La exclusividad de la dispensación de las especialidades farmacéuticas publicitarias (EFP) en las oficinas de farmacia, Internet, los sistemas individualizados de dosificación y el Pacto de Estado para el control del gasto público en medicamentos fueron los principales temas de discusión en el Congreso de Oficina de Farmacia y Muestra de EFP y Parafarmacia Infarma 2001, celebrado el pasado mes de febrero en Barcelona. Más de 800 congresistas, 288 expositores y cerca de 15.000 visitantes son prueba del éxito de la convocatoria, que estuvo organizada por el Colegio de Farmacéuticos de Barcelona e Interalia. Sobre estos temas tienes amplia información en las páginas interiores de este número.
Con el mismo interés se espera la celebración, los días 21 a 24 de marzo en Valencia, del Congreso Empresarial de Oficinas de Farmacia que, como su propio nombre indica, se centra en la vertiente económico-financiera de la farmacia como empresa. Esto es algo verdaderamente importante en la actualidad, pues son numerosas las incógnitas que planean sobre nuestro futuro y entre ellas cabría destacar la del resultado de la implantación de los genéricos y los precios de referencia: ¿están consiguiendo frenar el incremento de la factura farmacéutica tal y como se pretendía con su aplicación?
Lo que sí ha quedado patente para los que asistimos a la mesa redonda de Infarma titulada «La influencia del medicamento en el sistema sanitario: ¿es posible un pacto?» es la facilidad con la que los políticos saben estar «a las maduras». En dicha mesa redonda todos los representantes de las fuerzas políticas allí presentes aseguraron que el modelo español de farmacia es uno de los mejores del mundo, pero a la hora de defenderlo cuando y donde compete, esto es, cuando toca estar «a las duras», se echan atrás y no son capaces de aplicar medidas que podrían suponerles un coste político o, en otras palabras, una disminución en el número de votos.
En estas circunstancias hay que pensar que lo fundamental sería cambiar el modelo de retribución del farmacéutico y demostrar que sus actuaciones implican un ahorro para el Sistema Nacional de Salud. Pero esto hay que demostrarlo, algo que sólo se conseguirá implantando protocolos homogéneos de actuación, documentando las intervenciones farmacéuticas y llevando un control estadístico de las mismas. En el fórum de Atención Farmacéutica que se celebrará el próximo mes de mayo en Granada tendremos ocasión de debatir estos temas.
Veremos lo que nos depara el futuro.