Se desconoce la prevalencia real de alergia a la penicilina, la autoinformada por la población suele ser elevada y aunque no disponemos de datos de nuestro país, en algunos como Estados Unidos o Australia hasta un 10% de la población refiere serlo. Al realizar el estudio pertinente solo se confirma en un pequeño porcentaje de casos (±5%). Esto se debe, entre otros motivos, a la pérdida de sensibilidad al fármaco con el tiempo, pero también es frecuente que las etiquetas de alergia sean erróneas; sin relación con reacciones de hipersensibilidad1,2.
Es fundamental una correcta caracterización, registro y estudio de las reacciones que se relacionan con la toma de fármacos. El estudio alergológico es complejo; clásicamente se realizan pruebas cutáneas con el fármaco implicado; seguidas, en el caso de que sean negativas, de una prueba de tolerancia oral. Dada la imposibilidad de poder estudiar a todos los etiquetados como alérgicos, la tendencia actual es simplificar el estudio; se propugna que se retiren directamente las falsas etiquetas y en los pacientes con bajo riesgo de reacción se realice directamente una prueba de tolerancia oral con el fármaco (sin pruebas cutáneas previas), ya que en ellos ha demostrado ser una opción segura y fiable3.
El objetivo del estudio era conocer la prevalencia de alergia a penicilina autoinformada por adultos de la población general asignados a un centro de salud urbano del Área Sanitara V en Asturias. Como objetivos secundarios estaban calcular, entre quienes refiriesen ser alérgicos a penicilina, el porcentaje de etiquetas que podrían considerarse falsas y el porcentaje de personas con bajo riesgo de reacción.
Mediante muestreo aleatorio simple se obtuvo una muestra representativa de los usuarios ≥18 años adscritos al centro de salud Natahoyo-Tremañes (488 personas de una población de 16.636). Se elaboró un cuestionario ad hoc que se cumplimentó mediante entrevista telefónica tras consentimiento verbal. Se recogieron posibles alergias, medicamento involucrado y características de las reacciones presentadas. En quienes referían alergia a penicilina/betalactámicos se calculaba el riesgo de reacción con la regla de predicción clínica PEN-FAST4.
Participaron 408 personas (83,6% de la muestra). El 18,38% (IC95%: 14,50-22,26%) de los entrevistados referían ser alérgicos a algún medicamento, con diferencias significativas en la distribución por sexos ya que referían alergia de manera general a algún fármaco el 23% de las mujeres, frente al 13,5% de los hombres.
El medicamento al que los entrevistados referían tener alergia con más frecuencia fue a la penicilina, que representó el 5,64% (IC95%: 3,28-8,00) de la muestra total.
Los síntomas cutáneos, solos o acompañados de otros síntomas, fueron la manifestación fundamental (43,47%). En la tabla 1 se detallan manifestaciones y riesgo de reacción.
Manifestación y riesgo de reacción en adultos etiquetados como alérgicos a penicilina
| Manifestaciones clínicas referidas | ||
|---|---|---|
| Manifestación | Frecuencia | Porcentaje |
| Síntomas cutáneos, solos o con otros síntomas | 10 | 43,47% |
| Síntomas solo cutáneos | 6 | 26,08% |
| Edema angioneurótico | 5 | 21,73% |
| Dificultad respiratoria | 1 | 4,34% |
| Shock anafiláctico | 1 | 4,34% |
| Digestivos: vómitos, diarrea | 4 | 17,39% |
| CandidiasisMareo | 21 | 8,69%4,34% |
| No s/No c | 3 | 13,04% |
| Riesgo de reacción en personas alérgicas a penicilina según la regla PEN-FAST | |||
|---|---|---|---|
| Clasificación | Puntos | Frecuencia | Porcentaje |
| Muy bajo riesgo | 0 puntos | 4 | 17,39% |
| Bajo riesgo | 1-2 puntos | 13 | 56,52% |
| Moderado riesgo | 3 puntos | 6 | 26,08% |
| Alto riesgo | 4-5 puntos | 0 | 0% |
El 73,9% de los que referían alergia a la penicilina tenían muy bajo o bajo riesgo de reacción según PEN-FAST. En el 30,44% (IC95%: 13,21-52,92%) de las ocasiones las reacciones referidas cumplían criterios de posibles falsas etiquetas.
La prevalencia de alergia a penicilina autoinformada por la población en nuestro estudio fue de un 5,6% (IC95%: 3,28-8,00%), la cual difiere de la referida por otros estudios en los que ronda un 10%1,2; aunque las cifras son muy variables según las poblaciones estudiadas3. La relevancia de este estudio consiste en que los datos proceden de la población general, poco representada en otros estudios de prevalencia.
Respecto a las manifestaciones de alergia a penicilina en los etiquetados como tal, 3 de cada 10 de los entrevistados refirieron reacciones que no reunían los requisitos para que se considerasen inmunomediadas (sin inicio brusco de síntomas, ni síntomas cutáneos o relacionados con alergia) y que fueron compatibles con falsas etiquetas. Las manifestaciones se relacionaron fundamentalmente con efectos secundarios digestivos y por alteración de la flora. Actualmente se propone retirar estas etiquetas directamente sin que se precise realizar estudios1,2,5.
Excluyendo los casos que se consideraron falsas etiquetas, en el resto de los que presentaron alguna manifestación de reacción alérgica de bajo riesgo podrían ser candidatos a la realización de una prueba de tolerancia oral directamente5. Según se propugna, el estudio de los pacientes de bajo riesgo podría ser llevado a cabo en el primer nivel asistencial5.
FinanciaciónEste estudio no ha recibido ningún tipo de financiación.
Consideraciones éticasEl estudio fue realizado siguiendo las directrices de la Declaración de Helsinki y fue aprobado por el Comité de Ética de la Investigación con Medicamentos del Principado de Asturias en abril de 2024.
Conflicto de interesesLos autores no tienen ningún conflicto de intereses.





