Our aim was to know patient's understanding and concerns about biosimilars, switching, and non-medical switch in Mexican population.
Materials and methodsA cross-sectional social media survey via the Mexican Foundation for Rheumatic Patients (FUMERAC) was conducted from November 2020 to January 2021. Patients were eligible if they were >18 years of age with any inflammatory rheumatic condition.
ResultsA total of 165 participants completed the survey. The most frequent diagnoses were Rheumatoid Arthritis, Ankylosing Spondylitis, and Psoriatic Arthritis. Disease-modifying antirheumatic drugs as monotherapy was the most common treatment. Prior or current users of biologics were reported. Most participants had never heard the term biosimilar. Some would accept the change from an originator to its biosimilar and few would take legal measure or file a complaint if a non-medical switch were to happen. Patients had concerns on treatment effectiveness, adverse effects, reason for change, treatment duration, and other patient's experience.
ConclusionIn Mexico, the concept of biosimilars is barely known. Most patients would not take any measure if they were changed from an originator to its biosimilar.
Nuestro objetivo fue conocer la comprensión y las preocupaciones de los pacientes mexicanos acerca de los medicamentos biosimilares, el cambio de tratamiento y el cambio no médico.
Materiales y métodosSe llevó a cabo una encuesta transversal en redes sociales, por medio de la Fundación Mexicana para Enfermos Reumáticos (FUMERAC) en el periodo de noviembre del 2020 a enero del 2021. Los pacientes eran elegibles si tenían más de 18 años y presentaban alguna condición reumática inflamatoria.
ResultadosUn total de 165 participantes completaron la encuesta. Los diagnósticos más frecuentes fueron artritis reumatoide, espondilitis anquilosante y artritis psoriásica. La monoterapia con fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (FAME) fue el tratamiento más común. Se reportaron pacientes que fueron usuarios previos o actuales de agentes biológicos. La mayoría de los participantes no habían escuchado el término «biosimilar» anteriormente. Algunos pacientes aceptarían el cambio de tratamiento con un medicamento original por un agente biosimilar, mientras que otros tomarían acción legal o presentarían una queja si ocurriera el cambio no médico. Los participantes tenían preocupaciones acerca de la efectividad del tratamiento, sus efectos adversos, las razones para cambiar, la duración del tratamiento y las experiencias de otros pacientes.
ConclusiónEn México, el concepto de «biosimilares» es poco conocido. La mayoría de los pacientes no tomaría ninguna medida si su tratamiento se cambiara de un medicamento original a un biosimilar.