Las dermatofitosis profundas son infecciones producidas por hongos dermatofitos que invaden estructuras localizadas más allá de la epidermis, pudiendo comprometer el tejido celular subcutáneo. Se observan generalmente en pacientes inmunocomprometidos, siendo raras en pacientes sin compromiso del sistema inmune. Presentamos 2 casos de dermatofitosis profundas en pacientes inmunocompetentes.
Casos clínicosEl primero de los casos se trata de una paciente de 30 años de edad, sin antecedentes patológicos de interés, que acude a nuestro servicio por lesiones cutáneas localizadas en el pubis, los genitales externos y los glúteos de un mes de evolución aproximadamente.
En la exploración física se apreciaba edema en la zona pubiana, así como lesiones a modo de pápulas y pústulas foliculares y perifoliculares, con carácter confluente, y algunos nódulos dolorosos a la palpación (fig. 1A). En los glúteos presentaba lesiones de similares características, con cierta disposición arciforme. En la analítica sanguínea únicamente destacaba una discreta elevación de PCR. Se realizó biopsia de uno de los nódulos para estudio histológico, observándose una foliculitis supurativa profunda, con tinción plata-metenamina positiva. Se tomó así mismo una muestra para realizar cultivo microbiológico, con el que se consiguió aislar colonias de Trycophyton mentagrophytes (fig. 1B).
En el segundo caso la paciente, de 41 años de edad, presentaba como antecedentes personales albinismo e hipertensión arterial. Las lesiones cutáneas, de unos 3 meses de evolución, consistían en pápulas eritematosas, pústulas y nódulos inflamatorios de predominio en la cara anterior de ambas extremidades inferiores, algunos con descamación superficial (fig. 2A). El hemograma y bioquímica resultaron normales y la serología para virus hepatotropos y VIH fue negativa. En el estudio histológico se observó un granuloma supurativo en el tercio inferior de la dermis formado por polimorfonucleares neutrófilos, organizado alrededor de estructuras micóticas con tinción positiva para PAS y plata-metenamina (fig. 2B). El cultivo de hongos fue positivo para Trycophyton mentagrophytes, al igual que el caso anterior.
En ambos casos las pacientes recibieron tratamiento sistémico con itraconazol oral con buena respuesta clínica.
ComentarioLas dermatofitosis son infecciones producidas por 3 géneros de hongos: Microsporum, Trycophyton, Epidermophyton, los cuales tienen capacidad para invadir el tejido queratinizado. Si bien los hongos dermatofitos suelen invadir las capas externas de la piel, las manifestaciones clínicas y la gravedad de las mismas dependen en gran medida del estado del sistema inmune, de tal manera que aquellos pacientes con inmunodeficiencia son mucho más susceptibles de padecer infecciones más profundas y más extensas, incluso con invasión linfática y hemática1–3. Las dermatofitosis profundas son, pues, infecciones micóticas que pueden afectar hasta el tejido celular subcutáneo y cuya frecuencia es rara en pacientes inmunocompetentes4. Se presentan en la mayoría de las ocasiones en pacientes inmunodeprimidos por infección VIH, tratamiento inmunosupresor por trasplante de órganos, discrasias sanguíneas, corticodependencia o diabetes mellitus, entre otras causas. Asimismo, las condiciones sociosanitarias y la higiene personal desempeñan un papel importante en la extensión de las lesiones. Desde el punto de vista clínico pueden presentarse de forma variada, desde papulopústulas hasta nódulos subcutáneos calientes y dolorosos, abscesos o placas. En nuestro caso el dermatofito responsable fue Trycophyton mentagrophytes, el cual pertenece a los dermatofitos zoofílicos y es responsable de buena parte de las tiñas inflamatorias en nuestro medio5–7. Han sido varias las formas de hacer referencia a las dermatofitosis profundas, destacando la perifoliculitis nodular granulomatosa de Wilson o el clásico granuloma tricofítico de Majocchi, entidades poco frecuentes que se producen por la rotura de los folículos pilosos y su penetración en la dermis, donde se comportan como cuerpo extraño8,9. Nuestras pacientes presentan una forma inflamatoria y profunda de dermatofitosis, cuya extensión resulta llamativa por la ausencia de antecedentes de inmunocompromiso.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.