido en muchas ocasiones el profesional, que dispone de un tiempo reducido para cada paciente. Una pequeña ayuda en este sentido sería disponer de forma generalizada en todos los centros de salud, de etiquetas adhesivas de identificación del paciente y del centro emisor, donde se incluyeran el mayor número de datos posibles.

No hemos podido contrastar nuestros resultados con otros estudios ya realizados, dada la escasez de bibliografía con objetivos similares, que permitan su comparación. No obstante, sería de utilidad la aportación de nuevos estudios que posibiliten conocer si los datos obtenidos en estos centros de salud urbanos se pueden extrapolar a otros centros de salud.

Agradecimientos

Queremos expresar nuestro agradecimiento al Servicio de Radiodiagnóstico del C.E. Ramón y Cajal de Zaragoza por su colaboración en la facilitación de datos.

Bibliografía
[1]
La Història Clínica per a l'Assistència Primària. Informes tècnics d'assistència sanitària. Departament de Sanitat i Seguretat Social. Barcelona, 1984.
[2]
Criterios aplicables a las exploraciones de Radiodiagnóstico. Serie de Informes Técnicos 689. Ginebra: OMS, 1983.
[3]
Radiación ionizante: Fuentes y efectos biológicos. Naciones Unidas, Nueva York, 1982.
[4]
Abrams HL..
The overutilization of rays..
N Engl J Med, 300 (1979), pp. 1213-1216
[5]
Beentjes LB, van der Wielen AW, Kal HB..
Risk evaluation of diagnostic x-ray examinations of the chest..
Diagnostic Imaging, 48(6) (1979), pp. 336-344
[6]
Cabedo VR, Cantos R, Corbell.a, Jané A, Saturno PJ..
Evaluación de la calidad en la solicitud de radiología de tórax en patología crónica en un centro de salud..
Aten Primaria, 13 (1994), pp. 80-84
Opciones de artículo
Herramientas
es en pt

¿Es usted profesional sanitario apto para prescribir o dispensar medicamentos?

Are you a health professional able to prescribe or dispense drugs?

Você é um profissional de saúde habilitado a prescrever ou dispensar medicamentos