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Vol. 79. Núm. 2.
Páginas 80-85 (Abril - Junio 2015)
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Vol. 79. Núm. 2.
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Actualización en Radiología
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Variantes anatómicas del septum pellucidum
Anatomical variations of septum pellucidum
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P. Sartori
Autor para correspondencia
, V. Anaya, Y. Montenegro, M. Cayo, G. Barba
Servicio de Tomografía Computada y Resonancia Magnética, EDES, Hospital Español, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina
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Tabla 1. Límites del septum pellucidum
Tabla 2. Límites del cavum septum pellucidum
Tabla 3. Límites del cavum vergae
Tabla 4. Límites del cavum del velo interpósito
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Resumen

El septum pellucidum es un fino tabique formado por dos láminas gliales dispuestas entre el cuerpo calloso en dirección cefálica y el trígono ubicado caudalmente.

Durante la vida embrionaria existen variantes anatómicas del septum pellucidum que se disponen en sentido rostro-dorsal. Estas son el cavum del septum pellucidum, el cavum vergae y el cavum velum interpositum. Su presencia o ausencia puede estar relacionada con alteraciones del desarrollo del sistema nervioso y trastornos cognitivo-psiquiátricos, por lo que deben conocerse bien para evitar diagnósticos erróneos.

Palabras clave:
Septum pellucidum
Cavum septum pellucidum
Cavum vergae
Cavum velum interpositum
Abstract

Septum pellucidum consists of a two thin laminae situated caudal to the corpus callosum and cephalic to the fornix (trigonum).

Anatomical variations of septum pellucidum appear during fetal life in the ventro-dorsal position. These variations are: cavum septi pellucidi, cavum vergae and cavum veli interpositi. The presence or absence of these cavities can be related to the presence of nervous system or neuropsychiatric dysfunction, therefore they have to be well known to avoid a wrong diagnoses

Keywords:
Septum pellucidum
Cavum septum pellucidum
Cavum vergae
Cavum vellum interpositum
Texto completo
Introducción

Durante la vida intrauterina existen en la línea media estructuras cavitadas normales que suelen persistir en la adultez y que no deben confundirse con entidades patológicas. Conocerlas es importante, ya que pueden resultar predictivas de enfermedades neurológicas o neuropsicológicas concomitantes. En el presente artículo revisamos el septum pellucidum (SP) y sus variantes anatómicas.

En latín, la palabra septum (saepire) significa valla o tabique, mientras que pellucidum o perlucidum se traduce como translúcido. Así, el SP (o lucidum) es un delgado tabique medial de morfología triangular, formado por dos láminas nerviosas adheridas que se localizan ente el cuerpo calloso y el trígono (fórnix) (fig. 1)1–5. En 1966 Andy y Stephen lo denominaron “septo telencefálico” (septum telencephali)6. Sus límites se establecen en la tabla 11,4–6.

Figura 1.

Resonancia magnética de cerebro, corte axial en ponderación T2: se señala el septum pellucidum (lucidum) normal (flecha).

(0,15MB).
Tabla 1.

Límites del septum pellucidum

Límite  Estructura 
SUPERIOR  Cara inferior del cuerpo del cuerpo calloso 
ANTEROINFERIOR  Cara superior de la rodilla del cuerpo calloso 
POSTEROINFERIOR  Cuerpo y pilares del trígono 
LATERAL  Pared medial de las prolongaciones frontales de los ventrículos laterales 
MEDIAL  Espacio virtual con septum contralateral 

El SP sirve como estación de relevo, conteniendo fibras que se comunican con el hipocampo e hipotálamo2. Su ausencia completa ocurre en 2-3 personas cada 100.000, siendo un predictor de anomalías encefálicas, como: displasia septo-óptica, anomalías del cuerpo calloso, holoprosencefalia, lisencefalia o malformación de Chiari6,7.

Durante la vida intrauterina existen tres cavidades potenciales localizadas en la línea media entre los ventrículos laterales. Estas involucionan entre el séptimo mes de vida fetal y los 2 años de vida extrauterina, aunque pueden perdurar en la adultez o producirse ante determinadas circunstancias8,9.

Las cavidades, descritas por primera vez en el año 1600, son: el cavum septum pellucidum (CSP), el cavum vergae (CV) y el cavum del velo interpósito (CVI). Se presentan con una prevalencia del 0,14%8–10.

Es importante remarcar que estas cavidades están en contacto directo con el espacio subaracnoideo, pero que no tienen comunicación ni son consideradas como parte del sistema ventricular. Debido a que no están revestidas por tejido ependimario ni poseen plexos coroideos, no producen líquido cefalorraquídeo (LCR)3,9–11.

1) Cavum septum pellucidum: se conoce también como cavum septi pellucidi, ventrículo del tabique o quinto ventrículo (fig. 2)3,8,10,12. Se encuentra en todos los fetos de 36 semanas y permanece en el 36% de los nacidos a término, aunque, de estos, solo en un 6% se mantiene después de los 6 meses de vida extrauterina3,4,7,11–13. Es significativamente más frecuente en mujeres3.

Figura 2.

Esquema del cavum septum pellucidum en cortes axiales y sagital.

(0,03MB).

El CSP es parte del desarrollo normal. A partir de la semana 12 de gestación, el cuerpo calloso se forma desde la lámina terminal como un haz de fibras que conecta los dos hemisferios y origina también el SP. El espacio entre las dos láminas que no logran fusionarse, ubicado entre los cuernos frontales de los ventrículos laterales y anterior al foramen de Monro, se denomina CSP (fig. 3)10,11,14.

Figura 3.

Resonancia magnética de cerebro, corte axial en ponderación T1: se aprecia la presencia de una cavidad triangular entre las prolongaciones frontales de los ventrículos laterales, conocida como cavum del septum pellucidum (cabeza de flecha).

(0,13MB).

Existen numerosas teorías sobre su origen, pero se cree que durante el desarrollo embrionario y fetal la masa de células que ocupa el lugar del SP participa en el desarrollo de la placa comisural. La eliminación selectiva de este conjunto celular conduciría (por necrosis) a la concentración molecular de grandes cantidades de aminoácidos, lo que atraería líquido para equilibrar la presión oncótica en la placa. La presión de este líquido sería la responsable de la formación del CSP12. Sin embargo, otra hipótesis ubica su origen en la infancia, por las numerosas sacudidas, cuando se mece bruscamente al infante para tratar de consolarlo12.

El CSP es un espacio de forma triangular que se desarrolla entre las dos láminas del septum pellucidum (sus límites se detallan en la tabla 2)3,4,8,10,12,13,15,16. Puede presentarse aisladamente o asociado al cavum vergae, con el que se comunica a través del acueducto caudae septo o acueducto ventriculii vergae7,8.

Tabla 2.

Límites del cavum septum pellucidum

Límite  Estructura 
ANTERIOR  Rodilla del cuerpo calloso 
POSTERIOR  Cuerpo y columnas anteriores del trígono 
SUPERIOR  Borde inferior del cuerpo del cuerpo calloso 
INFERIOR  Pico (rostrum) del cuerpo calloso y la comisura blanca anterior 
LATERAL  Láminas del septum pellucidum 

Funciona como un importante marcador para la evaluación del correcto desarrollo del neuroeje del feto. Su ausencia aislada es rara, ya que la no visualización por ultrasonido (US) o resonancia magnética (RM) en la vida fetal se asocia a malformaciones encefálicas, como holoprosencefalia, displasia septo-óptica, agenesia de cuerpo calloso, enfermedad de Alexander, esclerosis tuberosa, facomatosis, pinealoma, trisomía del par 21 y esquisencefalia3,10,12,14,16.

Considerando el desarrollo embrionario, no puede existir CSP sin el desarrollo del cuerpo calloso, por ende la agenesia del cuerpo calloso siempre está asociada con agenesia del SP3,4.

Existen estudios de US en los que se logra detectar al CSP en un 100% de los fetos entre las semanas 18 y 37, en un 79% entre las semanas 38 y 41, y en los neonatos se observa el cierre completo posterior en un 97%, por lo que el CSP está presente cuando el cavum vergae está ausente16. De esto se desprende que la visualización del CSP entre las semanas 18 y 20 implica un normal desarrollo encefálico16.

En pacientes con esquizofrenia o en personas agresivas, alcohólicas o con trastornos en el desarrollo neurológico, hay una alta prevalencia de CSP alargado3–5,11,14,15,17,18. Al respecto, fue De Greef el primero en reportar la asociación entre el CSP y la esquizofrenia11.

Algunos autores mencionan una asociación entre la actividad pugilística (boxeo) y la aparición de CSP debido a la reiteración de trauma encefálico, así como también se comunica una asociación entre CSP y trastornos de estrés postraumático, generalmente en individuos vinculados al ámbito castrense que participan o participaron en conflictos bélicos2,3,5,12,13,15,17.

Existen distintas clasificaciones para el CSP. Una de ellas se basa en si este se comunica a través de fenestraciones con los ventrículos laterales, dividiéndolo en comunicante o no comunicante (más frecuente)2,13. Sin embargo, otra clasificación se focaliza en las características asintomáticas (comunicante o no) y sintomáticas (no comunicante), pudiendo en el último caso ser simple, no complicado o complicado por lesiones encefálicas12.

2) Cavum vergae: descrito por al anatomista italiano Andrea Verga en 1851 (al cual debe su nombre), se lo conoce también como cavum fornicis, cavum psalterii, Verga's ventricule, ventrículo de Strambio, ventrículo triangularis o sexto ventrículo10,12,13. Constituye la extensión posterior del CSP, prolongándose hasta las columnas posteriores del trígono y el agujero de Monro (fig. 4)9,10,13. Tiene un aspecto triangular (sus límites son enumerados en la tabla 3)4,5,10,13.

Figura 4.

Esquema del cavum septum pellucidum asociado al cavum vergae en cortes axiales y sagital.

(0,04MB).
Tabla 3.

Límites del cavum vergae

Límite  Estructura 
ANTERIOR  Columna anterior del trígono (crus
SUPERIOR  El cuerpo del cuerpo calloso 
POSTERIOR  El esplenio del cuerpo calloso 
INFERIOR  La comisura hipocampal y el psalterium (lyra davidis

Su desarrollo comienza al 5.° mes de gestación y desaparece a los dos meses de vida extrauterina10. El 30% de los neonatos normales posee CV, pero posteriormente este involuciona y desaparece13.

La incidencia del CV es de 2,3% cada 1032 cerebros examinados, y es importante remarcar que casi siempre se asocia al CSP7,9,10,13. Cuando el CSP está dilatado, también lo está el CV, ya que se unen a través de un defecto del fórnix que no se encuentra en contacto con el cuerpo calloso10 (fig. 5).

Figura 5.

Resonancia magnética de cerebro, corte axial, en ponderación T2: se observa una cavidad que contiene líquido cefalorraquídeo y se interpone entre los ventrículos laterales (asterisco). El hallazgo es compatible con cavum septum pellucidum asociado a cavum vergae.

(0,12MB).

Algunos autores mencionan una mayor prevalencia de dilatación del CSP o del CV en pacientes con esquizofrenia10.

3) Cavum del velo interpósito: descrito por primera vez por Kruse y Schaetz en 19309,10, se lo denomina también cisterna interventricular, ventriculi tertii, fisura transversa o fisura subtrigonal9. Su incidencia varía, según distintos autores, entre el 21-34%, y su persistencia en la vida posnatal es infrecuente, mientras que en los niños de 1 a 10 años de edad es del 30%, sin presentar diferencias significativas entre géneros9.

Corresponde a una cisterna subaracnoidea que surge como prolongación de la cisterna magna y que se origina en el techo del diencéfalo, protruyendo en el tubo neural primitivo, aproximadamente en el tercer mes de vida intrauterina. Es una cavidad normal en el desarrollo del encéfalo9,10 (fig. 6) y su presencia no se asocia a trastornos neuropsiquiátricos o a alteraciones en el sistema límbico19.

Figura 6.

Esquema del cavum del velo interpósito en corte axial y sagital.

(0,04MB).

El CVI es una cavidad triangular de base dorsal localizada en la fisura coroidea (fig. 7). Sus límites están detallados en la tabla 44,9,10,13,19,20.

Figura 7.

Resonancia magnética de cerebro, corte axial FLAIR: se manifiesta una cavidad triangular cefálica al trígono, entre los ventrículos laterales, denominada cavum del velo interpósito (cabezas de flecha).

(0,12MB).
Tabla 4.

Límites del cavum del velo interpósito

Límite  Estructura 
SUPERIOR  Cuerpo calloso (borde inferior) y comisura hipocampal 
INFERIOR  Tela coroidea del III ventrículo y tálamos 
LATERAL  Crus del trígono 
ANTERIOR  Agujero de Monro 
POSTERIOR  Región pineal 
INFEROLATERAL  Venas cerebrales internas 

Es importante distinguir al CVI del CV. Una de las particularidades es que el CV siempre se asocia a CSP, pero además podemos diferenciar ambas entidades gracias a la ubicación de las venas cerebrales internas, ya que el CV se localiza de modo cefálico a estas, mientras que el CVI las rodea.

A su vez, hay que diferenciar al CVI del quiste aracnoideo de la cisterna cuadrigeminal o del quiste pineal. Este último está en dirección inferior a las venas cerebrales internas9,19.

Diagnóstico por imágenes del SP y sus variantes

El diagnóstico prenatal se realiza mediante ultrasonografía transabdominal y en caso de presentación cefálica, la vía transvaginal permite una mejor visualización de las variantes (fig. 8)10.

Figura 8.

Ecografía fetal, corte coronal: se visualiza el cavum septum pellucidum (asterisco).

(0,11MB).

Deben diferenciarse las columnas del trígono de un CSP para no cometer errores, así como también hay que tener precaución en los CSP alargados con presencia de CV, cuando este último desplaza lateralmente a las láminas del CSP, aparentando ausencia del mismo14,17.

Los diagnósticos diferenciales de un CSP alargado son: aneurisma de la vena de Galeno (cuyo diagnóstico se realiza reconociendo la anatomía de la región y con Doppler color), quiste aracnoideo y dilatación del III ventrículo (se diferencia por su localización intertalámica)14.

En el feto, el CSP y el CV se aprecian mediante US y RM, aunque esta última puede reemplazar al US en casos de obesidad materna u oligohidramnios3,5,14,21. Como ventaja, la RM delimita la glándula pineal de la cisterna cuadrigeminal o de los quistes pineales, diferenciándolos del CVI21.

La extensión anterior del CVI se observa mejor en los cortes axiales de la RM en ponderación T2; mientras que la extensión posterior también se puede apreciar con US, manifestándose como una imagen anecogénica en “casco invertido” (donde las venas cerebrales internas son la convexidad de este casco). El diagnóstico diferencial se realiza en base a la posición de las venas cerebrales internas, ya que los quistes aracnoideos comprimen el tectum hacia el cerebro y desplazan a las venas cerebrales internas cefálicamente, contactando con el esplenio del cuerpo calloso (lo que los diferencia del CVI)21.

Conclusión

Las variaciones anatómicas del septum pellucidum deben reconocerse para no ser malinterpretadas como lesiones quísticas interhemisféricas, ya sea en la vida embrionaria o en la etapa posnatal.

Su reconocimiento durante la vida fetal actúa como predictor en la detección de malformaciones encefálicas o trastornos conductuales.

Conflicto de intereses

Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.

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