En este año 2013, Radiología hace su segundo intento de entrar en el Institute for Scientific Information (ISI). El ISI calcula anualmente el factor de impacto de las revistas científicas que indexa, y los hace más tarde públicos en el Journal of Citation Reports (JCR). Entrar en el ISI es uno de los grandes objetivos a medio plazo de Radiología1. Es el camino natural de cualquier revista científica del campo de la biomedicina, y el camino obligado de aquellas que crecen y quieren crecer más. Creemos que hay razones para intentarlo de nuevo, con un mínimo de garantía; la razón fundamental, que Radiología ha crecido sustancialmente en los últimos años. El crecimiento se percibe en todos los indicadores: factor de impacto virtual (fig. 1), número total de citas anuales (fig. 2), calidad de las citas que recibe (medida con el Scimago Journal Rank [SJR]) (fig. 3), e impacto en su ámbito científico (medido con el Source Normalized Impact per Paper [SNIP]) (fig. 4). Si consideramos que, en la ocasión anterior, la revista se presentó al ISI a finales del año 2008, las gráficas sugieren que las posibilidades pueden ser mayores ahora, a comienzos de 2013. Pero el cambio, y con él nuestras esperanzas, también se percibe en el contenido. Parte del crecimiento de Radiología ha tenido que ver con el número de artículos que recibe2 y, por lo tanto, en lo que publica. La estrategia editorial ha buscado, sostenidamente, hacerla menos dependiente de las aportaciones espontáneas ampliando los artículos por encargo con un objetivo eminentemente formativo, o, simplemente, diversificando3. Para una revista como la nuestra, que recibe anualmente entre 15 y 20 veces menos artículos que las que lideran las publicaciones radiológicas, la dependencia implica un riesgo elevado de que la calidad oscile incontrolada y perceptiblemente en un espacio de tiempo corto. Diversificar en artículos de calidad permite disponer de un mayor control de lo que se puede publicar y, por tanto, de la calidad de lo que se publica3. Puesto que Radiología, como el resto de revistas científicas, imprime un número concreto de páginas anuales, la selección lleva asociado un aumento sustancial del índice de rechazo de los artículos que se reciben. El índice ha crecido para todas las secciones de la revista, en alguna de las cuales se hace realmente difícil publicar en este momento (fig. 5). La dificultad, en cualquier caso, incrementa también el valor de la publicación, y en ese valor ponemos la esperanza de que la calidad mueva a un crecimiento de la citación4. Reconozco que esta evolución de la revista, que por primera vez ha rechazado más de la mitad de los artículos que ha recibido (fig. 5), puede provocar algún desencanto, pero estoy convencido de que no será complicado comprender cuál es el camino que queremos seguir para hacerla crecer mucho más de lo que ya haya podido hacerlo. Puesto que este es el resultado del camino emprendido, quiero pedir disculpas a todos los que poniendo su interés y su empeño por publicar en Radiología no han podido hacerlo en este momento de mayor competencia y creen que la decisión no fue justa; quiero agradecer, a quienes lo consiguieron, su contribución a la calidad de la revista e, indirectamente, a las citaciones que recibe; y quiero también dar las gracias, especialmente, a todos los que, reconociendo la importancia de recordar a Radiología en sus citas, contribuyen a elevar nuestros indicadores. No olvidemos que la revista es de todos, de quienes la financian, de quienes la dirigen, de quienes la leen, de quienes publican en ella, de quienes lo intentaron y no pudieron, de quienes lo volverán a intentar y de quienes no tienen ninguna intención de hacerlo, de quienes la citan, de quienes coinciden con nuestra visión y de quienes no, de quienes la valoran, y también de quienes no lo hacen, aun conociéndola de cerca, de quienes no se portaron bien con ella y de quienes en algún momento pudieron enfadarse, de todos los radiólogos españoles, que merecen una revista científica que les represente como otras representan a otras especialidades. Por ser de todos, entrar en el ISI será, cuando sea, un premio para todos, que redundará en beneficio de todos, todos los de ahora y los que mañana sean todos.
Si usted quiere comentar, formular preguntas o criticar cualquiera de los aspectos de este editorial, puede hacerlo en la dirección de correo electrónico: editor-radiologia@seram.es desde que reciba el número de la revista. Las respuestas serán publicadas en la web de la SERAM a la vez que en la edición impresa de Radiología. Las opiniones vertidas en este editorial no necesariamente tienen que coincidir con las de la SERAM.









