Objetivos docentes: Describir los hallazgos radiológicos de los diferentes tumores condro-óseos en partes blandas. Establecer el diagnóstico diferencial con otros tumores de partes blandas más frecuentes.

Revisión del tema: Ante la presencia de una masa de partes blandas, se debe realizar el diagnóstico diferencial con los diferentes procesos neoformativos según la última actualización de la clasificación de la OMS (2013), en la que se establecen 12 subgrupos tumorales. Los tumores condroóseos representan un porcentaje escaso dentro de esta clasificación, muy por detrás de otro tipo de lesiones más frecuentes como los de extirpe grasa, neurales, vasculares o fibrosos. Aunque en numerosas ocasiones su diagnóstico es difícil e inespecífico desde el punto de vista radiológico y únicamente puede confirmarse mediante anatomía patológica, los hallazgos radiológicos típicos de cada subgrupo tumoral, y concretamente los hallazgos mediante pruebas de imagen de los tumores condrales y óseos de partes blandas (similares a los descritos en los huesos), nos sirven para establecer un diagnóstico de sospecha, indicar si se trata de lesiones benignas o sospechosas de malignidad y en gran parte de los ocasiones pautar el tratamiento más apropiado (observación, completar estudio con otras pruebas radiológicas o realización de biopsia y planificación quirúrgica).

Conclusiones: Los radiólogos debemos conocer los hallazgos más frecuentes en las diferentes pruebas de imagen de los tumores condro-óseos extraesqueléticos para establecer un diagnóstico de sospecha e incluirlos en el diagnóstico diferencial de las lesiones de partes blandas.