Objetivos docentes: Ilustrar los hallazgos radiológicos que definen el mieloma múltiple. Evaluar las ventajas de la TC de baja dosis frente a la Rx simple en la detección y caracterización de lesiones, y su papel en la toma de decisiones terapéuticas.

Revisión del tema: Clásicamente, la principal herramienta de imagen en el diagnóstico del mieloma múltiple ha sido la realización de Rx simple en localizaciones típicas donde asientan las lesiones focales (serie ósea). Sin embargo, ésta técnica presenta algunas limitaciones frente a la TC de baja dosis. La TC es capaz de detectar lesiones líticas de pequeño tamaño (a partir de 5 mm) que suelen pasar desapercibidas en RX, permite una mejor visualización de algunas áreas anatómicas como arcos costales, esternón o escápulas, así como la evaluación de masas (plasmocitomas) o infiltración de partes blandas. Como contrapunto, la principal desventaja de la TC frente a la Rx simple es el incremento de la dosis de radiación. No obstante, la optimización y uso adecuado del protocolo de baja dosis reduce significativamente esta diferencia.

Conclusiones: A pesar de que la TC de baja dosis implica una mayor dosis de radiación frente a la serie ósea, permite una mejor detección y caracterización de las lesiones, con la consiguiente mejora en el manejo terapéutico del paciente.