Buscar en
Atención Primaria
Toda la web
Inicio Atención Primaria Ansiedad y conflicto personal por erupción fija medicamentosa en zona genital
Información de la revista
Vol. 23. Núm. 5.
Páginas 314-315 (Marzo 1999)
Compartir
Compartir
Más opciones de artículo
Vol. 23. Núm. 5.
Páginas 314-315 (Marzo 1999)
Acceso a texto completo
Ansiedad y conflicto personal por erupción fija medicamentosa en zona genital
Anxiety and personal conflict due to fixed eruption in the genital area due to medicine
Visitas
6313
V. Palop Larreaa, S. Silvestre Quílezb, C. Catalán Olivera, I. Martínez-Mirbc
a Servicio de Urgencias. Hospital 9 de Octubre. Valencia.
b Servicio de Investigación. Hospital General Universitario. Valencia.
c Departamento de Farmacología. Universidad de Valencia.Servicio de Investigación. Hospital General Universitario. Valencia.
Este artículo ha recibido
Información del artículo
Texto completo
Bibliografía
Estadísticas
Texto completo

Sres. Directores: Las reacciones adversas a medicamentos (RAM) son una causa frecuente de consulta en atención primaria, y la piel es el órgano más frecuentemente afectado1-3. Sin embargo, algunas de estas reacciones pueden pasar desapercibidas al no relacionarlas el paciente con la toma del medicamento, bien porque la reacción es rara, se presenta en un lugar muy diferente o distante de donde el paciente cree que puede actuar el fármaco o no tiene conocimiento de que el fármaco pueda producir este tipo de reacción4. La falta de reconocimiento de estas RAM por el paciente pueden producirle incomodidad, nerviosismo o problemas personales. Presentamos 2 casos de eritema fijo medicamentoso (EFM) de localización genital relacionados con bronquidiazina CR® (trimetoprim, sulfametoxazol, bromhexina, benzoato sódico, jarabe bálsamo tolú, sacarina sódica y sacarosa) que ilustran este hecho.

 

Caso 1. Varón de 27 años que acudió a urgencias hospitalarias a las 6 horas de la mañana porque desde hacía 3 días presentaba en pene una lesión cutánea con sensación de quemazón. El paciente temía que pudiera ser un proceso infeccioso de transmisión sexual, a pesar de no haber tenido en los últimos 3 meses ningún contacto sexual, hecho que le provocaba ansiedad e insomnio. A la exploración se apreció una lesión en glande macular bien delimitada eritematosa. El paciente tomaba desde hacía 5 días bronquidiazina CR® vía oral, 10 ml/8 h, como tratamiento de un proceso catarral. Al comentarle que la lesión en glande podía estar en relación con el medicamento se tranquilizó notablemente. Tras la retirada de la bronquidiazina CR® desaparecieron las molestias locales en 36 horas, la ansiedad y el insomnio, con persistencia de una ligera pigmentación en la zona de la lesión durante 17 días.

Caso 2. Varón de 49 años que acude a urgencias hospitalarias a las 2 horas de la madrugada por insistencia de su esposa para descartar enfermedad de transmisión sexual, a pesar de que el paciente aseguraba no haber mantenido relaciones sexuales extramaritales. El paciente presentaba desde hacía 4 días una lesión en pene con sensación urente, prurito, desazón y nerviosismo. A la exploración se apreció una lesión macular bien delimitada eritematosa y ligeramente violácea que afectaba a glande y prepucio. El paciente tomaba desde hacía 6 días bronquidiazina CR® vía oral, 10 ml/ 8 h, por una faringitis. Al comentarles la posibilidad de que la lesión genital podía estar relacionada con la toma del medicamento cedió la tensión emocional de la pareja. Con la retirada del medicamento y la aplicación de un corticoide tópico remitieron los síntomas locales en 24 horas y la lesión cutánea desapareció en 12 días.

 

Según el algoritmo del Sistema Español de Farmacovigilancia, existe una fuerte relación de causalidad entre la administración de bronquidiazina CR® y la presentación del EFM en los 2 casos5: a) clara relación temporal; b) la reacción adversa es bien conocida para las sulfamidas (principio activo incluido en bronquidiazina CR®; c) mejoría tras la retirada del fármaco, y d) no existe causa alternativa que justifique la reacción.

La EFM es un cuadro cutáneo frecuente en dermatología y atención primaria, y representa alrededor del 10% de todas las toxicodermias3. Existe un número importante de fármacos que pueden causarla; los más frecuentes son los barbitúricos, analgésicos no narcóticos (pirazolonas, salicilatos y paracetamol), fenoftaleína, anticonceptivos orales y algunos antibióticos (sulfamidas y tetraciclinas). La erupción se inicia a las 24-48 horas tras la administración del fármaco responsable, suele caracterizarse por una o varias máculas redondeadas, bien delimitadas, eritematosas o violáceas y se acompaña de sensación urente y/o prurito. Las lesiones pueden presentarse en cualquier zona de la piel; la mucosa oral y/o genital se afectan con gran frecuencia y pueden ser la única localización. Estas lesiones comienzan a desaparecer a la semana de retirar el medicamento y pueden dejar pigmentación residual. La lesión se suele reproducir en la misma localización con la reexposición del fármaco causante, aunque también puede manifestarse en nuevas localizaciones. La intensidad de la reacción aumenta con cada reexposición, motivo por la que no la planteamos en estos 2 casos3. Aunque las lesiones en pene pueden resultar difíciles de relacionar con una RAM, también otras localizaciones menos alarmantes se resisten al diagnóstico; una EFM por naproxeno en cara interna de la muñeca necesitó 5 episodios y un interrogatorio concienzudo para establecer el diagnóstico6. Estos casos ilustran sobre la importancia de informar a los pacientes acerca de la posibilidad de que cualquier medicamento pueda producir una RAM4. Adecuar los prospectos con una información comprensible para que los pacientes puedan reconocer los posibles efectos adversos parece importante y podría evitar padecimientos innecesarios.

Bibliografía
[1]
Capellà D, Ávila P, Cabeza L, Moreno V, Vidal X, Laporte JR..
Cuatro años de experiencia en farmacovigilancia..
Med Clin (Barc), 91 (1988), pp. 93-96
[2]
De Abajo FJ, Martín-Bun M, Madurga M, Salcedo F..
La farmacovigilancia en atención primaria..
Farmacoterapia, 5 (1992), pp. 234-241
[3]
Skin disorders. En: Davies DM, ed. Textbook of adverse drug reactions, 4.ª ed. Oxford: Oxford University Press, 1991; 514-534.
[4]
Pharmacological basis of adverse drug reactions. En: Speight TM, Holford NHG, eds. Avery's drug treatment, 4.ª ed. Auckland: Adis International, 1997; 261-299.
[5]
Meyboom RH.B, Royer RJ..
Causality classification at pharmacovigilance centers in the European Community..
Pharmacoepidemiol Drug Safety, 1 (1992), pp. 87-89
[6]
Revenga Arranz F, Gonzalo Garijo MA..
Exantema fijo medicamentoso causado por naproxeno..
Actas Dermosifiliogr, 88 (1997), pp. 489-490
Opciones de artículo
Herramientas
es en pt

¿Es usted profesional sanitario apto para prescribir o dispensar medicamentos?

Are you a health professional able to prescribe or dispense drugs?

Você é um profissional de saúde habilitado a prescrever ou dispensar medicamentos