Presentamos el caso de una paciente de 37 años que acude por pérdida de visión bilateral de instauración súbita y cefalea occipital de gran intensidad. No se detectaron anomalías neurológicas más allá de la descritas en los datos clínicos y el único hallazgo relevante de la analítica fue la detección de marihuana en orina. Considerando el diagnóstico de ictus se decidió realizar una TC de cerebro, en la que se observaron lesiones hipodensas subcorticales occipitales bilaterales, con hemorragia subaracnoidea (HSA) focal en la convexidad parietal izquierda (figs. 1 A y B). Ante la sospecha de síndrome de vasoconstricción reversible (SVCR) se decidió ampliar la exploración con una angio-TC que mostró irregularidades parietales en los vasos intracraneales (fig. 1C). La RM de cerebro realizada durante su estancia hospitalaria reveló lesiones hiperintensas en T2-FLAIR subcorticales atribuibles a edema vasogénico en ambos lóbulos occipitales (fig. 2). El cuadro clínico y los hallazgos de imagen se resolvieron en un período menor de 2 meses.
El SVCR es un cuadro poco conocido, casi exclusivo de mujeres de edad media, provocado por alteraciones transitorias, segmentarias y multifocales de la vasculatura intracraneal1. Tiene una relación estrecha con el síndrome de vasoconstricción posterior reversible (PRES), por lo que sus hallazgos clínicos e imagenológicos se solapan en algunas ocasiones2. Aunque inicialmente se lo asociaba únicamente al embarazo, se ha demostrado que existen múltiples factores etiológicos asociados, como el consumo de tóxicos y el antecedente de traumatismo1,2. La presentación clínica más común es la de cefalea occipital intensa de instauración súbita que imita la rotura de un aneurisma intracraneal, acompañada de náuseas, vómitos, fotofobia y focalidad neurológica transitoria1,3. Esta focalidad suele ser visual, sensorial, disfásica o motora3. La detección de hemorragia subaracnoidea focal en ausencia de traumatismo, en el contexto clínico adecuado, debe sugerir el diagnóstico de SVCR4. En los estudios angiográficos frecuentemente se observan irregularidades focales de las paredes vasculares1,3. Para su diagnóstico es indispensable la resolución clínica y radiológica en un período menor de 3 meses1,3.