Evolución de los marcadores nutricionales tras el drenaje de la vía biliar en los enfermos con ictericia obstructiva maligna

Introducción. La desnutrición proteico-calórica es una complicación frecuente en los enfermos con ictericia obstructiva. El objetivo del presente estudio es analizar la evolución de los parámetros nutricionales tras el drenaje interno de la vía biliar.
Pacientes y métodos. En un estudio prospectivo y longitudinal se ha evaluado el estado nutricional en 21 enfermos con ictericia obstructiva maligna al ingreso y 10 días después del drenaje de la vía biliar. Se usaron un parámetro antropométrico (peso ideal < 95%) y dos bioquímicos (albúmina < 35 g/l y prealbúmina < 170 mg/l) para definir el estado de desnutrición. Se calculó también el índice pronóstico nutricional.
Resultados. Dieciocho enfermos (86%) presentaron criterios de desnutrición al ingreso. Tras el drenaje interno de la vía biliar no se observaron modificaciones en los parámetros antropométricos ni en las proteínas viscerales de vida media larga. La prealbúmina, la transferrina y los linfocitos totales (p < 0,01) mejoraron de forma significativa. El porcentaje de enfermos con criterios de desnutrición descendió del 86 al 52,5% (p < 0,05). También mejoró el índice pronóstico nutricional (58,7 ± 11 frente a 47,5 ± 12; p < 0,05).
Conclusiones. Aunque tras el drenaje interno de la vía biliar se ha observado una mejora significativa en el porcentaje de enfermos desnutridos y en el índice pronóstico nutricional, a los 10 días del mismo aún permanece un número importante de enfermos con índices de riesgo nutricional elevados.

Introduction. Protein calorie malnutrition is a common complication of obstructive jaundice. The objective of the present study is to analyze the changes in nutritional parameters following internal biliary drainage.
Patients and methods. A prospective, longitudinal study was carried out to evaluate the nutritional status of 21 patients with malignant obstructive jaundice at hospital admission and 10 days after biliary drainage. One anthropometric parameter (body weight < 95% ideal weight) and two laboratory parameters (albumin < 35 g/l and prealbumin < 170 mg/l) were employed to define the degree of malnutrition. The prognostic nutritional index (PNI) was also calculated.
Results. Eighteen patients (86%) fulfilled the criteria for malnutrition at admission. Following internal bile duct drainage, no changes were observed in the anthropometric parameters or in visceral proteins of long half-life. Prealbumin and transferrin levels and total lymphocyte counts were significantly improved. The percentage of patients fulfilling the criteria for malnutrition decreased from 86% to 52.5% (p < 0.05). The PNI also improved (58.7 ± 11 versus 47.5 ± 12; p < 0.05).
Conclusions. Although significant improvements are observed in the percentage of malnourished patients and the PNI 10 days after internal biliary drainage, a considerable number of patients continue to present elevated degrees of nutritional risk